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Te prometo que nunca más Nacho, no te enojes dale- Lucila recién levantada a las 14:00 estaba pidiendo perdón a Nacho de rodillas prácticamente para que esté le de atención mínima.

-. ¿Posta me vas a seguir ignorando Nacho?- miraba desde el piso como Nacho tomaba mas café y usaba su celular, ignorando a la rubia.

Lucila cansada se puso de pie y se sentó en su silla, pegándola a la silla de Nacho, apoyó sus piernas en forma de indio, apoyando su cabeza en el hombro de su amigo, quien todavía no le daba la suficiente importancia como para que Lucila esté conforme. Se habian levantado hace ya media hora, Nacho siendo el primero en despertar teniendo a Lucila dormida en su pecho, a penas pudo y se canso de admirarla la movió de su lado y se fue a hacer un café, como normalmente solia hacer cuando se levantaba en la casa de Lucila, nada más que esta vez estaban en casa de Agustín. La rubia se había levantado a penas la había movido del lugar, estaba un poco complicado que esté todavía normalmente cuerda pero igual noto la mala cara de Nacho desde el momento que lo vio levantándose y yéndose sin decirle ni buenos días, algo raro en él. Confundida lo siguió e hizo sus mismos pasos, hasta se hizo un café aunque tuviera el estómago revuelto por estar vomitando durante una gran parte de la noche.

Los ojos marrones de Lucila miraban para la cara en un ceño duro e inexpresivo que tenía Nacho mientras bajaba en el feed de twitter, su cabeza todavía apoyada en el hombro, cansada de esperar algo que sabía que no iba a llegar con su mano agarro de lo cachetes a Nacho, girando su rostro obligándolo a mirarla a los ojos, quedó celestes con los ojos marrones de Nacho, mirándolos fijamente, aflojando el gesto de enojo que tenía plasmado para demostrarle a Nacho que no era el único enojado ahí.

-.¿Qué pasa Gordo?- hablo en un tono no muy alto mirando como la expresión de Nacho se aflojo al instante mientras usaba ese apodo con él. Nacho esta vez giro su cuerpo y lo apoyo en Lucila, casi abrazados y ganándose caricias de parte de ella en el pelo, los dos suspiraron con alivio.

-. Ves que sos una hija de puta, no me podes hacer esto cuando se supone que estoy enojado con vos- sin pensarlo y por el relajamiento del momento le dio un beso en el cuello a la rubia, un pico sin malas intenciones.

-. Jajajaja, por eso es mejor que me expliques que te pasa, no me gusta verte así conmigo- Lucila sonrio a Nacho, levantando el peso de su amigo de encima de ella, agarrando su mano y llevándoselo al sillón para acostarse juntos.

-. Vos sabes muy bien porque estoy enojado, no te hagas la pelotuda Lucila- dejo de hacerle caricias en el pelo a la rubia que esta vez era ella quien estaba apoyada en el cuerpo del contrario, los dos medio acostados.

Lucila pensó el porque podría ser, ayer que ella sepa no se peleó con ninguna chica que la haya mirado mal, ella tampoco miro mal a ninguna chica y no ballo con ningún desconocido que le pudiera hacer daño a ella, no había hecho nada mal.

Hasta que lo penso de nuevo y si, ya sabía cuál era la razón.

Pero nachito, hace mucho no me pongo así, no te pongas pachucho por eso Gordo- nombro la palabra que sabía que a Nacho le causaba risa haciéndolo reir en el momento.

-. Sabes que tomar así de más está mal Lu, me preocupo mucho, ¿Mira si te pasa algo?, Me muero- Nacho abrazo con fuerza a Lucila, sacándole un quejido de lo fuerte que la estaba apretando.

-. Ya se, pero no me va a pasar nada, estaban Marcos y Agustín con nosotros también, no pasaba nada literalmente.

-. Evitando el lado que escuché que Mar también quebró a la noche, pobre Agus que se tuvo que hacer cargo de él todo el viaje de vuelta- esta vez nombró el rubio mirando un punto fijo volviendo a hacer caricias en el pelo rubio que tanto amaba.

