Complicated Boy (Trunks x __)

Prólogo

Soy una chica un tanto complicada, en el sentido de ser bastante cabezota y poco afectiva, realmente no me encuentro en la escala más alta hablando de amor; por el contrario, creo poseer bastantes conocimientos, gracias a la maravillosa mujer a la que ayudo, (podría decirse que soy algo así como una secretaria, que le recuerda que debe comer, descansar y llevarle los planos de sus geniales ideas); le tengo un aprecio que no es ni normal, aunque, teniendo en cuenta que siempre ha estado allí para escucharme, tanto en lo bueno como en lo malo, sería ilógico por mi parte no creer en semejante persona. Bulma Brief es un amor de persona: es dulce, amable, considerada, inteligente..., además de ser muy fuerte, decidida y valiente; no es ni normal, ¡no le tiene miedo a nada! ¡Esta mujer no parece de este mundo! (En el mejor de los sentidos).

Trabajo desde hace unos años en la Capsule Corporation; de vez en cuando esbozo algún bosquejo de planos que mi jefa me pida; dice que no lo hago nada mal, pero yo lo veo como lo que es: esbozos que sirven de apoyo para ella, la cual afirma que le son muy cómodos a la hora de planificar donde coloca un botón, un espacio, un motor, una herramienta, (aunque, la verdad, Bulma Brief es un millón de veces más talentosa que yo, de eso ni yo ni nadie tiene ningún tipo de duda), mis trazos no son el producto final, y me alegro de no diseñarlo yo, ya que, realmente, no estoy interesada en ese tipo de diseños; me dedico más a dibujar personas en secreto, (pues me avergüenza un poco), no es algo serio, pero es un hobby que, (milagrosamente), me relaja, pues, debido a mi naturaleza intranquila, suelo estresarme con una facilidad tan apabullante que la señorita Bulma me ha prohibido volver a tomar café, pues, si bien me activa, me hace estar de un humor de perros.

Siendo sincera, en un inicio me uní a la empresa por un crush que todavía conservo: Trunks Brief: amable, inteligente, atractivo, extrovertido, fuerte, muy capaz de todo lo que se proponga, con una mirada que quita el hipo..., digamos que ha heredado lo mejor de sus dos progenitores. Si, entré porque me gustaba el hijo de mi jefa, no obstante, siempre he sido muy discreta con ese tema, y nadie, ni su mismísima madre, se ha enterado, (o, al menos, eso espero, porque odio el como las madres leen las expresiones faciales y gestos de los jóvenes, es decir, ¿¡qué clase de brujería realizan!? Me dan bastante miedito...)

Lo he observado de reojo desde hace un tiempo, (no en modo acosador, sino cuando ha pasado enfrente de mí, casi mirando por instinto, como he hecho con otras personas, y suele pasar a menudo), es verdad que, a veces, si me he quedado embobada mirándolo, (otras, pensando en mis cosas, lo he mirado sin darme cuenta). Si, por un motivo u otro lo he mirado, son cosas que pasan; haber, saber que existo, él lo sabe, aunque, no por conocer de mi presencia hemos hablado exactamente, (ya se sabe, una conversación personal entre ambos, o que hallamos comentado un tema de gustos con el otro), de hecho, cuando hemos "conversado", ha sido sobre su madre: de como estaba, si se estaba sobre-esforzando mucho, si quería que le echase un ojo para que no se pasase la noche entera trabajando, ese tipo de asuntos cotidianos; por ello, es que alguna vez que otra puedo escuchar su voz, que tanto me gusta, y disfruto de esos pequeños momentos con mi amor platónico.

Jamás he tratado de acercarme cuando no debía, ya que no es correcto, y mucho menos siendo hijo de quien es; me gusta, pero respeto totalmente que el primogénito de los Brief jamás me verá de otra forma que no sea la de ayudante de su madre; lo tengo más que asumido; o, bueno, al menos, eso es lo que siempre me he dicho...