Capítulo 17

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"Oye, ¿escuchaste?"

"Simplemente siguen apareciendo de la nada", susurró alguien, aunque bien podría haberlo dicho en voz alta, ya que no pasó nada desapercibido.

"¿Por qué nadie ha hecho nada todavía?" preguntó alguien, mirando por encima del hombro hacia la puerta, como si alguien pudiera aparecer de repente. "Están apareciendo tantos cultivadores demoníacos, seguramente las 5 grandes sectas deberían haber hecho algo".

"No esperes nada de Yunmeng, Gusu Lan o la secta Nie", siseó el patrón de la tienda incluso cuando el miedo brilló en sus ojos. "¡Jianjun-zun ya se ha apoderado de ellos!"

"Entonces, ¿qué pasa con la secta Wen?" exclamó alguien más. "¡¿Por qué no están haciendo nada?!"

El patrón resopló: "¿Los Wen? ¿Esperabas que te ayudaran? ¡Como si se preocuparan por nosotros! En todo caso, ¡me sorprende que no hayan invitado a Jianjun-zun a unirse a su secta!"

Hubo un silencio por un largo momento donde todos parecían estar pensando en sus pensamientos.

"... ¿Tú... crees que esos cultivadores demoníacos que siguen apareciendo... están relacionados con ellos ?"

Todos sintieron que bajaba la temperatura de la habitación. A nadie le gustaba hablar de ellos , un grupo que había aparecido de la nada y causando caos general. Justo el otro día, algunos discípulos del clan Liwei los notaron merodeando.

Todos, de la cabeza a los pies, estaban adornados de negro, con rayas plateadas visibles. Lo que hizo que todo fuera más llamativo fue la cinta roja alrededor de una de sus muñecas y una piedra de jade brillante colgaba alrededor de sus cuellos o de su cabello. Sus rostros cubiertos con un velo negro, solo sus ojos visibles.

Nadie sabía de dónde aparecían, pero lo que sí sabían era que la aparición repentina de los cultivadores demoníacos estaba relacionada entre sí. Lo que también se sabía era el hecho de que este grupo parecía estar buscando algo, sin detenerse ante nada para conseguir lo que necesitaban.

No eran hostiles. Sin daño, solo arrastrándose, como si estuvieran buscando algo. Y rápidamente se dieron cuenta de que este grupo tenía poder.

Nadie sabía dónde estaba su escondite. Nadie sabía dónde desaparecieron. Nadie sabía cuándo atacaría este grupo.

De lo que todo el mundo del cultivo estaba seguro era de que Jianjun-zun definitivamente estaba relacionado con este grupo. Un grupo que se hacía llamar Guiren-Jun.

"¡No hables de ellos!" alguien dijo con dureza. "¡Es como si aparecieran cada vez que dices su nombre!"

Nadie se dio cuenta de que el hombre solitario abandonaba la caverna, con la alegría brillando en sus ojos.

"Tuvo éxito, al parecer".

La persona al otro lado de la línea resopló: "Por supuesto que tenemos que serlo. El fracaso significa la muerte para nosotros y esa es una motivación maravillosa".

"Lo sé. Es simplemente sorprendente ver nuestros efectos y ni siquiera saben que no usamos energía resentida. Sin embargo, todos están cautelosos ahora solo porque parece " .

"... ¿Incluyéndolo a él ?"

El hombre exhaló suavemente. Había sido su misión recopilar información, pero tan exitoso como había sido, también había fracasado. Solo esperaba que su líder no se enterara. No estarían contentos con su pequeña excursión.

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