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Aparecieron en un lugar completamente distinto, aunque no pusieron ni atención al principio por el mareo y las náuseas qué comenzaron a tener por el "pequeño viaje", comenzaron a sentir el ligero frio y todos vieron impresionado la enorme ventana.

—¡Es el espacio!— Knuckles hablo animadamente, viendo la tierra y sus colores.

Amy agitaba su colita emocionada por la vista.

—¡Debí de haber traido mi cámara!— Sonic sonrió ante el comentario de su hermano y vio de reojo a los agentes.

Maria acariciaba el rostro de Shadow, parecía que intentaban animarse y Shadow besaba la pequeña palma, prometiendose algo que no logro entender, de alguna forma, había descubierto qué ambos se hablaban en una lengua completamente desconocida.

—Necesitamos encontrar a Eggman.— Knuckles golpeo sus puños, preparado para lo que sea.

—Necesitamos encontrar las esmeraldas, aunque tenga una, el cañón funcionará.—

—¡Hay que separarnos!— Y Sonic rápidamente se fue, inquieto por estar tanto tiempo inactivo.

—Pero...— Shadow gruño y alboroto sus púas. Amy, Knuckles y Tails intentaron no reír ante la escena—. ¿¡Cómo puede ser tan imprudente!?

—Lo siento, es muy hiperactivo.— Tails sonrió tímida mente, con las orejas hacia abajo.

—Tranquilo, ustedes usen su método. Se conocen mejor.— Los tres asintieron y corrieron juntos, supuso qué después se iban a separar. El azabache busco entre sus púas—. ¿Shadow?

—Prefiero que tu tengas la esmeralda.— Maria asintió, tomando la antigua joya qué le ofrecían y vio como Shadow emprendia su camino de manera veloz.

Su sonrisa desapareció y de reojo vio hacia la luna. Sus zafiro demostraron un destello rojo, sus labios se apretaron y sus puños se herian con sus propias uñas.

—Veremos que tiene que decir mi primo...—

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Tails se detuvo cuando logro encontrar lo que era la fuente de poder, se animó rápidamente entrando en la habitación y se dirigió a la gran instalación, pudo ver un detalle en el piso, pero lo ignoro. Desidido y con la esmeralda falsa en ambas manos, camino hasta uno de los huecos, distrayendo se por un momento en lo que parecía ser un séptimo lugar para otra Esmeralda.

—Necesito la esmeralda si quieres ver a tu amiga.— Eggman entro por otra de las puertas con Amy del cuello.

La eriza se agitaba, intentando soltarse del fuerte agarre.

—¡Amy!— Rápidamente retrocedio temeroso. Eggman no aflojo su agarre, en cambio, con una gran sonrisa comenzaba a dirigirse hacia el zorro.

Su andar fue detenido por lo que parecía ser unos disparon en el suelo, rápidamente giraron.

—¿M-Maria?— Veía impresionado a la chica frente a él, de arriba a abajo, desde los pies hasta la coronilla.

La mayor parte del tiempo la había conocido por fotografías que le mandaba su abuelo debido a su enfermedad, pero eran los mismos rasgos de la chica que aparecía en esos viejos papeles.

—Estabas muerta...— La sorpresa de los antropomorfos fue de mostrada por jadeos de sorpresa.

—Te impresionaria saber que Shadow no es un arma como lo contó el abuelo.—

—Shadow es mi legado.— El enojo creció y era palpable en el calvo. María sonrió con sorna.

—No lo creo, primo.—

Una diferencia. (Sonadow)Where stories live. Discover now