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ESTABAN EN UN LUGAR distinto, casí nunca iban a la sala común de Hufflepuff. Pasaban más tiempo en Gryffindor, pero cuando se quedaban sin nada que hacer visitaban a la gente de ahí.
── Adoro estar aquí, manoplas. ── Dijo Remus, sentándose en la cama de su amigo y mirando la cabecera de su cama.
Banderines, pósters, fotos del grupo, incluso unos boletos que Remus le regaló para el concierto de ABBA, en su cumpleaños número catorce, pegados todos en su cabecera.
── Necesitas limpiar. ── Sirius recogió un suéter que ni siquiera era de Oliver del suelo.
── Tu necesitas un baño antipulgas. ── Le quitó la prenda de la mano y la tiro a la cama del dueño.
── Espera, ¿esté es Remus? ── Peter extendió su mano para tocar una de las fotos.
── Si, es la foto más reciente de él. ── Metió sus manos en los bolsillos de su pantalón.
── Te voy a denunciar. ──
── Yo también te quiero, Moony. ──
── ¿Ese no es mi anillo? ── Sirius se acercó a su mesita de noche.
Alguién tocó a la puerta, haciendo que Oliver abriera e ignorara a Sirius. Una niña de Hufflepuff de primer año con el cabello negro y los ojos azules estaba en la puerta.
La niña, realmente asustada, extendió con mano temblorosa una bolsita con dinero. Oliver la tomó con cuidado y entró a la habitación, se acercó a la mesa de uno de sus compañeros. Dejó el dinero en la mesa y buscó en los cajones hasta sacar una bolsita con tinte de cabello. Se lo entregó a la niña y salió corriendo.
── ¿Vendes tintes de cabello? ── Volvió a hablar ahora Peter, rompiendo el silencio que había en la habitación.
── No, Nick lo hace. Solo que está con su novia quién sabe donde y le hice el favor. ──
── ¿Nick?, ¿Nicholas France? ── Sirius dijo como si estuviera sorprendido. Oliver asintió. ── Vaya, tuve un gay panic con el cuando tenía como doce años. ──
── No jodas- ──
── Seap. ── Se alzó de hombros y se sentó alado de Remus.
Parecía que no había nada más que decir, así que Remus, el que más veces había estado en el cuarto de Oliver, extendió su mano y colocó música en el tocadiscos.
