Acción Uzumaki

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Capítulo seis: Besar y contar.

Sakura Igawa suspiró para sí misma mientras estaba sentada sola en un bar, mirando distraídamente el fondo de su vaso. Desde que abandonó abruptamente su casa, deambuló sin rumbo fijo, sin un destino real en mente, tratando de encontrar formas de distraerse mientras su pesadilla se repetía en su cabeza una y otra vez. Luego decidió empezar a beber un poco de alcohol para adormecer ese dolor sordo en su pecho y ahogar sus sentimientos... hasta ahora no estaba funcionando. "Ugh... ¿por qué siento esto por Naruto-kun? No es justo. No quiero herir los sentimientos de él ni de mi hermana... pero aún así me duele." Ella refunfuñó mientras tomaba otro trago.

'Amo mucho a mi hermana y sé que ella definitivamente siente algo por Naruto-kun, encajan muy bien... pero ¿está mal que desee que Naruto-kun sea mío? Lo quiero, pero no quiero interponerme entre ellos. ¿Por qué la única persona que podría ser mi primer amor tiene que ser el único hombre que no puede ser mío? La mujer se lamentó mentalmente y bebió otro trago, con la cara enrojecida por el alcohol.

Sus cavilaciones y su desprecio por sí misma fueron interrumpidos cuando una mujer se dejó caer en el taburete vacío de la barra junto a ella e inmediatamente pidió una botella de una bebida muy fuerte. Parecía que la naranja no era la única que estaba pasando por un momento difícil. "Ugh. ¿Por qué yo? ¿Por qué tuve que esperar demasiado? Ahora se ha ido". La recién llegada murmuró para sí misma con bastante tristeza mientras bebía directamente de la botella y se dejaba caer contra la barra.

"¿Tú también tienes problemas con chicos?" Preguntó el marimacho Taimanin, ya que, como dice el viejo refrán, a la miseria le encanta la compañía. La mujer asintió lentamente y bebió un poco más de su bebida con un suspiro y luego miró hacia la hermana menor Igawa.

"Sí, aunque es culpa mía. No de él. Mira, había un chico que me gustaba. Era más joven que yo, pero, maldita sea, significaba todo para mí. Quería confesarle mis sentimientos, pero seguí posponiendo". Por alguna puta excusa. Seguí diciéndome cosas como 'Ahora no es el momento' o 'Sólo un poco más'. Luego... esperé demasiado y alguien más lo reclamó antes de que pudiera. Quiero decir, yo' "Estoy feliz de que haya encontrado a alguien... Sólo desearía haber sido yo, ¿sabes? No tengo a nadie a quien culpar excepto a mí mismo". Murmuró el extraño antes de tomar otro trago con expresión triste.

"Eh. Yo también estoy en una situación bastante similar. Mi hermana recientemente trajo a un chico a casa con ella... y creo que me estoy enamorando mucho de él. Realmente me gusta, pero tengo miedo de lastimarlo a él o a mi hermana... y ahora soy yo la que está sufriendo, por dentro. Anoche tuve una pesadilla en la que intentaba seducirlo en la cama de mi propia hermana con ella durmiendo allí junto a él... y luego se despertó. Se levantó y me miró fijamente, juzgándome. Es muy amable, cariñoso, divertido y realmente lindo. Sé que suena cliché, pero es verdad. Me siento un poco culpable". Murmuró Sakura con el ceño fruncido, provocando que la otra mujer se riera suavemente.

"Eso suena cliché. Pero… a veces el amor no tiene sentido, ¿verdad? Sé que probablemente sea estúpido, pero realmente lo extraño y… solo desearía haberlo besado al menos. En cualquier caso , ¿tal vez necesitas sentarte con tu hermana? ¿Intentar hablar sobre las cosas? En todo caso, podrías aclarar las cosas. Sería mejor que reprimir las cosas y esperar hasta que sea demasiado tarde. Créeme. Esperé "Es demasiado tarde y ahora me arrepiento... Sólo espero que sea feliz. Por cierto, nombra a Anko. Anko Mitarashi". La ahora identificada Anko habló con una sonrisa triste y le tendió una mano a la orangette quien aceptó y la estrechó suavemente.

"Sakura. Sakura Igawa. Y sí, probablemente debería hablar con ella. Gracias. Ah, y... si no te importa que te pregunte, ¿quién era el afortunado por el que sentías algo?" Preguntó con curiosidad, queriendo mantener la conversación y dejar de pensar en sus preocupaciones.