𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐕

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༺ 𝐏𝐬𝐲𝐜𝐡𝐞 ༻


Suguru tomo la carretilla cargada de piedras y la empujó fuera de la mina, el sol se encargo de hacer que sus ojos se entrecierren al simple contacto. Paso su ante brazo para limpiar su frente que se bañaba en gotas de sudor y respiro un poco de aire fresco, al estar horas trabajando ya no podía tolerarlo, así que en su molestia se saco la remera dejando ver su torso desnudo con heridas curadas, completamente cubierto de sudor, su abdomen se contrae y se relaja con cada respiración.

A lo lejos vio a nueve coreanos nuevos, todos sabían que a quienes habían reemplazado habían muerto por vender libros coreanos.

《Putos monos japoneses》 Renegó en su mente.

No recuerda la última vez que vio letras coreanas, o su bandera, de vez en cuando Utahime se dirigía a él en coreano, ella le dijo "Tengo miedo de olvidarlo", pero Suguru creía que Utahime lo hacia para molestarlo, a él no le gustaba hablar un idioma que podía llevarlo a la muerte.

《Ya pasaron seis horas, faltan nueve.》

Su intención al terminar de trabajar y ver que algunos días coincidían con la salida de Amanai (quien trabajaba de enfermera), el joven pelinegro prefería desviarse del camino e ir hacia el centro de Yeondo para pasar por ella y acompañarla a casa, claro estaba que esa intención jamás saldría de su boca, no quería que ella supiera todo el recorrido que hace para verla.

—¡Hola señor ojeras!~ ¿Qué haces por aquí?

Siempre preguntaba lo mismo, y él respondía con una pequeña sonrisa amable.

—Por ir a casa, ¿lista?

—¡Como siempre!

Por supuesto que Amanai se daba cuenta, solo fingía no hacerlo.

Su camino hasta casa era tan satisfactorio que el pelinegro de ojos color turmalina podía incluso jurar que se olvidaba de su dolor físico por un momento, así era ella para él, como un ángel curador que aparecía para sanar todas sus impurezas.

—Antes de que me olvide ¿Le sucede algo a Uta?

—¿Por qué? ¿Discutió con algún anciano otra vez?-Preguntó mientras miraba a su alrededor restándole importancia.

—Es tu hermana—No parecía contenta con aquella respuesta.—Ella ha estado extraña, tendrías preocuparte más, su forma de responder no es correcta, así que no te haría daño hablar con tus padres y advertirle que puede estar en peligro de verdad si juega mucho con su buena suerte, o tu deberías decirle algo, eres el mayor.

—Debe estar cansada o estresada por Yuki, no pienses mucho en eso porque yo la veo igual, además ella sabe a quien y como hablar, es inteligente a veces.

—Los hombres no saben nada de las mujeres, deberías aprender a leer las caras y la situación, pero sigues siendo igual de emo.

—¿Q-q —Hizo una mueca irritado y sumamente humillado por eso.—Amanai, no creo que lo que digas sea cierto, las mujeres son un libro abierto.

—Si así fuera las cosas serian distintas.

—¿Cómo serían?

Con sus mejillas completamente sonrosadas, cruzó sus brazos y miro hacia otro sitio—Supuestamente somos un libro abierto y lo sabes... emo.

—¿Cómo? ¿y qué debería saber?

La figura de un soldado se acerco a ellos, estaba parado frente a la puerta de un bar y se acercó en cuanto se detuvieron.

𝐏𝐬𝐲𝐜𝐡𝐞 | 𝐆𝐨𝐣𝐨𝐡𝐢𝐦𝐞Kde žijí příběhy. Začni objevovat