Los dos quedaron el silencio, Lucila apoyando prácticamente todo su peso encima de Nacho, su cabeza apoyada en el pecho del rubio, ganandose un vuelco en su propio corazón al escuchar el palpito del corazon contrario. Relajada y con el sentimiento de estar en casa que le producia Nacho, sin pensarla preguntó la duda que tenía hace tiempo.

-. ¿Nacho porque me cuidas tanto? O sea se que somos amigos pero así podías cuidar a Agus o a Mar y conmigo es como diferente, No sé como explicarlo, pero decime vos el porque, es algo a lo que le doy vueltas hace ya tiempo.

En ese momento Nacho tuvo un flash desde el primer momento que se afianzó y aceptó que Lucila era su primer amor, que ella era todo lo que buscaba en una chica o que todo lo que buscaba en una chica estaba en ella.

Algo que Nacho siempre pensó es que Lucila era alguien complicada, tantos años con ella le hizo ver que naturalmente era así, no buscaba llamar la atención, solo su personalidad lo hacía, a donde iba era tema de conversación, una rubia de pelo largo, cuerpo de envidia y por sobre todo, sonrisa encantadora junto con sus ojitos al reir. Simplemente era Lucila y ella era quien llamaba la atención.
Analizando más a profundidad, sentía orgullo por ella, admiración, la quería con sinceridad como su amiga, pero la amaba como un amor que jamás se animó a saber si podría ser correspondido o si ese amor rompería el grupo de cuatro que tenian. Analizó una vez más esa cara que ahora mismo tenía a pocos centímetros de la suya, veía esos ojos marrones cerrados y el pelo despeinado por su culpa, por los mimos que le estaba haciendo, miro los labios rosas que estaban agrietados de falta de liquido e igualmente para los ojos de él ella iba a ser la chica mas linda que podría conocer.
Nacho analizó una última cosa, estaba enamorado.

-. Porque me gustas Lucila, por eso te cuido más que a cualquier otro amigo- por fin, después de tanto tiempo Nacho se había confesado a su amiga.

Nacho cayó en cuenta de lo que dijo y se arrepintió al instante. Sintió como el peso de Lucia disminuyó de su cuerpo, se alarmó y vio como ahora ella estaba en la misma posicion de antes, sentada de indio mirándolo a los ojos.

-. Mira Nico yo...

-. Si me vas a rechazar mejor no me lo digas, por favor Lu- Nacho se apresuró a decir, todavía sin poder moverse por el miedo que estaba paralizando su cuerpo por miedo a la respuesta.

-. Para tonto, déjame hablar ¿Si?- Nacho asintió y la miro esta vez sentándose de indio como ella y obligándose a calmarse-. Yo también te amo mucho Nachito, no sé si siento lo mismo que vos pero te aseguro que algo siento, no por nada dejo que hagamos cosas como dormir juntos como si fuera cosa común de todos los días que hacen dos amigos. Es confuso porque vos sabes que yo soy una mina complicada y es raro para mi que alguien pueda sentir algo por mi aunque me conozca tan a fondo como vos o cualquiera de los chicos, ¿Me entendes?- Nacho asintió de nuevo, esta vez un poco más calmado de saber que Lucila podia llegar a sentir lo mismo que él.

-. ¿Y eso que significa Lu?-pregunto como miedo de tener una mala respuesta.

-. Que me gustas Nacho, quiero inténtalo con vos y crecer este sentimiento juntos. ¿Queres ser mi novio Juan Ignacio Castañares?- rio la rubia poniéndose en posición de proponerle matrimonio.

-. Acepto Lucila Belén Villar siguió la broma para agarrarla de la cara y plantarle un beso, porfin un beso de la chica que tanto esperó.

-. Son má' tierno' esto' boludito'- hablo Marcos solo para que lo escuchara Agustín quien estaba a su lado.

Habían escuchado todo.

¿Vos y yo? (Margus)Where stories live. Discover now