Prioridad [Chanhun]

Renuncias & Afirmaciones

Era molesto, muy molesto tener que lidiar con vejestorios, uno podría decir que no es empático sabiendo que en algún momento de su vida va a tener esa edad, pero no puede estar callado ante los demás accionistas minoritarios. Han pasado años y aun tienen en la cabeza ideas muy conservadoras, el discurso con el que lo tienen atrapado en esa oficina hace horas es: ¿Qué dirán las empresas aliadas cuando se enteren que no está casado con otro chaebol?

Cree firmemente que solo es una excusa muy penosa, sabe que su padre está detrás de esto, después de lo que pasó con su ex-esposa, piensa con fervor que está en su derecho de escoger con quién tiene que casarse. No lo entiende, a su padre no le falta nada, puede vivir tranquilamente el resto de su vida sin preocupaciones disfrutando de sus nietos, pero se empecina en querer tener el control de todo. ¿Cómo pudo su madre estar casada con él? No lo entenderá nunca, quiere creer que no tenía otra opción... y que no es igual a él.

Habían llegado a Seúl temprano por la mañana, se quedarían el fin de semana y para su sorpresa se hospedarán en la casa de la madre del enfermero, no había tenido oportunidad de intercambiar más palabras con ella cuando llegaron, debido a las constantes llamadas que recibía por parte de su asistente. Se despidió de Kyungsoo con un beso y de Sehun con un abrazo, ver sus rostros sonrientes calmó ligeramente el dolor de cabeza con el que amaneció.

-Debemos dar a conocer que esta empresa tiene buenos valores.

-No se pueden perder las viejas costumbres.

Se dijo que tenía que mantener la calma, pero la situación empezó a salirse de sus manos cuando su padre hizo mención de Kyungsoo. Estaba fuera de sí, lo admite, pero detestaba tener que soportar el desprecio con el que su padre hablaba de su familia, porque sí, puede que no estén casados, pero el respeto y aprecio que Sehun y él se tienen calienta su corazón lo suficiente como para afirmar que es su familia junto a su hijo.

-Cásate y dale una madre por la que Kyungsoo estaría orgulloso.

-Ya tiene un padre por el que estará orgulloso: Sehun. Lamentablemente no tiene un abuelo por el que pueda sentir lo mismo -no le permitió a su padre continuar-. Hagamos esto rápido, compro tus acciones y este problema queda zanjado.

-Levanten la mano quiénes están a favor de que se hagan reajusten en el puesto directivo.

Suspira cuando ve a todos los vejestorios levantar la mano dispuestos a quitarle su puesto. Esa es su forma de asustarlo, de querer someterlo, pero no quiere darle el gusto. Se preguntó qué debía hacer, por primera vez en mucho tiempo se pregunta si quiere vivir así el resto de su vida. Su línea de pensamiento fue interrumpida cuando llegó un mensaje a su teléfono, lo abrió y le fue inevitable sonreír.

Una foto de Kyungsoo lleno de puré de papa en la cara y un Sehun despeinado igualmente embarrado de comida. Ambos sonríen a la cámara.

Preparé puré y todo terminó siendo un desastre.

¿Cómo va todo? Recuerda no estresarte por tu padre, pase lo que pase encontrarás una solución.

Tienes mi apoyo.

Y quizás ese era el empujón que necesitaba para tomar su decisión. Nunca se sintió tan liberado y tranquilo, sabe que lo que se viene más adelante será complicado, pero siente alivio al saber que no estará solo y que tiene la motivación suficiente como para empezar de nuevo en otro lugar. Se detuvo a mirar a todos los presentes en la mesa y con una sonrisa se levantó de su asiento.

-Cedo formalmente mis acciones a Kim Minseok, renuncio al cargo de director ejecutivo.

Ignoró por completo la estupefacción en todos los presentes, todos y cada uno se mantuvo en silencio, exceptuando a su padre, quien con el rostro carmesí por la rabia lo siguió fuera de la sala. Apresuró el paso llegando hasta el ascensor, pero su padre se interpone entre la puerta y él.

-¿¡Qué demonios estás haciendo!? ¿¡Quieres dejarme en ridículo!? ¿¡Qué clase de imagen crees que doy si no puedo mantener a raya a mi hijo!?

-¡Por el amor a Dios, papá! ¡Ya basta! -explota, da un paso hacia atrás iracundo, lleva una mano a su cadera y con la otra señala a su padre-. ¿¡Cuál es tu problema!? Quiero a mi hijo y a su padre en mi vida, son lo más maravilloso que puedo tener.

-Tienes que entender que siempre tengo la última palabra. ¡Siempre! -da un golpe con el pie al piso y golpea su pecho-. ¡Levanté esta empresa con sangre! Todo lo que llevas puesto, toda tu vida la tienes gracias a mi dinero, lo mínimo que me debes es obediencia absoluta. ¡Deberías estar de rodillas ante mí siempre!

-¿Tuviste un hijo para que sea tu títere? -deja sus brazos caer atónito, siente náuseas-. ¿Eso somos mi hermana y yo para ti?

-Vuelve a esa sala ahora mismo, antes de que...

-¿De qué? ¿Qué vas hacerme? -cuadra los hombros y su mirada se oscurece-. No soy un niño y tampoco tu títere, haz todo lo que quieras con esta empresa -mira fijamente a su padre a los ojos-. Levantaste esta empresa en base a corrupción y lavado de dinero, durante años me encargué de limpiar toda tu porquería arriesgando mi vida. Si vas a amenazarme juega bien tus cartas, porque hasta a dónde me concierne, tienes todas las de perder.

Apartó a su padre y salió de la empresa con prisa, mientras lo seguía gritando como un energúmeno. Cuando subió a su auto, condujo rápido hasta la casa de la abuela de su hijo, al llegar se encontró con el enfermero y lo primero que hizo fue abrazarlo. Su corazón late tan fuerte que podría salir de su pecho.

-Abandoné la empresa -siente las manos del enfermero acariciar su espalda.

-Bueno, eso debe tener un proceso burocrático espantoso. ¿Qué tal si despejas tu mente con una porción de puré de papas? -se aparta un poco y le sonríe al ejecutivo, aprieta ligeramente los antebrazos del contrario-. De postre hice pastelillos de vainilla.

-¿No crees que hice una locura? -pregunta afligido.

-Confío en tu juicio -su mirada se suaviza-, confío en ti.

-Gracias -dijo con el corazón en la mano.

-Oh, no me agradezcas, pese a tu cara de cachorrito no vas a salvarte de bañar a Kyungsoo -aquello logra hacerlo reír mientras el enfermero sonríe encantador.

Y sí, sabe que con él al lado todo estaría bien.