cuatro

1.6K 145 12
                                    




25/04/2023

FEDERICO

A Lorna no le gustó nuestro beso de anoche se ve, porque está evadiendo cualquier contacto conmigo. Estamos fe-no-me-nal !!!

Desde que salí sin remera de mi pieza que está rígida e incómoda, como si fuese una vista nueva para ella. Después la besé en la mejilla y la abracé de atrás para testear las aguas y de igual manera se alejó, medio enojada incluso, como con repulsión. Te fuiste mundial Fede !!! Cagaste tu mejor amistad por un beso de mierda que encima se terminó al toque porque te tropezaste !!! Quince años de mejores amigos tirados a la basura en cuestión de segundos !!!

En fin, ahora nos encontrábamos en mi mesita humilde que no entraban ni tres personas comiendo el desayuno que preparó Lor. Nótese que eran las tres de la tarde, pero el desayuno es sagrado.

Como siempre, las medialunas rellenas son infalibles. Más si tenemos en cuenta que al prender la tele nos encontramos con una de las películas de Harry Potter. Simplemente el escenario perfecto.

Inesperadamente me suena el teléfono, Mariano me estaba llamando. Ahora es el momento en el cual se ve tentador tirarme desde el balcón de este tercer piso. Lorna se dió cuenta de lo que estaba pasando, rodó los ojos, contestó y puso altavoz, obligándome a hablar.

—Hola Marian, ¿cómo va todo?—saludé haciéndome muy el boludo. Mariano no se comía la peli ni loco, pero es lo que hay.

—Hola Fede, todo bien por suerte—respondió milagrosamente de buen humor, hoy safaba del odio—. ¿Mi hija está con vos o se fue a lo de algún otro chico? No le entran los mensajes y cuando la llamo me dice que su celular está apagado. Al pedo le compro el telefonito, si no me contesta nunca.

Al escucharlo no pude evitar mirar a Lorna y reírme por lo bajo. Mi mirada decía "hoy te toca a vos".

—Si Marian, está acá conmigo, tranqui—le aseguré para después agregar—. Saludá a tu papá Lor, pobre hombre que no le contestas.

—Hola pa—dijo ella rezongando—. Perdoname, es que me quedé sin batería y ayer me dejé el cargador en casa.

—Está bien Lor, ya sos grande—replicó su papá con un tono que, de tantas veces que fui víctima de él, puedo asegurarles que era condescendiente—. Acordate igual de que pasado mañana tenes parcial.

A esto, la cara de mi amiga se palideció de forma inmediata. Fuck, no me dijo la hija de puta, ahora entiendo porque Mariano estaba de tan buen humor anoche. No hubiéramos salido si hubiese sabido, se lo mucho que le importa mantener la beca.

La miré con cara de pocos amigos, a lo que ella simplemente me miró con los ojos bien abiertos y una medialuna en la mano por entrar en su boca, como si la hubiera atrapado con las manos en la masa. Me regaló una mueca y se encogió de hombros. Es una hija de puta, no me puedo enojar nunca con ella.

Si pa, ya se—rodó los ojos y suspiró—. Me traje algunos apuntes para estudiar acá.

Ahh, por eso pesaba tanto el bolso. Ahora todo tiene más sentido.

—Confío en que vas a hacer lo más razonable. Ahora pasame con Redondito por favor.

Él sabe que odio que me digan Redondito. No obstante, como es el papá de mi mejor amiga (auch) ya se me hace costumbre. Yo le digo Marianelo aveces, así que tampoco me puedo quejar demasiado que digamos.

—Estás en altavoz Marianelo querido, te escucho—reí suavemente mientras me acomodaba en la silla.

—Ah, mejor entonces, no te tengo que explicar lo del parcial y eso. Escuchame, no le andes encima a Lorna hoy que tiene que sentar el culo en la silla, agarrar la pala y ponerse a estudiar. Si ves que se está distrayendo mucho mandala para acá. ¿Ok?

—Pa creo que soy lo suficientemente grande como para saber cuando estoy dejando de ser productiva, no jodas.

—No te hagas drama, Marian—interrumpí a mi amiga que no parecía estar de muy buen humor—. Yo igual ahora en media hora me voy que tengo que ir a entrenar. Hay que estar a punto para poder ganar el próximo partido.

—Buena suerte con eso, Redondito. Jugas para Argentinos, no para river. Bueno, me despido así Lorna se pone a estudiar.

Ay ay ay, los Valenzuela y su pasión millonaria.

Chau Marian, que tengas buen día—lo despedí.

—Son las cuatro de la tarde Federico, buen día las—milagrosamente fue interrumpido por su hija.

—¡Chau Pa! Nos vemos a la noche, ahora tengo que estudiar—intervino rápido y luego me regaló una sonrisa hermosa.

Estoy hasta las manos.

Lástima que ella no siente lo mismo.

¿Cómo es eso de que ahora te vas a entrenar? Ya es re tarde Fe—me preguntó mientras sacaba sus apuntes del bolso.

Yo por mi parte me había ido a vestir a mi pieza, por lo que nos comunicábamos medio a los gritos. Nada muy fuera de lo común para nosotros.

—Entrenamos en el Diego Armando para usar las luces, ninguno quería entrenar a la mañana—le expliqué mientras volvía al living para saludarla—. Me tengo que ir yendo porque me pidieron que vaya un cachito antes, te veo en unas horas Lo.

Después de decir eso me acerqué para saludarla cachete con cachete. Ya aprendí de antes que un beso ahí es de alto riesgo.

No hacía falta que saque el auto porque hoy me llevaba kevin a entrenar ya que vivimos en el mismo edificio, un problema menos para ambos. Le mandé un mensaje para que bajé y salí para poder llamar al ascensor. Al parecer él ya estaba preparado, porque nos cruzamos mientras bajábamos.

No me sorprendió cuando una de las primeras cosas en salir de su boca mientras estábamos en el auto fue:

—¿Cómo anda Lorna? ¿Ya activaste y son pareja o siguen en el acting ese de que son mejores amigos?

No pude evitar reirme de todas las respuestas que se me vinieron a la mente.

Ya somos novios, para joderlo un poco.

Nos peleamos, nunca más nos vamos a hablar.

Se mudó a Tailandia.

Pero decidí dejar la broma de lado y decirle la verdad.

—Anda bien. Ayer nos besamos pero hoy estaba re distante así que seguro no siente lo mismo. Lamento informarte que nuestra relación sigue siendo de mejores amigos.

Auch.

Decirlo en voz alta duele un poquitito más.

pep-talk; FEDERICO REDONDOWhere stories live. Discover now