¡¡Creo que mi Mama es Un HACKER!!

Etapa 2 Capítulo 5: Alternando buenas y malas

El balance de mi primer semana laboral había sido muy positivo. Conseguí infiltrarme en el sistema de seguridad de la empresa de Sebastian Duarte, no solo en forma remota y virtual, sino también como empleada, en formal presencial.

También tenía contacto directo con él, un hombre guapo, con dinero y muy bien visto en el mundo de los negocios, tenía además la sospecha que yo le gustaba, no podía ser más soñado este comienzo.

Lo malo es que por alguna razón, después de los dos primeros días de mucha comunicación, Sebastián no se contacto más conmigo, supuestamente me iba a contar algo, pero no paso, yo sigo trabajando normalmente, y en esta semana solo un día a los lejos lo vi entrar a su empresa. "O sea, supongo que él esta bien, que solo no se interesa en mi", y yo no volveré a insistir, ni forzar un contacto. Debo esperar, tal vez tuve muchas expectativas un poco exageradas desde el comienzo.

Lo bueno que esta semana al no chatear, ni pensar tanto en Sebastian, me ocupé cien por ciento de mi trabajo. Y el que busca... encuentra, como dicen por ahí. Así que confirme unas de mis tantas sospechas. Esta empresa, (lo que factura por ventas de licencias de juegos, consolas, drivers, publicidades, no llega hacer ni la mitad de lo que necesita para ser un unicornio digital, como lo es en la actualidad), y tampoco podría operar en las más bolsas de comercio más importantes del mundo.

También encontré las cuentas bancarias a donde giran las ganancia que tiene la empresa, (que nos son tan voluminosos como hacen figurar,pero que realmente las tienen)

Uno de las cuentas está a nombre de un importante primer ministro europeo, ligado al Banco mundial de inversiones y por primera vez en meses tengo la satisfacción de estar en lo correcto, y que realmente me infiltre el lugar adecuado.

Me siento bien, me siento eficiente, estoy empoderada.. Una tarde al salir de la empresa, y caminar hacia mi camioneta siento que me siguen, acelero el paso, son ciento cincuenta metros hasta la camioneta, siento que detrás mío aceleran también el paso, miro de reojo sin darme vuelta mirando hacia abajo, logro ver unos zapatos a metros míos seguir mis pasos.
Estoy a unos escasos 25 metros de mi camioneta y siento que me agarran fuertemente el brazo y casi me logra detener, ahora si debo darme vuelta, lo hago bruscamente enojada y por tirar un golpe con la mano que tengo libre, pero lo veo a él!! Era Sebastian quién me había frenado.. al darme vuelta me dice...
—Nuria, que rápido camina, la venía chistando para llamar su atención, pero usted no escucha, iba muy apresurada.

—Que susto me hizo pegar Sebastian, suelo ser muy precavida en la calle.

—miedosa, diria yo —Me corrige Sebastian —. —¿La puedo acompañar?—me pregunta tan dulcemente que no puedo resistir.

—¿A donde quiere acompañarme? —Le  sigo el juego.

—Si acepta mi invitación, a merendar algo rico, a mi lugar favorito.

—Suena tentador, acepto.

—Vamos en mi camioneta, la tengo acá no más —le digo señalando el lugar.

—Por supuesto, dice él —mientras sube exclama algo sorprendido... ¡¡ que hermosa camioneta tiene usted Nuria!!

Luego de unos minutos de un recorrido corto y algo incómodo marcado por el silencio, llegamos al lugar indicado por él. Se lo ve lujoso y bonito..

Entramos y nos sentamos junto a la ventana que da a la calle, una hermosa vista de la ciudad.

En ese lugar, ya más relajado y una vez que pedimos lo que íbamos a consumir me dice.
—Es un gusto para mi, poder conocerla fuera del ámbito de la empresa, y tengo una invitación pendiente —el esta muy elegante sentado con soltura.

—Debo reconocer Sebastian, que me encantó este lugar. De su invitación me acuerdo y me estuvo intrigada hasta hoy.

—Es que cada vez que lo pienso y decido encarar el tema, me vuelvo a parecer una exageración, y que usted se puede ofender.

—Vamos Sebastian, por favor, somos grandes, no sea tímido hombre —lo apure un poco.

—En un mes y medio tengo el casamiento de mi tío, en Francia y me gustaría que usted venga conmigo, lo sé es una locura, no debí ni decirle —se excusó sin escuchar ni ver mi cara de satisfacción.

—Pero que dice Sebastian, realmente usted me invita a ese evento, me encantaría ir, no conozco Francia y además ir con ustedes me llama la atención, no le voy a mentir que suena osado de su parte, invitarme conociéndome tan poco, pero me siento afortunada.

—Lo se Nuria, siento que es demasiado, pero también siento que cuando estoy con usted, pareciera que la conozco de antes, la paso muy bien.

—Gracias por el alago —digo mientras comienzo a merendar, tengo hambre.

Al finalizar la improvisada cita, él me pide que lo lleve hasta su departamento, un lujosos edificio en plano centro de la ciudad.
Acepto su pedido, y al llegar estacione en frente a su edificio, nos saludamos dulcemente, él se bajo y yo me fui, conduciendo hasta mi casa, unos 30 minutos de viaje para pensar en soledad todo lo que había pasado hoy.

Lo primero que puedo concluir, siendo Hacker y teniendo una mamá Espía, es que Sebastian no sospecha nada de mí, ni de mis intenciones, dado que jamás me hubiera mostrado donde vive, ni tampoco me hubiera contratado para manejar su seguridad informática, por otro lado creo que su invitación a Francia es tal vez sospechosa, pero lo seguiré evaluando e investigando quien es su tío!!. Creo que esto es un trabajo para la Morocha del barrio_43, le tendré que consultar a la mejor y de paso busco una excusa para hablar con mi mami, hace tiempo no se nada de ella y la estoy comenzando a extrañar..

Mañana mismo tratare de tomar contacto con ella.

Continuará!!