Sanar para amar

Capítulo 5: Señales

POV Alex
Después de todo lo que sucedió en la tienda y de haber comprado el bendito monitor al fin llegue a la oficina.
Subí por el elevador y camine hasta llegar a el estudio de grabación.
En cuanto abrí la puerta vi cinco rostros volteándome a ver.
Una de ellas se paró y se acercó a mi.
-¡Alex! ¡Hasta que al fin llegas! ¡Pensábamos que te había pasado algo! ¿Había escasez de monitores o que?
Era mi jefe Rodrigo, por su expresión no sabía si estaba enojado, preocupado, aliviado o feliz.
-Lo siento, tuve un pequeño... inconveniente, pero ya traje el monitor.
-¿Que clase de inconveniente?
-Pues... fui a la tienda y resulta que otra chica medió acelerada quería justo el mismo monitor que yo y pues peleamos un poco- al ver la cara de horror de mi jefe agregué- Pero no pasó nada, solo fue una discusión, una vez arreglado el problema fui a otra tienda a buscar el monitor.
Todos los presentes se quedaron en silencio con caras de confusión y horror.
-Bueno... mientras no nos demanden todo bien.
Lo importante es que ya trajiste el monitor.

Instalamos el monitor y seguimos trabajando en los borradores de canciones que teníamos.
Aún no me convencían, les faltaba algo y tenía que averiguar que pronto.

A las 6pm salí de la oficina y fui a recoger a Isabela a casa de Saak, mi mejor amigo.
Le pedí el favor de que la recogiera de la escuela después de todo lo del monitor.
Llegue a su depa y toque el timbre.
-¿Quien?
-Yo
-¿Yo quien?
-No te hagas el chistoso, abre la puerta.
-Tranquilo, solo bromeaba.
Saak abrió la puerta y entre en el departamento.
-¿Y ahora porque estás de malas?
-Fue un día largo, eso es todo
-Que lastima, nosotros nos la pasamos muy bien ¿verdad, Isa?
-Sii- Isabela vino corriendo hacia mi y se lanzó a mis brazos- ¡Tio Saak y yo jugamos a las princesas! ¡Se veía muy chistoso con el vestido!
-Yo diría que me veía muy bien, pero respeto tu opinión.
Abrace a Isa y le dimos las gracias a Saak, salimos del depa y nos subimos al coche.
-¿Como te fue en la escuela, corazón?-le pregunté a Isa una vez arriba del carro
-Bien papi ¿a ti como te fue en el trabajo?
-Bien, cariño ¿te cuento que me paso en la tienda?
Le conté lo que había pasado con Danna y cuando termine Isabela se estaba carcajeando.
-¿Tumbaste a una señora? Jajajaja
-Si, bueno, fue un accidente.
-¿Y no se enojo?
-Si, nos sacaron de la tienda por eso.
-¿Te sacaron de la tienda? ¿La policía? ¿Te arrestaron?
-Jaja no, solo me sacaron por hacer desorden, pero no pasó nada.
-Tu día suena muy divertido, yo debería de ir contigo al trabajo.
-Normalmente no es así, te aburrirías mucho si fueras conmigo al trabajo.
-Que mal, yo quería ir a trabajar.
-Tendrás mucho tiempo para trabajar cuando seas grande, créeme.

Después de un rato llegamos a la casa y lo primero que hice fue abrir el refrigerador, me estaba muriendo de hambre.
-Mmm, creo que tendremos que ir al súper, no hay nada en el refri.
-¿Puedo elegir yo la comida?
-Puedes escoger una cosa, si te dejo escoger todo vamos a comer pura azúcar.
-Mmm, ok.
Nos subimos de nuevo al coche y fuimos al súper más cercano.

