❝ 𝙄𝙣𝙚𝙛𝙛𝙖𝙗𝙡𝙚. ❞ 〣 (𝘙𝘶𝘴𝘪𝘢 𝘹 𝘜.𝘚.𝘈) 〣

•Día tres: Malhumorado por la mañana.

Todo iba mal ese día para el soviético. Su auto se averió y no pudo llegar a tiempo a una de las nuevas "salidas" que últimamente solía organizar la ONU.

Tenía hambre, 20 llamadas perdidas de sus hermanos, 3 tres mensajes de la organización de la paz y su WhatsApp personal colapsando gracias a distintos individuos que en ese momento simplemente pensar en ellos hacia que la cara del ruso se tornará tenebrosa. Clara señal de advertencia para cualquiera.

Por eso, al tener a aquel rubio de ojos cubiertos por unas gafas cafés lo descolocaba totalmente, haciendo que frunciera su ceño en clara molestia. Aunque aquello, claro, no inmutó al americano mayor quien estaba acostumbrado a las miradas de "odio".

—¿Y bien?

—¿Qué?

El estadounidense suspiro, removiendo aquel objeto que descansaba en el puente de su nariz perfilada para masajear el mismo. Enserio no tenía tiempo para perderlo así.

—ONU dijo que deberías ayudarme a... Dios ¿Enserio me harás repetirlo otra vez? —. Se quejo, cuál señor mayor al ver nuevos precios en sus productos cotidianos.

Un gruñido fue lo que obtuvo por respuesta, suficiente para simplemente desistir de aquello. Tomo aquella pila de papeles que se encontraban en una mesa en aquella gran sala de la sede, muy dispuesto a completar aquella "petición" el solo. ¿Tardaría mucho más de lo previsto? Sí, pero prefería mil veces eso a estar soportando los cambios de humor del euroasiático. Ese día no se encontraba con el humor y mucho menos con la voluntad de hacer absolutamente nada por nadie.

Le irritaba esa situación, pues claramente se había dado cuenta de la actitud tosta de un habitualmente sereno Rusia. Y eso no era lo que le molestaba; no, por supuesto que no. Incluso llegaba a comprenderlo. Aquí lo que lo estaba jodiendo es que se estaba desquitando con el y eso era algo que el con todo el orgullo del mundo jamás iba a permitir.

¡Todos teníamos días malos, pero aquello no era motivo para tratar como mierda a las personas!

Mientras el recogía aquellos documentos el ambiente se había vuelto tenso, pues el euroasiático no dejaba de verlo fijamente, ciertamente ofendido por ser apartado así nada más. Recordó todos los acontecimientos de esa mañana y pareció gruñir nuevamente, pero solo había sido un quejido bajo.

Veía cada movimiento del estadounidense y, sin proponérselo de ninguna forma, se perdió en sus facciones. Fue envuelto en su semblante relajado a pesar de su anterior hostilidad, en sus finas manos siendo delicadas con lo que hacía. ¿Siempre había sido así de meticuloso y cuidadoso con lo que hacía?

Su mirada se atrevió a ir un poco más allá, mirando como su cabello rubio ceniza perfectamente peinado caía un poco hacía adelante, su piel blanca y que se veía tan suave al tacto. Sus ojos distraídos y tan azules como el mismísimo océano Pacífico. ¿Aquellos luceros también tendrían tantos secretos ocultos como el mar? Se cuestionó mientras se acercaba poco a poco, rozando sus manos con las del contrario con levedad. Un escalofrío los recorrió a ambos.

— ¿Qué haces?

Aquella cuestión lo saco de su ensoñación. Más no dijo nada, solo quitó poco más de la mitad de aquello que traía en las manos, aún mirandolo fijamente. Aquel individuo a pesar de la diferencia de estatura, tenía las suficientes agallas para mantenerla, incluso con más convicción y firmeza. Era algo que lograba confundirlo, y lo que antes lo ponía furioso ahora solo le causaba intriga.

— Vamos. — Murmuró luego de decir algo en su idioma nativo, empezando a andar en dirección contraria a donde estaban. Lo miro por encima de su hombro, analizando la reacción del americano — ¿No escuchaste? Camina rápido antes de que cambie de opinión.

Y con eso dicho retomó su andar, dándole la espalda al ojiazul mientras una pequeña e imperceptible sonrisa se mostraba en sus pálidos labios. Tal vez aquella mañana sería entretenida para él ¿Y por que no?

—¡Voy a ir, pero solo porque me da la gana! ¡No porque tú me lo dices!

Tal vez también para Estados Unidos.

La sonrisa de Rusia creció un poco más.