-A veces, sí.

-¿Quieres tenerla siempre a tu lado y qué piense en ti?

-¿No todos piensan en mí?

Dinah golpeó su frente.

-Hablo en serio, Jauregui.

Reí.

-Sí, sí quiero.

Ella sonrío como un gato de una película vieja. Se llamaba Alicia en el País de las Maravillas.

-Le quieres.

-¿Qué? No.

Rió alto.

-Te niegas a ti misma. La amas.

Canturreó de manera juguetona.

-No te juzgo. Camila, es una buena chica después de todo. Además, es muy bonita.

-¿Qué haces viéndola de más? Tienes una prometida.

-Respeto y amo a mi prometida, pero eso no me hace ciega, Lauren.

Giré mis ojos.

-No sé si yo pudiera confiar de otra persona a tal punto de alejarme de ella por meses. Podría serme infiel.

-Esa es la base de una vida monógama, Lauren. La confianza.

Mordí mi labio inferior y suspiré suavemente.

-¿Debería hablar con Camila?

-¿Sobre qué?

Pensé haber sido clara acerca de mi tema de conversación, pero para Dinah, no lo era. Seguramente, quería que me expusiera lo más que podía.

-Sobre mis sentimientos.

-¿Qué ha dicho ella?

-Que me quiere.

-¿Cómo para una vida monógama?

Asentí. Dinah elevo una ceja y asintió lentamente. Procesaba todo y pensaba en que aconsejarme.

Había estudiado todo lo posible, pero jamás nada sobre la vida amorosa o la vida de monogamía. Los Jauregui's estábamos programados para una vida de total poder, pero jamás en una relación seria.

Ahora comprendía a Camila y sus chistes hacia mi persona y hacia mi familia.

Eramos unos descarados. Todo lo que hacía el poder que portábamos.

-Deberían aclarar todo y ver como será todo de ahora en adelante. No pueden seguir estando juntas un día y al siguiente no y así sucesivamente. Las personas miraran mal a Camila.

Asentí comprensiva. Debía mantener bien la imagen de Camila porque pocas personas conocían de los líderes del bajo mundo. Por lo cual, Camz seguía siendo una persona normal.

-¿Cómo supiste que Normani era la elegida?

Ella rió colocando sus brazos sobre la mesa.

-¿Intentas comparar tu relación junto a  Camila, con la mía? Hay muchas cosas diferentes, Lauren.

-Solo... Quiero saberlo.

Sonrío y me miró divertida. Ella había soñado mucho con este momento. Fui yo quien me retrase según ella. Suspiré, esperando que me diera todos sus consejos acerca de lo que podría pasarme a continuación con Camila.

-Siempre estuvimos atraídas. Tú mejor que nadie lo sabe. No puedes poner en la misma balanza mi relación con la tuya.

Suspiré.

MonógamaWhere stories live. Discover now