BLAME [ Bugs Bunny×Lectora]

¿Amistad con intereses?

Narrador __________.

Estuve un buen rato jugando con la ventana del auto en el que nos trasladábamos a donde sea que tenga en mente Mickey, sin embargo, no fue mucho mi entretenimiento porque el conductor Antonio me pidió dejara de molestar el botón de seguro, así que a regañadientes obedecí y nadamás me quedo hacer figuras con el vaho de mi aliento, formando figuritas como caritas en la ventana mientras el recorrido se volvía más silencioso. 

Sean cual sean las intenciones de Mickey, está siendo muy amable, es decir, esta literalmente arriesgándose con esconder a su supuesto rival del peligro, prácticamente le está ofreciendo el brazo entero, creo que Bugs no le agradecerá en persona, así que pienso hacerlo yo. Porque no soy tan tontita, estoy segura de que ya me tienen en cuenta como involucrada en todo este lio del conejo. 

Si a mí me preguntan, el tipo está loco. Pero pobrecito, su culpa no es. El hecho de ser una estrella oprimida o hasta sobreexplotada, bajo normas que quizás ni sus propios amigos conocían, porque supongo que si Lucas o su novia Lola, alguien más de su elenco no sé, supieran de su situación no sería ni yo ni Mickey los que le estarían ayudando.

Vaya amigos. Me pregunto si de verdad había confianza entre Bugs y sus conocidos o simplemente interés, los famosos tienen vida complicada después de todo, solo que con mucho dinero y una fuerte inestabilidad emocional.

Ahora que lo veo en ese lado, sentimental, creo que en eso nos parecemos todos los Toons, tenemos esa cualidad que los humanos jamás pudieron controlar en nosotros. El sentir, después de todo, somos creación de las personas, una cosa de ellos se nos iba a quedar impregnadas, y que cosas del destino fue que de entre tantas habilidades, nos regalaran juicio propio. 

Para mí, ahora todo esto, fue, es y será una locura descabellada o desquiciada. 

Y no sé cómo terminaran las cosas, pero ¡por amor a la sagrada tinta!, lo impredecible estaba destinado para todos nosotros desde hace mucho. 

Sentí cuando el auto se detuvo, Bugs estaba sumergido en su propio mundo y Mickey daba indicaciones al conductor Antonio sobre no decir nada.

— Recuerda, si preguntan: nosotros nunca estuvimos aquí. 

— Descuide, señor. — el tipo asiente, era un humano, pero bueno, yo quien soy para decirle a los Toons en quien confiar y en quien no. De mi parte, yo no les tengo mucha simpatía. Respeto más a los míos, los dibujos animados. Los humanos suelen ser traicioneros a sus propios grupos, en cambio yo he notado más unión y lealtad en una simple caricatura como nos hacen llamar ellos.

Bajamos del auto, mis contrarios caminan lado a lado, dejándome atrás a mí. Me bloqueaban  la marcha con sus pasos de tortuga, así que con mis brazos los aparto haciéndome espacio en medio de ellos, y decido pasar de largo para yo ir al frente. 

— ¿Que paso con el: damas primero?

Mickey luce apenado y dispuesto a una disculpa, sin embargo, Bugs se roba el show con su comentario tan inteligente:

— Yo no veo ninguna dama. 

Abro mis ojos, analizando su sonrisa llena de burla, ah claro, claro, claro, claro, claro, ¡claro!

se me había olvidado de que podemos estar en aprietos, pero ante todo el humor ¿cierto?

Junte mis manos, y le observe con paciencia. Regalándole unas palmaditas en la espalda, esto lo confundió un momento.

— Chistosito, mi querido Bugs, hoy fue un día largo, muy largo — recalque perdiendo en milésima de segundo mi rostro pacifista — Agradece que le voy a la paz.