Hacker

Fábrica.

Caí en el agua fría que me puso la piel de gallina nada más salir a la superficie.
Miré hacia el paseo...
Todos estaban allí asomados mirándome.
Rick me sonrió, mientras hacia bromas con Connor que se reía como un loco.
Leah negaba con la cabeza y sonreía, imitando su gesto se encontraba James.
Ryder empezó a farfullar cosas en voz baja mientras daba órdenes a los trajeados por un Walkie Talkie, Kill tenía el traje en sus manos empapado.
Y Adam se estaba desnudando....
Mierda, se iba a tirar.
Me di la vuelta y empecé a nadar o algo parecido en sentido contrario a la valla.
Oí un chapoteo, y me gire para observar como me seguía de cerca, nadie era mejor nadador que él y tenía que pensar rápido si quería quitármelo de encima.
Pude ver como se acercaba una embarcación privada de las que a veces algún ricachón montaba para fardar.
Le hice señas y se acercó justo a tiempo, para subir a ella, coger los mandos y acelerar alejándome de allí.
El hombre que estaba en la embarcación intento alejarme así que le tire por la borda de un empujón, junto con un chaleco salvavidas.
Cuando estuve a una distancia segura me permití respirar con tranquilidad.
Atraqué al otro lado del río y cogí la ropa que aquel hombre me ofreció antes de que lo tirara. Le robé la cartera que tenía en la chaqueta y le quité el dinero en efectivo.
Caminé hasta un taxi con la gente mirándome.
Le pagué y nos alejamos de allí.

Ryder.

No podía creer lo que veía, Ivy había escapado de todos nosotros como si fuéramos una simple molestia.
Tenía a los criminales más buscados a mi lado, a unos adolescentes muertos y por sí fuera poco a su compañero de hazañas aquí en Nueva York que tampoco tenía un historial muy limpio.
"Rock" y "Rise"o como se llamaban de verdad, Rick y James, ayudaron a subir a un Adam "Smash" bastante enfadado y mojado.
- Bueno hay que reconocer que sabe como escapar de la gente con estilo.- Connor se río tan alto que se escucho seguramente hasta en la China.- de todos modos esa chica está muy por encima de nosotros, la echaba de menos.
- Únicamente está en mejor forma que nosotros, desde que nos dimos un tiempo no he robado más que algún par de cuadros, carteras y demás obras de arte. Se que vosotros habéis hecho lo mismo.- dijo la pelirroja llamada Leah.- y mientras ella se hacía con el control de medio Nueva York ... además aprendía clases de escapismo.
- Cerrar la maldita boca todos.- alguno le había dado una toalla a Adam.- tú, tu eras su amigo ¿no? ¿Dónde está?.- señaló a Rudy "Kill" que tenía aún su traje de la época medieval o lo que fuera eso.
- Sigo siendo su amigo y se más sobre ella que la mayoría de vosotros o eso espero, se por donde podemos empezar a buscar respuestas, seguidme.
Volvimos a los coches sin decir nada, a pesar de que no me gustara nada tenía que hacer lo que ellos quisieran porque las únicas personas que pensaban como una ladrona eran otros ladrones y que mejor que las personas que la conocían o bueno, conocían la forma en la que pensaba.
Mi supervisor el Agente Fitzpatrick me iba a matar.
Pero esa era la única forma de hallar a Ivy y a su vez a Witch Hunter.
Y aunque quisiera no podía negar mis sentimientos por ella, aún latentes bajo mi piel.
Pero no era el único.
Miré por el retrovisor a Adam que permanecía en el asiento trasero mirando por la ventana con el ceño fruncido.
Sé cómo se siente Adam, entiendo lo que siente por Ivy...Y quizás...
Ryder, olvida esos pensamientos, eres un agente del FBI, sigues las reglas.
Céntrate en el caso, todo esto es por el caso.
Concéntrate.
Uff...Después de esto, decididamente me daría unas merecidas vacaciones.
Conducimos hasta una fábrica abandonada a las afueras.
Nos bajamos del coche que aparcamos un par de calles más abajo y nos acercamos a la puerta.
Tubos sucios y humo salía del interior de estos como si aún funcionaran.
Nadie le prestó demasiada atención, al llegar a la puerta principal que accedía a una de las miles de salas cerradas a cal y canto nos encontramos con una panel mucho más moderno y brillante que la puerta o cualquiera de las cosas que había aquí.
Kill la abrió con una palanca que había en suelo y dentro se encontraba un control de mandos con un teclado de ordenador conectado.

- Genial y ahora ¿que? Cómo no sepas la contraseña estamos jodidos.- dijo la pelirroja.
Después de un buen rato probando distintas contraseñas, nos dimos cuenta de que era una oración de cuatro palabras.
- ¿No podéis hacer esos trucos tecnológicos o algo así para descubrir la contraseña?.- Pregunté cansado de que se gritarán entre ellos.
- Por favor ¿quien ha traído este cavernícola aquí?...Primero nosotros no hacemos trucos tecnológicos y segundo no es tan fácil.- dijo Rick con los ojos entornados.- La mejor con la tecnología siempre fue Add o Ivy o como la llaméis, no es tan fácil como teclear una tontería y ya está. Además ¿tú no eres su amigo?.- Preguntó mirando a Rudy.- Deberías saber la contraseña.
- Ni siquiera sabía de este lugar hasta hace un par de meses cuando la seguí hasta aquí. Supongo que debió de verme por alguna de las cámaras instaladas porque me echó la bronca y me obligó a que no se lo contara a nadie.
Hubo una pausa silenciosa en la que cada uno estaba sumido en sus propios pensamientos.
- Y... abierto... de nada gente.- nos dimos la vuelta para ver a Connor abriendo la puerta.
- ¿Cómo has conseguido abrirla? Es de hierro macizo con fibras de vidrio.- dijo James.- Ni siquiera tú eres tan bueno con las cajas fuertes.
- Tecleando la oración correcta.- nadie dijo nada por lo que rodó los ojos.- "Connor es un idiota" esa el a denigrante contraseña.
- ¿Cómo no hemos caído? .- dijo Adam que hasta entonces había permanecido callado.- Es tan obvio.
- No se sí tomarme eso como un insulto o un alago a mi inteligencia, pero como yo lo he descubierto y vosotros no, me voy a quedar con el hecho de que soy más listo que vosotros.
Se dio la vuelta y desapareció por la puerta.
Le seguimos y lo que había dentro me dejó con la boca abierta.

Era una habitación casi tan grande como media fábrica en la que había un vagón del metro de Nueva York en una esquina pero lo que más me impresionó fue la cantidad de televisores apilados unos a otros que había en una esquina cercana.
De todas las resoluciones y épocas apilados unos encima de otros se encontraban las pantallas con varias torres de bases de datos enormes que solo tenían cables de colores.

En todos había diferentes lugares de de Nueva York, tenía controladas varias, si no todas, las cámaras de la ciudad.
Además de las que había aquí a fuera de la fábrica.
Múltiples torres de distintos tamaños estaban encima de una mesa enorme de comedor.
Me di la vuelta para ver la pared donde estaba la puerta y me encontré catatónico.
- Creo que deberíais ver esto.- Dije a media voz.

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Bueno Hola,
después de meses de sufrimiento aquí estoy con un nuevo capítulo.
La verdad es que no pensaba seguirla hasta verano pero como he visto que tenía muchos más seguidores que antes y todo eso que me insistían pues bueno la he vuelto a retomar.
Aún que tengo que avisar de que la actualizare con menos frecuencia que el resto.
Besos, N.