Relato de una historia de amor no muy común.
•esta historia no mostrará personajes perfectos.
•no habrá vidas felices
•no es una historia hecha para todo público,ya que se trataran temas delicados.
Historia completamente mía...
Se publicó por primer...
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T/n y Stanley llegaron al cementerio donde se dirigieron a una zona un tanto alejada y caminaron hasta una hermosa capilla muy bien cuidada.
Me imagino que necesitas privacidad así que te esperaré por allá-dijo t/n con una pequeña sonrisa.
Sí, gracias, no te vayas muy lejos-pidió Stanley tomándola de la mano.
No lo haré-dijo t/n con una sonrisa.
Ella se alejo a paso lento y comenzó a caminar con cuidado, el cielo se había nublado así que estaba un tanto gris el día, t/n podía observar como Tom se había sentado sobre el pasto mientras hablaba, no sabía lo que decía pero podía ver cómo estaba con la cabeza baja y probablemente un nudo en la garganta.
T/n lo miro y pudo sentir un poco de envidia por él.
Stanley tiene un lugar en el cual llorar si lo necesita por la perdida de su madre, también tiene un padre que lo ama aún si es un tanto ausente, pero yo podría pasar por miles de cementerios e incluso si viera la tumba de mis padres no lo sabría porque no recuerdo ni sus nombres-pensó t/n deteniendose a ver las miles de tumbas que había en el lugar.
Cuando volvió a ver a Stanley este lloraba mientras continuaba hablando y entonces ella sintió una punzada de dolor en el pecho al darse cuenta de lo mucho que él sufría en ese momento, con lentitud se acercó a él y se arrodilló abrazándolo por detrás mientras que él solo dejo salir su dolor.
Luego de una hora más o menos al fin condujeron de regreso a la escuela donde t/n se separó de él ya que tenía que ir a su terapia, Javier llegó un par de minutos después y la casa donde se veía con Mary.
¿De qué te gustaría que habláramos hoy?-pregunto Mary luego de un rato de que t/n llegó.
Hay cosas que siento que olvide pero no sé que es, no sé si hay alguna forma de recordar esas cosas que olvide-respondió t/n con nerviosismo.
Si hay una forma, podría hacerte una sesión de hipnosis para que puedas recordar algunas cosas que hayan quedado enterradas en tu subconsciente-dijo la psicología.
¿Podíamos hacerlo ahora mismo?-pregunto t/n con una mueca.
Claro, solo necesito que te recuestes-dijo Mary y comenzó una sesión de hipnoterapia.
Durante mi estancia en el prostíbulo pude ver muchas cosas, niños abusados, torturados, vendidos, maltratados entre otras muchas cosas pero lo más horrible de todo era ver a tantas personas en ese tipo de lugares, no solo eran hombres, había mujeres e incluso parejas que venían a cumplir fetiches retorcidos con los niños, llegué a ver bebés que también eran vendidos, si corrían con suerte entonces serían acogidos por una linda familia porque no pueden tener hijos pero si no tenían suerte entonces estaban jodidos porque eran asesinados de formas violentas o abusados como los demás en ese lugar, casi siempre su final era morir.
