Capítulo I

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—¡¿Qué haces aquí, Freezer?!

—¡Papá!

El pequeño Gohan se levantaba del suelo, viendo que su papá se había puesto frente a él para así evitar que el ataque de Freezer lo lastimara de gravedad.

Hace mucho no lo veía, su ropa era distinta y su aura también.

Seguramente... de alguna manera habría logrado ser más fuerte que antes.

—Hasta que al fin llegas, simio ignorante.

—¡Te lo volveré a preguntar! ¡¿Qué haces en la Tierra?!

—Bueno, creo que es algo evidente el motivo por el que me encuentro aquí. Para terminar lo que no pude en Namek.

—Pues te comento algo, la tendrás bastante difícil... como en Namek—Empieza a caminar hacia Freezer—Yo no soy el mismo que viste en Namek.

—¿Qué dices? No quieras lucirte, porque yo también no soy el mismo.

—Sí, ya vi que eres mayormente un robot. Eso lo hará más interesante.

—Papá, derrótalo. Yo sé que tú puedes.

—Ese Kakaroto... tenía que volver en el último segundo—Gruñe. También había estado peleando con Freezer, tratando en vano que este cayera rendido a sus pies—Como lo detesto.

Sangre corría por la comisura de sus labios, además de tener varios golpes y heridas en su rostro y cuerpo.

La camisa rosa que le había dado Bulma estaba rasgada.

Veía con enojo la pelea de Goku y Freezer, que ya había dado inicio.

Su orgullo se había quebrantado nuevamente, pero su sangre de saiyan hervía por tal combate tan emocionante.

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Esa pelea dio como resultado la derrota definitiva de Freezer y King Cold junto a su ejército.

Goku regresó a casa junto a Gohan. Sorprendiendo a Milk por la llegada tan repentina de su esposo.

—¡Goku!

—Hola, Milk—La pelinegra se lanza a abrazarlo, ocultando su rostro en el pecho de Goku, quien correspondió a su gesto.

—Te extrañé mucho. Creí que no te volvería a ver.

—Tenía que volver, no podía dejarlos solos.

Ve hacia su hijo, quien le veía sonriendo, así, devolviéndole la sonrisa.

Se separa de Milk y abre sus brazos para que Gohan se le acercara a abrazarlo, y así fue.

El pequeño extrañaba a su papá, estaba bastante preocupado por él, pues no sabía donde estaba ni cuando volvería.

—No te vuelvas a ir...

—No lo haré, hijo—Acaricia su cabeza.

Más tarde, luego de un refrescante baño además de hablar con su familia sobre lo que hizo en el planeta Yadrat, Goku estaba por acostarse para dormir junto a Milk.

Soltó un bostezo y se sentó en la cama un momento mientras apagaba la lámpara que iluminaba la habitación.

—Goku...

—¿Sí?—Voltea hacia Milk, quien se estaba metiendo a la cama para dormir también.

—¿Ese hombre llamado Vegeta no te da mala espina? Supe que está quedándose en casa de Bulma.

—Bueno, claro que sí, es quien me dejó en el hospital. Pero ahora soy mucho más fuerte que él, así que no creo que se atreva a hacer algo.

—¿Te agrada?—Ve como se acuesta a su lado, viendo hacia el techo.

—No. Ha sido cruel con todos. Ha hecho muchas cosas malas, pero espero que eso cambie. De todas formas él me ayudó en Namek al curar mis heridas y darme un indicio más de quien soy, así que ojalá se vuelva mejor persona.

—Tú le tienes mucha fe a la gente—se acomoda más cerca de Son, colocando su mejilla en su pecho—Pero es algo que me gusta de ti.

—¿Ah sí?

—Sí—Va cerrando sus ojos, sintiendo la respiración de Goku al subir y bajar su pecho.

Goku tan sólo suelta un suspiro y coloca un brazo bajo su cabeza.

Miró el techo hasta que se durmió, acompañando a su esposa en su sueño.

Aquella pelinegra ya estaba tranquila sabiendo que Goku estaba a salvo, al igual que su hijo.

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En las montañas, la familia Son dormía en la fresca noche.

Vegeta estaba entrenando como un lunático en la cámara de gravedad.

Era más de media noche y él seguía allí encerrado. No había comido ni bebido nada en casi la mitad del día.

Pero estaba decidido a seguir hasta desfallecer si es que le era posible.

Goku lo había superado por mucho, hasta Freezer lo había hecho, quien realmente no debería siquiera haber estado vivo luego de aquella explosión del planeta Namek.

Odiaba aceptar que alguien de un nivel tan mediocre e insignificante como lo era Goku cuando nació, lo estuviera sobrepasando de esa manera.

Lanzó un grito y su poder aumentó muchísimo, tanto, que la cámara de gravedad volvió a explotar como lo había hecho anteriormente por sobreexigirse como lo estaba haciendo ahora mismo.

Obviamente despertó a la científica que la había creado.

Quien le ayudó a ponerse de pie antes de que perdiera por completo el conocimiento.

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"Insecto" 《Goku x Vegeta》Where stories live. Discover now