INOCENTE [KOOKV]

Capítulo 16

Le ofreció una tarjeta personal donde estaba su nombre completo y el número de teléfono.

Jin la recibió y la leyó.

"Gracias"

Quiso formular, pero no lo hizo. En cambio siguió su camino y luego continuó con su trabajo.

Escupió, en un basurero, el caramelo con el envoltorio y se maldijo internamente por casi caer ante el Alfa.

¿Desde cuando le importaba lucir bien para alguien?

No debió permitirlo. Tampoco debió recibir la tarjeta.

Suspiró pesado.

"Ojalá ese Alfa no me traiga problemas"

Pensó mientras cambiaba las sábanas de una camilla.

[...]

JungKook observó como los Omegas ingresaban al hogar del rubio y ni si quiera se despidieron de él. Debía fingir que no ser invitado por el menor no dolía.

"Quizá TaeHyung se arrepienta"

Pensó cabizbajo.

Se le ocurrió esperar sólo cinco minutos. Si Kim no salía y le mostraba la pizarra donde decía:

"Lo siento Alfa, por favor entra y cenemos juntos "
Se iría sin dudarlo. Diez largos minutos habían pasado y el menor no aparecía.

Se había maldecido internamente una y otra vez por lucir como un idiota desesperado.

-Vamos Omega...-murmuró observando fijo la puerta -Sal de tu casa y pídeme que me quede contigo-  Golpeó el volante de su carro cuando veinte minutos habían pasado.

Bufó alto y tomó su móvil, lo desbloqueó e ingresó a los contactos. Deslizó su dedo por la larga lista y marcó el número de un Omega que siempre estaba disponible para él.

Un solo tono y la voz del otro lado respondió.

-Alfa -Exclamó feliz de que por fin JungKook lo llame de nuevo -Estoy disponible-

Jeon sujetó fuerte, con su mano libre, su propio cabello y luego lo tiró hacía atrás.

-Te buscaré en diez minutos- Informó y luego cortó la llamada.

El Omega se quedó del otro lado hablando sólo. Kook encendió el motor y luego salió de allí ocasionado un fuerte chirrido, las ruedas del auto quedaron marcadas en el asfalto.

"Voy a sacar de mi mente a ese estúpido Omega, cueste lo que cueste"

[....]

JiMin se quitó sus bonitos zapatos y los dejó junto a los de su amigo pelirubio.

Luego observó el pequeño apartamento y sonrió -Tienes un lindo lugar aquí- Habló sincero mientras se colocaba al lado de Tae, quién lo tomó a modo de broma.

Pues el apartamento no era la gran cosa, eso era obvio.
También estaba seguro que el tamaño del apartamento en si, era más pequeño que la habitación del pelinegro.

-Parece hogareño, lo contrario al mío que tengo padres ausentes - Siguió hablando luciendo algo triste.

Pues los padres de JiMin Y JungKook eran, tambien, dueños de empresas en el exterior.
Sólo una semana al mes estaban en su hogar y en esa semana se la pasaban durmiendo o realizando actividades en las que ellos no estaban incluídos. El menor de los Jeon no recordaba haber tenido una cena familiar nunca.

Por eso JungKook hacía tantas estupideces en el Instituto, no había nadie en el hogar que lo castigara.
Pero eso no significaba que iban a ser felices.
Tae sintió la tristeza del Omega y se sintió mal por él, así que se le ocurrió tomar la mano contraria y sonreírle dulcemente.