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La rutina había cambiado, pero no sabía en que modo, si era algo bueno o malo.

Ver a su hermano todavía postrado en una cama de hospital le dolia, pero los doctores decían que estaba mejor de lo esperado. La semana que viene le darían el alta y tendrían que cuidarlo en casa, así que probablemente Sahara se quede allí también.

Eso era bueno.

Otra cosa genial era que aprobó todos los exámenes de la semana, pero para eso tuvo que matarse estudiando. Desvelarse y no dormir para ir a la facultad era el precio de sus notas casi perfectas. Pero daba todo de si mismo para mejorar eso, poco a poco iba saliendo adelante. Además recuperó bien la materia que por poco se llevaba al próximo trimestre.

Tema facultad estaba casi cerrado por ahora, las clases que quedaban eran poco importantes, eran más practicas y como charla de todo lo que venían vieron hasta el momento, entonces tenía la posibilidad de relajarse unos días hasta que lleguen las verdaderas vacaciones, o la semana de descanso.

Así estaba en el tema familia y estudios, pero otro tema que rondaba a diario por su mente era Minho.

¿Como explicar su relación ahora? No lo tenía claro. Se veían todos los dias, incluso casi vivian juntos los fines de semana. Compartían no solo momentos juntos, los abrazos y los toques tímidos de antes quedaron en el pasado, si no que hasta pasaban otras cosas entre ellos.

Digamos que cada oportunidad de estar solos era buen momento para besarse. Pero lejos de estar en una relación romántica formal solo era eso. Un par de tontos que se besaban cada vez que podían porque les gustaba y se sentían cómodos con eso.

Y aunque en un principio estuvo bien con el tema ahora le empezaba a incomodar.

Evitaba estar a solas con Lee y si no lo lograba ponía una pequeña barrera entre ellos. Sería mentira decir que odiaba hacer eso, que no se moría por tener de nuevo ese contacto con el más alto, pero debía organizar sus pensamientos.

Justamente a eso se estaba dedicando un jueves en la tarde sentado en la fuente de un parque, mientras disfrutaba del aire libre y esperaba a la persona que lo citó allí.

— ¿Hace mucho que esperas?

— Solo unas 3 horas -Miró su "reloj" que claramente no existía- Recién llego.

— Lo siento es que se me rompió el auto y tuve que venir en metro. Vamos?

Asintió a la invitación de la chica.

Hanna se había vuelto una de sus amistades más cercanas estos días, la chica tuvo unos problemas con sus amistades de la facultad y no pudo pensar en alguien mejor que Jisung para pasar el rato, hablar y reir un poco.

Digamos que la peliroja acudía de la nada a casa de los Han, quedándose a hablar con la familia por horas, y como ahora estaba siempre Sahara con ellos estas dos se volvieron unidas. Eran un circo juntas.

Pero a pesar de esta cercanía el chico no había hablado todavía de su "relación ficticia" con su amiga. Ese es otro motivo por el que estaban ahora sentado en una cafetería esperando su pedido.

— Entonces ella me dice "No quería que todo esto fuera así, te amo como no te imaginas y lamento haberte herido de esa forma" Jisung la quise matar, es una idiota.

— Tampoco tuvo mucha opción. Te cerraste y la dejaste sola.

— ¡Ella se juntó con mi ex! Por eso deje de hablarle -Se cruzó de brazos mostrando su indignación por la situación- Pero la quiero tanto...

Enamorado Tuyo ♡ MINSUNGWhere stories live. Discover now