White Wolf: Compañeros (Lb 3)

Emma

NATHAN

Podía oler su dulce aroma a mi alrededor. Olía a vainilla. Se me hacía agua la boca. Necesitaba verla necesitaba tocarla.

¿Dónde estaba?

Seguí mirando a mi alrededor, con la esperanza de finalmente poner mis ojos en ella, pero yo no podía encontrarla en ninguna parte. Ni siquiera presté atención a nada más no revisé el almacén. No miré el interior. Ni siquiera me di cuenta cuando entramos en la oficina de Alpha Logan.

Quería verla. Necesitaba verla.

'Mate'. - Noel gimoteó - 'Ella está aquí Quiero a mi compañera'.

"Pronto, Noel". - Le dije, intentando quedarme quieto.

Quería saltar, gruñir y encontrarla. Necesitaba encontrarla, joder.

Me senté en la silla frente al escritorio de Alpha Logan. Cada vez me costaba más concentrarme. Necesitaba a mi compañera. Todo mi cuerpo zumbaba de necesidad. Tuve que apretar los músculos para evitar saltar. Yo sabía que ella estaba aquí en alguna parte, pero el hecho de que yo no podía verla me estaba volviendo loco.

"¿Dónde está?" - pregunté, intentando contener un gruñido.

El alfa Logan frunció el ceño. Me odiaba tanto como yo a él. Lo sabía. Me daba cuenta lo entendía completamente. Era la única persona a la que quería muerta. Aunque fue peor para mí. Ya había tocado a mi compañera. La marcó. La probó.

Realmente lo quería muerto. Pero no podía matarlo porque perdería a mi compañera también.

"Andrew, ve a buscar a mi Luna" - Logan dijo, manteniendo sus ojos en mí.

No paraba de decir "mi Luna", sabiendo que me estaba cabreando. No podía esperar a ver su cara una vez que mi compañera entrara aquí y se diera cuenta de que yo era su compañero dada por la diosa. No podía esperar a ver la mirada en su cara cuando la llevé de vuelta a mi manada hoy.

Andrew salió de la habitación y mi corazón se aceleró. La vería. Por fin la vería. Por fin podría tocarla. El corazón me latía a mil por hora. Me hormigueaban los dedos. Tocaría a mi compañera en tan sólo unos momentos.

Noel saltaba de alegría. Estaba tan excitado y nervioso.

'¡Puedo sentir su lobo!' - me dijo - 'Ya viene'

Apreté la mandíbula para no gruñir

¡La quería ya!

Mi padre hizo una pregunta, pero ni Logan ni yo respondimos. Nosotros nos mirábamos el uno al otro. Él estaba tan tenso como yo.

Oí pasos que se acercaban al despacho. La puerta se abrió y el aroma de mi compañera se volvió embriagador El corazón me dio un vuelco.

"¡Compañera!" - Gruñí mientras me daba la vuelta.

Allí estaba ella.

Era jodidamente hermosa. Incluso más de lo que imaginaba. Llevaba el pelo castaño recogido en una coleta. Sus ojos azules brillantes. Su piel parecía suave y cálida. Sus labios carnosos parecían deliciosos.

Me moría de ganas de probarlos. Llevaba una falda lápiz y una blusa. Podía ver las curvas de su cuerpo perfectamente. Encajaría tan bien conmigo. Ya podía imaginarme poniendo mis manos sobre su cuerpo. Ya podía ver que encajaríamos como dos piezas de puzle.

Ella no dijo nada.

No dijo "compañero".

¿Por qué?

¡¿POR QUÉ?!

Mi corazón se aceleró mientras la veía entrar. Su hermano estaba junto a ella. Puso una mano en su espalda, y comenzó a guiarla hacia el Alpha Logan. Ella no protestó. Apartó la mirada de mí.

¡¿Por qué apartó la mirada de mí?!

"MÍA" - gritó Noel.

Vi como caminaba hacia Alpha Logan. Vi como la miraba y sonreía Vi cómo le ponía una mano en el hombro y se giraba para mirarnos a mi padre y a mí.

¿Qué coño estaba pasando?

La rabia dentro de mí estaba hirviendo, pero no podía moverme. Estaba en shock. Estaba tan jodidamente cabreado.

¡¿Por qué no vino a mí?!

"Alfa Nathan, Alfa Richard" - dijo con calma - "Encantada de conocerte".

Su voz era como una melodía. Me tranquilizó el alma. Logan le rodeó la cintura con el brazo y la acercó a él. La rabia dentro de mí explotó y no pude contener un gruñido.

"¡MÍA!" - Grité mientras me levantaba de un salto.

Mis garras y mis caninos se deslizaron.

¡Iba a matarlo, joder!

"Alfa Nathan, por favor siéntate para que podamos hablar" - dijo mi compañera, haciendo que la rabia dentro de mí desapareciera lentamente.

Su voz y su olor eran tan relajantes. Era imposible para mí no escucharla. Pero ¿por qué era tan formal conmigo? ¿Por qué seguía llamándome Alfa? Ella era la única que no tenía que llamarme así.

"¿Por qué me llamas Alfa, Emma?" - Le pregunté mientras mis garras y mis caninos se retraían - "No tienes que llamarme así. Soy tu compañero".

"Por favor siéntate, Alfa Nathan" - dijo su hermano, haciendo que la ira dentro de mí volviera.

"¿Por qué le ocultas la pareja a mi hijo?" - preguntó mi padre enojado - "Emma es la compañera de Nathan. Estamos aquí para llevarla a casa".

El Alfa Logan y el Beta Andrew gruñeron en voz baja.

"Yo soy tu pareja, Alfa Nathan". - Dijo Emma, haciéndome mirarla - "Pero no quiero serlo. Ya comparto un vínculo de pareja con Logan. Él es mi compañero, mi alfa y mi marido. Soy una loba marcada y apareada no voy a romper mi vínculo con mi pareja."

Mi corazón iba a dar un vuelco.

¡¿Qué coño acaba de decir?!

No pude haberla escuchado bien. La malinterpreté. Ella no acaba de decir que quería quedarse con el Alfa Logan. Ella No dijo que no quería ser mi compañera. ¡No dijo nada de eso!

"¡¿Qué?!" - preguntó mi padre enfadado.

Se levantó y apretó los puños. Estaba mirando a mi compañera, y yo vi jodidamente rojo. ¡Nadie la miraría así!

"¡Deja de mirarla así!" - gruñí a mi padre.

Volví a mirar a mi compañera y apreté la mandíbula.

"Soy tu compañera de Diosa, Emma". - Dije, apretando los puños y tratando de resistir el impulso de agarrarla. - "No puedes quedarte aquí. Tienes que volver a mi manada conmigo. Es tu sitio".

Mi cuerpo zumbaba con la necesidad de tocarla. Necesitaba sentir su suave piel bajo mis dedos. Necesitaba saborear sus labios suaves y carnosos. La necesitaba.
¡La necesitaba, joder!

¡No había forma de que la dejara quedarse aquí con él!

¡Ella era mía! ¡Jodidamente mía!