Severus Skin

17...

El nacimiento de Zeke Rigel Black-Lupin fue un evento maravilloso para la familia, Remus pidió un parto en casa, acompañado de su familia, en la habitación estaba su matrona Elena y su esposo Sirius, la habitación estaba limpia, toallas, y agua tibia hacia algo de frío pero era agradable.

Camino durante largos minutos adolorido y cansado, se sentó, se acostó, Sirius le hizo masajes, comio un poco porque era importante y estaba hambriento, y río junto a sus cuñadas, Narcissa, Bellatriz, Regulus mientras esperaban, hablando de todo y nada.

La pobre de Walburga casi hacía un hoyo de la preocupación, como casi siempre que iba a tener un nieto.

Fue alrededor de principios de febrero cuando sus fuertes dolores comenzaron para el parto, dilatación era como una montaña rusa, de arriba para abajo, no aguantaba estar metido en la cama, aunque la habitación estaba baja en temperaturas, aún así tenía calor.

— Utilizaremos la piscina de agua —

Sirius de inmediato transfiguro uno de los baldes en piscina, la lleno de agua y aclimatizo, cargo a Remus en ella y lo acosto, los jadeos se calmaron unos minutos, pero luego los gritos, sollozos fueron constantes, fue casi dos horas después que el niño nació, cuerpo pequeño rosado y púrpura, cinco deditos en cada manito y piecito y unos pulmones fuertes que lleno el lugar de alegría.

Fueron casi dos días cuando la familia conoció al niño

— Su nombre, Zeke Rigel Black-Lupin

— Que cosita tan dulce — Walburga lo carga con cariño, y acaricia sus mejillas el niño hace una mueca y apenas y abre sus ojitos, sus ojos casi brillaban como una estrella de lo grises que eran

— Quiero que todos vean esto — Con cuidado Remus le quita el gorro y sopla sobre las mejillas del bebé, quien frunce el seño y se cabello se pone de negro a rosa clarito.

— Oh por Merlin, mi pequeño nieto es un metamorfomago —
Orion no cabia de la emoción, aparte de Nymphadora Black nada interesada en ser femenina y una Aurora de pies a cabeza era la única desde hace algún siglo.

— Gracias Remus, tu sangre nueva y fresca hizo este milagro, gracias por este nieto bello y saludable, hiciste un excelente trabajo con este bebé precioso

— Yo también ayudé madre

— Aja lo que digas, gracias Remus — el nombre reía bajito, claro que se merecía todos los elogios el hizo casi 10 meses de trabajo.

——

Ahora con la boda de Severus y Harry, Sirius y James miraban todo el desorden de la mansión Prince, allí harían la boda, cada día llegaban cosas nuevas, telas, mesas, sillas, un arco y las flores llegarían el mismo día de la boda. Al rededor de 500 personas para organizar, servir y cuidar. Una boda Magica personalizada.

Cuando Harry dijo no desear elfos atendiendo y Hermione a la cual Draco le clavaba los ojos cada tanto como cuchillos lo dijo, casi la desaparece de su organización.

Fue un Theo que calmó la situación, ambos en estado no podían alterarse además Draco no conocía la palabra moderación.

Hermione le propuso ir a un evento de meseros y otro de acompañantes que conocía muy bien.

La emoción de Draco ganó, punto para Hermione, la chica de cabello rizado castaño ganó puntos a su favor.

Al final todo iba de acuerdo a los planes.

Fue casi 1 mes antes de la boda, con un mes más de embarazo, que ocurrió lo impensable.

...

— Voy hablar con mi madre — Estaban en un restaurante en el lado muggle

Severus que devoraba varios platos, pastas, mariscos, pollo, pato, lo miro y asintió, dejando qué hablara para entenderlo

— Bueno, se que las cosas con ella han sido difíciles, y esta algo molesta porque sus planes no fueron lo que decidí al final del día, pero aún así es mi madre, hablaré con ella y vere si puede hacerla entrar en razón, también sobre mi pequeño hermano y mi padre...

— Amor, cálmate — Toma la mano del moreno delante de él — acaso irás a la guerra? Es solo tu madre que es un poco exigente pero estoy seguro de que luego de meses de estar en estas podemos llevarnos bien por ti, irás tú primero

— Y si no regreso porque fui atrapado por la bruja con dulces

— Estoy casi seguro de que podrás salir de esas — Sonrie — y te purificare al regresar

— No es para tanto

La risa de Severus la opacó un sorbo de vino dulce

— Yo decidiré eso.

..

James Potter es un pavo desde que nació hasta el día de hoy, eso pensaba Rabastan al verlo caminar con un vientre muy notorio y documentos en sus manos, vivir en una de las casas Potter llevo la relación un paso más adelante, además tenían la bendición de Lord Lestranger y de la tía Walburga que lo cuidaba mucho desde que sus padres habían fallecido

— Y si dejas eso y te arrodilla aquí — Sugirio con las piernas abiertas

James se volteó a verlo y negó varias veces — Crees que tengo paciencia para  hacer eso en el suelo, llévame a la cama y puede que la chupe hasta que te corras

— Si lo pones así — en unos segundos ambos estaba allí  quitándose la poca ropa con desespero

El comienzo de la relación había sido más rápido de lo usual, pero no les importaba realmente, los periódicos no dejaban de hablar de su rápido divorcio, de su rápido aventura, de su rapido embarazo todo era tan rapido pero ellos no sabían que estaban felices con todos las cosas rápidas.

Así como el sexo rápido y desenfrenado que estaban comenzando a tener, el embarazo ya estaba sin complicaciones y lo que hiciera no causaría problemas.

Por eso el culo de james estaba siendo devorado sin control por Rabastan.

— Va a salir Ahg — agarró fuerte el cabello de Rabastan en el momento que soltó el pene en su boca 

— déjalo salir — Volvió a su tarea, metió dos de sus dedos mientras lamia tirando su saliva en la mojada entrada que se contraría — Que vista tan agradable

— Ahh Va a... ha — los chorros salieron sin permiso, gimiendo sin fuerzas con el cuerpo fusionándose con Rabastan

— Quien te dijo que podías estar quieto — lo acosto de boca riba y separo bien las piernas

James estaba desesperado por un poco de esa carne, grande y pesada en su boca pesaba tanto y tenerla dentro de él era un sueño que pensaba cumplir sempre
— Metelo, rápido— demando desesperado

— Di que me amas y puede que cumpla sus demandas

—  Ah Basty — gruñendo molesto tocándose el pene, lento jadeando rogando

Ante esto no quedó más de otro que meterse en esa cueva, no quería ni esperar comenzo a penetrar lo rápido, ambos gritando, jadeando

— Si!! Ahí!!— se corrió hasta sus rostro, chupando a rabasta hacia él.

El pobre se tiró a besarlo, ambos jadeando y gritando "te amo"

— Ya no doy más — casi llegaba a media noche y ambos estaba hecho un desastre

— Bebé agua — Le daba de su propia boca a lo que James reía

— Pareces una mamá ave

— Pronto seremos eso!! — Beso el vientre grande — dos bebés de un tiro, Harry no sabe todavía

— No, luego le decimos pronto tendremos una boda hay que mandar hacernos trajes

— Con Draco — lo carga para llevarlo a la tina—

— Te amo Basty

— Te amo James.