RESCATANDO A MI BESTIA IPSIDE

La subasta

Aviso: No suelo hacer este tipo de avisos, pero como este fic es algo diferente a todo lo que he hecho creo que es bueno que lo haga. Este fic es una historia espacial, con razas, mundos, culturas, lenguajes, etc inventadas por mi jejejejejee asi que necesitareis una especie de diccionario de palabras nuevas que poco a poco supongo os iran sonando. Aqui teneis las mas basicas que saldran en este capitulo:

Clicks- unidad de medida

Sec- segundos

Parsec- minutos

Temp- horas

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***Sen***

Negro. Un negro tan intenso que podría absorberlo todo. Unos ojos tan oscuros como el espacio profundo me miran con un brillo depredador que me eriza la piel y me acelera el pulso. Ese macho. Su tamaño es realmente descomunal. Nunca había visto a alguien como él. Alto. Fuerte. Con músculos marcados y ese caminar de sexy depredador mientras se acerca sin desviar su mirada. Casi puedo sentir como voy a ser devorado por la bestia. Sí, su bestia. Pero eso solo me excita.

Calor. Demasiado calor. Nunca había sentido tanto calor a mi alrededor, sobre mi piel y en el interior de mi cuerpo.

Un beso. Su beso. Abriéndose paso entre mis labios, tan caliente, tan húmedo. Cuando su lengua me invade, jadeo entrecortado por la nariz mientras siento como me barre por completo, rozando nuestras lenguas y empujando la mia a una batalla que ninguno podrá ganar.

Ah. Algo afilado me roza la lengua. ¿Eso es... un colmillo? Ni siquiera sé por qué la idea hace que me humedezca aun más. Nunca he sido un fan de los mordiscos. No soy de los que tienen fantasías con sexys razas con afilados colmillos y sin embargo, rozarlos con mi lengua es lo más sensual que he sentido nunca.

Placer. Ah... un placer como ningún otro me recorre haciéndome estallar intensa y vergonzosamente. ¿Me he corrido solo por un beso? 

Sus manos me recorren. Yo también quiero, pero no puedo. Mis manos están alzadas por encima de mi cabeza. Presas de un fuerte agarre, caliente y pulsaste. Sus manos. Me tiene desnudo, mojado, excitado como nunca, totalmente expuesto e indefenso para él. Más calor. Tanto que siento que voy a fundirme de un momento a otro. Su piel suave, cálida y húmeda, roza la mia, lanzando pequeñas descargas placenteras por donde me toca.

-Ningun otro macho conocerá tu cuerpo...

Su voz es profunda, oscura, con esa intensidad que me dice que soy suyo, yo le pertenezco. Lo sé. Lo siento en todo mi ser.

Más gemidos. ¿Suyos? No. Soy yo. ¿Esta es mi voz?¿Cuando comencé a sonar así? Todo mi cuerpo arde, incluso más que antes, más que nunca. Caricias húmedas he hacen arquear mi cuerpo en su busca. Su lengua es ligeramente rasposa, recorre mi cuello, mi pecho hasta fijarse en un pezon. Grito cuando me succiona. Jamás me han tocado ahí. Nadie me había dicho que esto... se sintiera tan bien... Una ligera punzada y más gemidos estallan en mi comenzando a dañar mi garganta.

El placer es demasiado cuando una ardiente humedad rodea mi sexo. Su lengua recorre mi longitud antes de metérsela por completo en su boca, devorándome, succionando, como si nada fuera suficiente. Arrancándome gemido tras gemido hasta que estoy gritando mi placer.

Abro los ojos sintiendo la respiración totalmente alterada, la boca seca y el cuerpo perlado en sudor. Y por supuesto, mi sexo duro y palpitante mojado por mi propia esencia por el placer soñado.