(Recuerdos)
- Mamá, ¿por qué no nos llevamos con otros vampiros? - Comento despreocupadamente durante la cena.
- Cuando seas más mayor lo entenderás - dice mi padre.
- Tiene 16 años Héctor, no podemos decirle que huya toda su vida y no decirle por qué.
Mi padre agacha la cabeza y suspira. El ambiente se ha vuelto lúgubre y parece derrotado de repente.
- Son gente mala Kay
- ¿Por qué son malos? ¿Qué hacen mal? - Pregunto ingenuamente, tratando de pensar en algún motivo que hiciera a mi padre sentirse así.
- Sabes que nosotros no hacemos daño a nadie, ¿Verdad? - Asiento - Pues no todo el mundo es así.
- Algunos de los nuestros, prefieren esclavizar a un humano y mantenerlo a su lado. Son algo así como sus parásitos. Los llaman los humanos fuente. - continúa mi madre - O simplemente van por ahí atacando a la gente, igualmente no lo recuerdan luego.
Pienso en ello. Una persona que dedica toda su vida a servir a alguien que le hace daño para alimentarse, una persona en el momento y lugar indicado, asaltada por pura casualidad... Un escalofrío me recorre de arriba a abajo.
- Para ellos, los humanos no son si no ganado - vuelve a suspirar.
- Pero no todos son así... - murmuro, deseando que me den la razón.
- Los que no lo son, también están en contra de la existencia de gente como tu - Mi madre me mira fijamente
- No entiendo qué quieres decir.
- Dicen que alguien nacido de los vampiros será quien nos lleve al caos con los superiores - dice mi padre. Lentamente y con voz dulce. Casi como si cantase una nana.
- Así que cada vez que nace un hijo de vampiros, siempre es asesinado dentro o fuera de su familia - Suelta mi madre, hablando tan rápido que casi no me da tiempo de entender sus palabras.
La sala se queda en silencio después de esto. Ninguno nos atrevemos a decir una palabra. Tardo más de 10 minutos en asimilar sus palabras, y aún así, no las entiendo del todo.
- ¿Quienes son los superiores? - pregunto
- Nadie lo sabe
- ¿Entonces qué sentido tiene todo esto? - Hablo gritando, aunque no me doy cuenta hasta que acabo la frase.
- Creo que es mejor que vayas a tu habitación. No te preocupes por esto, tu madre y yo nos encargaremos - Dijo mi padre. Y nunca más volvió a salir el tema.
- ¿Cómo podemos esconder a alguien del mundo durante 20 años?¿Qué pasa si la encuentran? - le oigo decir a mi madre antes de cerrar la puerta.
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Tal vez sí. Somos los malos
Teen FictionSinopsis Kay siempre ha sabido que va a ser un vampiro. Sin embargo, el camino se complica cuando conoce a Uri y pierde el respaldo de su familia. Cuando sus ojos son del color erróneo y no encaja con su especie. Empieza un viaje escarpado en busca...