🍅 Regreso 🍅

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Una pelinegra se encontraba trabajando, ya que tenia un montón de papeleo que atender, el trabajo de un Hokage no era fácil.

Aún así no se arrepentía de haber podido lograr su sueños.

Claro que en el medio del camino hubo muchos problemas, la muerte de sus padres y los padres de Boruto. Y muchas otras personas que dejaron un gran vacío en la aldea con su partida, Sarada sabía que en donde estuvieran sus padres ahora, de seguro debían de estar orgullosos de ella, por haber logrado ser la primera Uchiha en ser Hokage.

La pelinegra suspiro cansada, ya había recibido el último reporte del día de hoy, ya quería regresar a casa  con su pequeño.

- bien es todo por hoy- se dijo asi misma la chica, al momento que agarraba una foto donde apareció ella con Boruto y su hijo- te extraño mucho Boruto.

Aunque en el camino hubo muchos problemas y dificultades, ella no los enfrento sola. Boruto siempre estuvo con ella, al igual que ella estuvo para el, causando que entre ambos ya no existiera una amistad. Boruto le había confesado sus sentimientos a Sarada, cosa que la dejo perpleja.

Nunca espero que ese rubio idiota sintiera lo mismo que ella.

Los dos empezaron a salir, claro que a veces tenían unas que otras discusiones o peleas, cosas normales en una pareja.

Aún así nada les impidió casarse y formar una hermosa familia, pero no todo es color de rosas. Cuando la pelinegra cumplió sus sueños también lo había hecho el rubio, quien había decidido tomar el camino de su Sensei.

Mientras que Boruto decidió proteger la aldea y a ella desde la sombras. Sarada lo hacía desde adentro, al principio fue difícil para ambos. Estar lejos el uno del otro no fue nada fácil para ninguno de los dos.

¿Pero que en esta vida es fácil?.

La última vez que el rubio pudo estar en casa fue en el cumpleaños de su hijo, la pelinegra recogió sus cosas y camino hacia la salida.

Algunos aldeanos la saludaban con respecto, a lo que ella devolvía el saludo con una sonrisa. Quería ver a su pequeño travieso, ese chiquillo travieso que alegraba sus días.

Por el, es que ella se esforzaba cada día. Para hacer el lugar en donde vivían uno seguro para todos.

- oh, Sarada llegaste. ¿Vienes por Naruto?- dijo Himawari una vez que se encontró a la pelinegra, en el umbral de la puerta de su casa.

- hola Hima, si vengo por mi pequeño travieso- respondió.

- ya lo llamo.

Su cuñada se perdió por unos segundos. Sarada sonrió al escuchar unos pequeños pasos que corrían a toda velocidad, hacia donde estaba ella.

- ¡Mama!- exclamó el pequeño pelinegro de orbes azules, lanzándose hacia los brazos de su madre- te extrañe mucho.

- yo igual pequeño- contesto correspondiendo el abrazo- ¿Te portaste bien con tu tíos?.

- si, me divertí mucho con el tío Inojin.

- me alegro mucho hijo, despídete de tu tía para irnos a casa- respondió ella, a lo que el pequeño asintio con la cabeza.

- adiós tía Himawari.

- adiós Naruto.

Una vez que se despidieran, madre e hijo emprendieron camino de regreso a su hogar. Naruto era un niño muy imperativo, lleno de energía y también muy positivo y compresivo. Eso era lo que más le encantaba de su pequeño, siempre la recibía con una sonrisa y los brazos abiertos.

Sasusaku One Shot (Sasuke X Sakura) 🌸🍅Where stories live. Discover now