Perfect Incident | Rocksan/Sanhyuk

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Cuando ambos se separaron, los ojos dominantes que antes intimidaban a Sanha para que le dé el dinero se convirtieron en los de un cachorro esperando su comida.

—¿Puedo invitarte a salir? —se sacó la capucha dejando ver su rostro, era el mismo alfa que Sanha había visto minutos atrás, el con excelente aroma y perfecto rostro.

—¿Q-Qué?... ¡No! ¡fuera de mi tienda!

—Lo siento... es que lo hacía por necesidad... —miró hacia el suelo separándose de Sanha.

—Bien, ahora LARGO —y lo echó de la tienda, pero el alfa se quedó afuera, como si esperara algo.

—¡Me llamo Minhyuk! —habló desde afuera de la tienda con una sonrisa.

El establecimiento quedó en silencio después de lo ocurrido.

—Sanha... ¡¿Acaso estás loco?! —Dongmin habló.

—No... la cosa es que ya no sabía qué hacer sin entregarle el dinero... y entonces de la nada pensé en que si lo besaba ya no querría robarnos... y miren que funcionó —sonrió tímidamente a sus amigos.

—Deberías haberlo hecho... mira cómo lo dejaste —y señaló al alfa sonriente que saludaba desde afuera—. ¿Cómo dijo que se llamaba? ¿Minhyuk? Creo que si, Minhyuk ahora está fuera esperando que salgas con él.

—Bien, pero no lo haré, miren el lado bueno, seguimos teniendo el dinero.

—Si... pero... ah, realmente eres único —y siguieron con su trabajo.

Todo ese pequeño incidente le hizo pensar a Sanha que además de cámaras de seguridad, necesitaban un guardia, mañana colocaría un aviso para buscar uno.

—¿Tienen hambre? Ya es medio día —Sanha solía comprar comida para todos, pareciera que sus amigos están con él por conveniencia e interés, pero muchas veces ellos también invitaban la comida, aunque sabían que Sanha tenía mucho dinero y un almuerzo no era nada, no querían hacerlo.

—Si~ —Myungjun siempre tenía hambre.

—Vamos a almorzar entonces —sonrió ladeando su cabeza indicando a sus compañeros que se quiten el uniforme y vayan a almorzar.

Al salir, Sanha casi da un salto al ver nuevamente aquel alfa a su izquierda esperando específicamente por su salida.

—¿Ahora si saldrás conmigo?

—¡No! Por favor, ya vete —se dio la vuelta con sus amigos para ir a algún restaurante de por ahí.

—¡Te voy a estar esperando!~ —se sentó nuevamente donde estaba con una sonrisa, Minhyuk, más bien, Park Minhyuk, alfa dominante de 22 años, sabía que aquel lindo omega era su destinado y de alguna manera, sabía que Sanha notó aquello, solo que estaba resignado.

Minhyuk vivía en un pequeño apartamento compartido con otro alfa, este de 25 años, Minhyuk robaba para vivir, pero su compañero y amigo Moon Bin, trabajaba en dos empleos de medio tiempo en un súpermercado y una cafetería.

Pero su "trabajo" se vio seriamente detenido al ver a aquel omega, sus labios si que eran dulces, de querer robar su dinero pasó a querer robar su corazón.

—No puedes escapar de tu destinado, Sanhaa —no sabía su apellido, pero su nombre era realmente hermoso.

💍

—Hasta mañana —ya eran las 9:02 de la noche, estaban cerrando la tienda, cada uno se iba a su propia casa, Sanha vivía en una casa propia, algo grande para vivir solo, aunque era millonario no le gustaban las cosas tan grandes como una mansión, pero si tenía chefs, limpiadoras y jardineros personales, claro, que flojera hacer esas cosas.

El rubio omega caminaba por la calle como todas las noches, con audífonos puestos y en máximo volumen.

De pronto, 3 calles antes de llegar a su casa, sintió una mano en su hombro, pensó que nuevamente era aquel alfa Minhyuk pidiéndole una cita, aunque su aroma no era nada parecido.

Se dio la vuelta encontrándose con una mujer a la cual le calculaba 43 años de edad, antes de poder pronunciar una palabra, un cuchillo amenazaba con clavarse en su estómago.

—Tu celular y cartera, ahora —era una alfa de bajo rango, bueno, a ella no la besaría, claro está, así que sacó lentamente lo pedido.

—¿Qué tratas de hacerle a mi dulce omega? —aquel alfa que Sanha había rechazado acababa de golpear a esa chica—. ¿No te dijeron que a los omegas no se les toca sin permiso? —era un ladrón, pero todo un caballero.

Sanha estaba con los ojos cerrados y temblante, se asustó con el primer golpe.

Pronto la alfa estaba desarmada e inconsciente en el suelo.

—¿Estás bien? —aquella persona que lo había salvado ahora estaba preguntando por su bienestar.

—Si...

—Ahora... ¿Puedes salir conmigo?

—¡Que no!

—Pero si acabo de salvarte...

—Eso pagará el que quisiste robarme, dame gracias por no llamar a la policía en ese momento —abultó sus labios en un adorable puchero.

—Te dije que lo hacía por necesidad... no tengo para comer.

Sanha se sintió una mala persona al escuchar esas palabras, entonces se le ocurrió una idea, Minhyuk pudo desarmar y noquear fácilmente a una alfa casi del doble de su edad.

—Puedo darte trabajo...

—¿En serio?

Sanha sentía que lo que haría sería una locura, pero al menos sacaría a un chico de las calles para que deje de robar.

—Eres un alfa, sabes golpear y defender muy bien... necesito un guardia de seguridad en la tienda, la paga es de 19 mil wons la hora... no es demasiado... pero quizá t-

—¡¿Qué no es demasiado?! ¡Claro que si! ¿Cuándo empiezo? ¿Mañana? —eran alrededor de 17 dólares por vigilar aquella tienda, obtenía dinero y cercanía con su omega, ¡obvio que era una muy buena oferta!

—S-Si... ten, cómprate una cena, nos vemos mañana a las 9 de la mañana para el papeleo y tu uniforme... gracias por... ya sabes, salvarme.

—Gracias —agradeció por el dinero—. Puedes descontar esto de mi paga, por favor y yo te salvaría todas las veces necesarias —le guiñó el ojo sacando un bolígrafo de su bolsillo, tomó un papelito de servilleta escribiendo ahí su número de celular—. Me llamo Park Minhyuk, siéntete libre de contactarme cuando quieras.

Y antes de que el alfa se diera completamente la vuelta, Sanha habló.

—Sanha... mi nombre es Yoon Sanha —se encogió en su lugar ante la atenta mirada de Minhyuk —. ¡N-Nos vemos mañana! —y salió corriendo hacia su casa.

—Que lindo —su corazón se sentía cálido y su lobo aullaba de felicidad, su omega si que era adorable.