Todo era borroso despues de eso.
No sabe en que parte del camino dejo de ser consiente de su entorno y solo podia escuchar las voces en su cabeza
Es mi culpa
Lo mate
Soy un mounstro
No sabe en que momento llego a casa pero en medio de su neblina confusa cree ver a su mama limpiandole las manos y despues dandole algunas pastillas. En algun punto llego a su habitacion y se enterro en las sabanas.
La adrenalina de antes se habia ido hace mucho tiempo y ahora solo podia sentir ardor en sus nudillos y tension en el hombro derecho. Tenia ganas de dormir pero las voces no se detenian. Todo era ruidoso.
Seguramente todos lo mirarian diferente, Theo estaria asustado, el entrenador lo sacaria del equipo y su mama se enfadaria con el porque definitivamente los padres de Brett haran algo cuando este les cuente que paso en realidad.
Tonto. Tonto.
Ya estaba todo bien, sus calificaciones volvieron a subir, ahora era un regular en el equipo, tenia nuevos amigos, su temperamento estaba controlado pero no, tenia que joderla y dejarse llevar por esos estupidos impulsos. Lo peor, Brett tenia razon. Se desquito con alguien que no debia, tal vez por eso Brett empezo a molestarlo y todos dejaron de hablarle, se lo merecia, lo que hizo estaba mal.
Drew Collins.
Con el empezo todo.
Liam estaba medicado desde la secundaria y aunque su dosis no era tan alta, podia controlarse lo suficiente pero ese dia. Ese dia perdio el control.
El psicologo y el psiquiatra lo habian advertido, su temperamento empeorara y sus impulsos seran dificiles de controlar si no le subian la dosis pero Liam no queria dejar de jugar asi que su madre no dejo que lo hicieran.
Grave error.
Liam lo sintio desde el momento que se desperto, su cuerpo estaba tenso y sus manos picaban, su cerebro esperaba con anticipacion, algo, cualquier cosa, lo que sea con tal de poder soltar lo que estaba reteniendo.
Y paso, Drew choco con el y se estaba disculpando cuando la vista de Liam se nublo y no pudo deterse, lo golpeo, no recuerda mucho pero algunos del equipo de futbol lo quitaron de encima del pobre chico y lo encerraron en un salon donde procedio a romper algunas cosas hasta que pudo calmarse y esperar.
Su madre ni siquiera lo miro y Liam no pudo levantar la mirada del suelo hasta que llego a su habitacion y se encerro como ahora, como un cobarde.
Se estana hundiendo otra vez, cada vez que caia ahora era mas profundo, su cabeza no se callaba y su cuerpo no dejaba de temblar.
Escucho la puerta ser abierta pero el se quedo hecho bolita en el rincon de su cuarto, asustado.
-Cariño, te traje algo para que comas-La voz de su mamá rompio ese silencio
El no hizo ningun ruido hasta que la adulta salio del cuarto pero el se volcio a quedar ahi, cuando era pequeño y tenia esos episodios los brazos y la comida de su madre lo reconfortaban pero ahora todo se sentia desconocido, la psicologa decia que era por la adolecencia y las malas experiencias, solo una mala jugada de su cerebro.
Liam sintio los ojos cansados, por fin la adrenalina se habia ido, no sabe cuanto tiempo paso desde que llego a casa pero su cuerpo al fin se estaba rindiendo y se quejo guiar al mundo de los sueños donde muy en el fondo deseo no volver despertar.
