No quiero que seas mi alma gemela

Capítulo 20: La tormenta se acerca

Ha pasado mucho lo se pero he estado ocupado a mas no poder, he tenido que entregar informes y honestamente esas cosas te dejan sin ganas de escribir nada, pero estoy de regreso esperemos que pueda hacer mas cosas ahora.

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Una vez me calme lo suficiente para dejar de llorar, suspire y medite sobre como tal vez debería irme de Casita, pero, aunque eso haría más felices a todos Isa me necesitaba ahora no podía irme, por mucho que sea cabezota y no se dé cuenta de que lo que está buscando esta delante de ella, no puedo dejarla, no con la abuela.

Mire las piezas de la visión de la visión en mi bolso y aunque quería verlo con Isabela no me queda de otra que hacerlo sola, Isabela está librando su propia lucha en este momento y yo debo averiguar qué es lo que la abuela está escondiendo.

Cerré la puerta de la guardería, aunque no es como si eso impidiera a alguien entrar, por eso debo hacer todo lo más rápido posible, no puedo distraerme.

Empecé a sacar las piezas de la visión rota, relucían con un verde casi siniestro, pero aun así seguí adelante, tenía miedo de ver que es lo que encontraría, pero aun así necesitaba saber la verdad, que era lo que estaban ocultando.

(Mientras tanto en la tienda de Lily)

Me estaba tensa ya que la abuela estaba discutiendo las elecciones de tela para el vestido un vestido que yo no quería y que solo me traía infelicidad absoluta, pero viendo el reloj me doy cuenta de que hemos estado aquí por los últimos 40 minutos, los mas largos de mi vida y necesitaba sacar a la abuela de aquí antes de que Lily se le lanzara al cuello.

"Abuela recuerda que tienes que ir por los Guzmán y yo debo ir a Casita a prepararme"

"Isabela esto es importante debemos escoger una tela y debe ser perfecta" Quise rodar los ojos ante su terquedad.

"Si, bueno aun queda tiempo no es como si me fuera a casar mañana" Ni nunca, no quiero casarme.

"Pero deberíamos adelantarnos a los hechos"

"Señora Alma Isabela tiene razón, no hay que apresurar estas cosas además encuentro que debería ser elección de ella" Note que Lily quería decir más, pero se contuvo.

"Liliana, se que lo dices en base a la experiencia, pero sé que no hay mejor momento que el ahora" Suspire, abuela es demasiado terca y se que no me soltara fácilmente, quiero salir de aquí cuanto antes, Mirabel probablemente esta con la visión y no quería dejarla sola viendo algo que tal vez no sea bonito.

"Abuela por favor podemos verlo con calma, además sé que Liliana hará un increíble trabajo, pero debemos elegir una tela correcta y por lo visto tomara algo de tiempo, tiempo que ninguna tiene ahora mismos por lo que te pido que vengamos otro día, yo me iré a preparar y tú iras con los Guzmán así que vamos" Empuje levemente a la abuela a la salida, si no actuaba ahora no lo haría nunca y necesitamos salir de aquí pronto o me volveré loca.

"Isabela" Abuela quería hablar, pero no la dejare, si la dejo estaremos aquí otros 20 minutos y no quiero incomodar más a Lily.

"Abuela sabes que tengo razón, ahora me marcho a casita y tu ve donde debes ir" Logre sacar a la abuela con éxito de la tienda de Lily.

"Esta bien, esta bien, ve a Casita a preparar todo, yo iré con la señora Guzmán" Trate de mantener mi sonrisa mientras me despedía y me alejaba, quería llegar a Casita y refugiarme, quería poder sentirme segura y ver a Mirabel cuanto antes.

(Mientras en Casita)

"Demonios tío Bruno, por que tuvieron que romper esta visión en tantos fragmentos estoy tardado demasiado y cualquiera vendrá en cualquier momento, en eso sentí una ligera conmoción abajo rápidamente escondí la visión con una manta y me asome por la puerta para ver a Isabela ser recibida y todos comenzaron a moverse para preparar la cena, es decir que no me queda mucho tiempo, regrese a la guardería y rápidamente empecé a trabajar, pero mientras mas avanzaba mi estomago se apretaba más, podía distinguir grietas y a Casita mientras en el centro se hallaban dos personas, pero, no podía distinguir quienes eran seguí poniendo las piezas y mi cuerpo se tensó al darme cuenta de que una de las personas era yo, yo en medio de una casita que se desmoronaba, de manera instintiva retrocedí con algo de horror ante la imagen, pero aun no sabia quien era la otra persona y trate de buscar la pieza faltante pero no podía encontrarla, revise por todos lados y por lo que se Isabela y yo tomamos todas las piezas...