💙

Estacione el coche y agarre un carrito de compras.
-Papi- voltee a ver a Isa- ¿Me puedo subir en el carrito?
-Si, princesa- la ayude a subirse- ¿Que vamos a comprar primero?
Isa observó el súper y señaló la zona de las frutas y verduras.
Fuimos con el carrito y empezamos a escoger la fruta: plátano, manzana, papaya, piña y peras.
Luego escogimos las verduras: brócoli, calabaza, zanahoria y papa.
-Voy a hacer una ensalada ¿que le ponemos?-le pregunté a Isa.
-Mmm, lechuga, tomate, fresas y no se.
-Ok- los eche al carrito de compras- voy a llevar espinaca también.
-¡No! La espinaca sabe feo.
-Pero te ayuda a crecer sana.
Isa resoplo y puso cara de asco.
-Jaja, la voy a echar en el licuado y así ya no te va a saber.
Seguimos avanzando y comprando algunas cosas más para la casa, llegamos al pasillo de lácteos y nos paramos ahí.
-Vamos a llevar leche, yogurt y podemos llevar waffles para el desayuno.
-¡Yei!
Camine a la zona de waffles y abría la puerta al mismo tiempo que otra persona.
Voltee y casi suelto un grito.
-¿Danna? ¿Me estás siguiendo o que? ¿También te vas a llevar los mismos waffles que yo?
Ella se veía igual de sorprendida que yo, después de lo que dije su expresión cambió a una de irritación y diversión.
-Mira que conveniente ¿no serás tú el que me está siguiendo?
-No, no lo creo.
-Mira tu, para tu información no me voy a llevar los mismos waffles que tú, yo me voy a llevar los de matcha y tú ibas a agarrar los normales.
Ya aprendi a nunca querer lo mismo que tú.
Empece a reír, de verdad que este día había sido el más random, me había encontrado dos veces con la misma persona.
-¿Por que siempre te estás riendo? ¿Tienes algún problema o que?
Me reí con más fuerza, me había reído más hoy que en los últimos dos años.
-No, no tengo ningún problema, simplemente me da risa la situación, me he encontrado contigo dos veces en un día.
Ahora fue el turno de ella de soltar una pequeña risa.
-Tienes razón, es bastante extraño, si me vuelvo a encontrar contigo de verdad voy a pensar que me estás siguiendo.
-Está bien, yo también pienso que me podrías estar siguiendo así que estamos a mano.
-Papi -Isabela me jalo de la camisa- ¿Quien es ella?
Danna pareció apenas darse cuenta que Isabela estaba ahí.
-Es...-¿quien era? Solo me la había encontrado por casualidad, dos veces- Es la chica del monitor.
-¿A la que tumbaste?
Intente contener la risa al ver la cara de sorpresa y vergüenza de Danna.
-No, ella fue con la que me pel...discutí por el monitor.
-Ahh- se acercó a mi y me susurró- ¿No será alguna admiradora tuya o algo? Ya te la has encontrado dos veces hoy.
-No, no soy una admiradora suya, solo es una coincidencia que nos hayamos encontrado- dijo Danna a Isa con una pequeña sonrisa
Isabela la miro con una mirada de sospecha.
-Bueno, tengo que seguir con mis compras- dije al tiempo que echaba los waffles al carrito.
Seguimos al pasillo de cereales cuando escuche que alguien gritaba:
-¡Espera!- vi a Danna correr detrás de nosotros y parar para agarrar aire- Eres productor musical ¿cierto? Se que has compuesto canciones para algunos artistas.
Asentí con la cabeza, no sabía para que me estaba preguntando eso ni como lo sabía.
-Bien, estoy trabajando en la colección de otoño para la compañía en la que trabajo y... pensé que podía agregar música a la colección, como un soundtrack para la pasarela o algo así.
Claro, primero tengo que mostrarle mis ideas a mi jefa y preguntarle lo de la música, pero, si me dice que si ¿me ayudarías con lo de la música? Te pagaríamos, obvio.
Tenía una mirada dudosa, de vergüenza y esperanza al mismo tiempo.
La verdad me sorprendió que quisiera mi ayuda sin haber escuchado nada de mi trabajo y aún más considerando lo que había pasado últimamente.
Al parecer ella se dio cuenta de lo que estaba pensando porque bajo la cabeza y dijo en voz baja:
-Si no quieres, no puedes o estás ocupado, lo entiendo. Se que es un poco raro que te pregunte esto sin conocerte pero eres el único productor que conozco y ya no me queda tiempo para encontrar a alguien más.
Sonreí, la verdad es que yo también tenía que hacer muchas cosas en poco tiempo, pero no tenía inspiración y solo estaba perdiendo mi tiempo, quizá nos podíamos ayudar el uno al otro.
-Está bien, te ayudo con la música- ví como alzo la cabeza sorprendida y sonrío- Solo te digo que también tengo trabajo y tengo que cuidar a Isa, así que no se cuanto tiempo le pueda invertir
-Está bien, no importa -me extendió la mano y yo la estreché- ¿Me pasas tu número? Yo te escribo si me dicen que si para ver cuando nos vemos.
-Ok.
Le pase su número y ella me pasó el suyo, se fue a otro pasillo e Isa y yo seguimos con nuestras compras y nos fuimos a casa.
Al llegar la agregue a mis contactos, preguntándome si todo esto era casualidad o estaba destinado a pasar.

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