Capítulo 06

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EH NOMAMEN descubrí en un vídeo de tiktok que la hija de Miguel se llama Gabriella😭😭😭😭😭😭 y yo le puse así porque  tome la inicial del nombre de Miguel «M» las últimas dos letras «el», y junte el nombre de su esposa «Xina» = Melina

Se me hizo un nombre bien bonito pero ya ni modo 😭 toca soportar

Estaré cambiando el nombre a Gabriella, ok, aviso para que no se revuelvan 🥺

Ya saben que me ayudan mucho comentando y votando akwjziqjzijqsjnq gracias por leer y perdón por la tardanza es que estaba investigando sobre psicología clínica pq la que llevo yo en mi carrera es educativa xd aaaaaa

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Capítulo seis: Púrpura

—¡Cuidado! —le gritó a sus demás compañeros para que esquivaran el pedazo de pared que Electro tiró.

Realmente comenzaba a estresarle este hombre.

—Llamada entrante, Miguel —le avisó Lyla.

—¡No puedo! —y no mentía, la mitad de sus compañeros estaban en el suelo recargando energía -literlamente-.

A más de un billones de kilómetros, sino también universos de distancias, se hallaba Amatista, algo seria, casi llegando a la impaciencia, con el rostro sereno pero por dentro preocupada. 

—Debo irme —dijo por séptima vez  —. He de venir después.

Un hombre estaba encargardo de vigilarla y ser guía durante su visita a Alchemax. Por ende, se hacía responsable de lo que suceda con ella. Habían pasado treinta minutos desde que llegó, por lo que la comprendía por la tardanza, pero no podía hacer nada si se trata de su jefe el que se retrasa; lo único que está a su alcance es llamarle las veces necesarias hasta conseguir respuesta. 

—¡No puede marcharse! —el hombre saltó antes de que atravesara la puerta, sin embargo, lo hizo. 

El guardia de traje no puede utilizar la fuerza, ella no ha hecho nada que lo merezca. Le siguió por detrás explicandole porque no podía irse. Los científicos y gente del lugar detuvieron sus actividades para verles discutir. 

Amatista estaba a una puerta de salir. Empujó la puerta de cristal y en la entrada se lo encontró con paso apresurado, yendo a ella. 

—O'Hara...

—Kyteler —suspiro tomando aire —. Gracias por la espera. 

—Gracias por la visita pero yo debo irme —pasó a su costado, con la frente en alto. 

—Pero todavía no le he dicho porque la cité.

—Que sea para otro día, yo tengo prisa —dijo, de espaldas. 

—Las vidas de las personas no regresa, no vuelven... ¿Acaso no basaste tu profesión por tu deseo de ayudar a la gente? Puede que mientras estemos hablando, ella esté allá fuera asesinando gente. 

Amatista se detuvo. Miguel observó su espalda erguise, seguramente tomando aire y recapacitando. Ella volteó a ver sus cafeces, Miguel sus azules. 

—Soy madre —la confesión caló a Miguel —, mi hija debe estar esperando por mi en la guarderia. 

"¿Madre?"

Miguel cogio sus llaves de inmediato y se apresuró a tomar uno de los tantos automóviles de la empresa. 

—Sube —le dijo cuando estaciono frente a ella. 

Amatista, anonada, tembló un poco y ante los ojos penetrantes sobre ella decidió subirse. No hubo palabra que saliera de ambos, solo cuando Miguel le pidió colocar la ubicación en el aparato. Tuvo que deshacerse de un hechizo para que la tecnología de su alrededor no colapse.

ANTIHÉROE ⋮ MIGUEL O'HARADär berättelser lever. Upptäck nu