V. Dolor

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Sentía demasiado dolor en mi cuerpo y cabeza, no tenía ni ganas de abrir los ojos. Me estiré y bostecé para seguir duemiendo hasta que noté algo raro. Sentí un peso en mi cintura... ¿Alguien estaba abrazándome?

Abrí mis ojos encontrándome con la pieza del Jorge... Me di media vuelta y conchetumare ¿Él? El miedo empezó a invadirme... ¿Cómo llegué a esta situación? No creo que nosotros hayamos tenido... Es imposible. No podía recordar con claridad lo que había pasado ayer, solo se que tomé demás, corrimos mas que la cresta de los milicos y el Jorge me trajo a su casa... Tengo que irme de acá.

Tomé su brazo de encima mío y lo dejé a un lado con el mayor cuidado posible. Me alejé un poco quedando en el borde de la cama y giré la mitad del cuerpo para mirarlo... Seguía durmiendo en silencio, empecé a temblar. Me siento... Culpable...

Me puse las zapatillas y antes de salir lo miré una última vez. Me acerqué tambaleante hasta él y lo tapé con las frasadas para después salir de la pieza cerrando la puerta.

Agarré mi chaqueta que estaba sobre el sillón y salí corriendo hasta mi casa, mis papás me van a matar por no haber llegado anoche. Corrí por un par de largas cuadras, hasta que llegue al frente de mi hogar. Me detuve unos segundos a recuperar el aliento y con las manos temblorosas giré la llave, abriendo la puerta. Apenas crucé el umbral mi mamá salió en mi encuentro.

-Claudito, hijo. Me tenías muy preocupada.- Me estrechó entre sus brazos, tenía el rimmel corrido parecía haber estado llorando.

-No pasa nada mamita, estoy bien. Yo- Fui interrumpido por el inconfundible carraspeo de mi padre.

-Claudio.- Dijo mi mi papá. Mi madre bajó la mirada y me dio un beso en la mejilla para irse caminando a la cocina sin mirar atrás.

Suspiré, sabía lo que se venía. Caminé hasta el living.

-Hola papá.

-¿Dónde andabas?

-Es... Estaba en la casa del Jorge...

-¡¿Que te dije yo de andarte juntando con ese cabro?! No vei que andan diciendo que es maricón.

-Es mi amigo...

-Claudio la gente esta hablando weas, tu sabi' que te tengo advertido, me sales amanerao' y vo' no eri' mi hijo.

-...

-Mírame cuando te hablo

-¿Sabi' qué? Chao con vo'- Me di media vuelta y me puse a caminar hasta mi pieza. Escuche los pasos apresurados detrás de mi, mire para atrás.

-¡¿A quién me veni a hablar así?!-Mi papá se sacó el cinturón. Yo solo cerré los ojos y me dejé golpear como las otras veces... En el fondo yo sabía que por un lado me lo merecía, era verdad que me sentía atraído por el Jorge... Estoy enfermo...

Me dolía, sentía el impacto del cuero dejar una estela de punzante dolor en mi piel que se teñía de un blanco que pasaba a rojo furioso derramando una que otra gota de sangre. Nunca me había golpeado tan fuerte.

-Víctor...-Interrumpió mi mamá.

-¿Qué pasa?

-¿Vamos? Ya se nos hace tarde para la ir a la feria...- Ella lo hacía para detener esto indirectamente. Él miró su reloj de muñeca.

-Tienes razón...-Se levantó casi sin mirarme y caminó al patio. Mi mamá corrió hasta mí con los ojos llorosos.

-Hijito... Tú sabes que yo te amo a pesar de todo lo que digan... Tu papá también te quiere mucho solo que...-Fué interrumpida por mi padre llamándola para salir.

¿Amor? - JlaudioWhere stories live. Discover now