Retazos

Mirando el cielo

Para cuando Rafael se fue a su casa, Perla, Pilar y Pabla ya sabían todo de él, era el segundo hermano, era un tipo serio, amable y atento, pero fue la mamá de ellas quién preguntó lo que todas querían saber.

"Hija ¿Hace cuanto tiempo que viene a dormir a esta casa ese muchacho?"

"Hace seis meses."-respondió Pilar roja como tomate y tratando de no sonreír.

"Debiste presentarlo a tus hermanas antes, me parece que no es correcto lo que hiciste."

"Lo hablaremos en la reunión del Martes mamá, no te quepa duda que haremos nuestros descargos"- respondió Perla mirando a su hermana.

Mientras el domingo terminó bien y el sol del lunes traía clases, trabajo y reuniones que las mantuvieron a todas ocupadas, salvo el desayuno con su madre, nadie pudo ir a casa ni un instante. Lo que no impidió que Perla diera explicaciones cuando se vieron en la tarde.

"¿Por qué no nos avisaste que mamá vendrías a casa?"- preguntó Pabla.

"Porque no era relevante."

"¿Viajó por lo que te pasó?"-Preguntó Pilar.

"No, sólo viajó y únicamente dijo que estaría pocos días en casa".-Respondió Perla haciendo un gesto con la boca que para quienes la conocen, algo está ocultando.

 "Perla, si no nos dices que es lo que ocultas, tendremos un problema más que agregar a la minuta de la reunión del martes."- dijo Pabla.

 "¿Por qué no respetan a mamá?, ella es quien no quiere que Ud.'s sepan que pasa, por mí les diría todo."

"Para variar tienen secretos ustedes dos, no has pensado en que esto es malo para nosotras?"-Dijo Pilar mirando a su hermana a los ojos.

"Eres bien especial, ocultaste a un hombre en casa por 6 meses y me sales con que esto es malo."

"Sabes perfectamente que no hablaremos de mi tema hasta el martes, así que no te salgas por la tangente. ¿Qué le pasó a mamá?"

"Tiene una cita con el ginecólogo, es todo lo que sé."

A las siete de la tarde llegó Pilar con Rafael a casa, estaban sus hermanas en la cocina tomando una taza de agua de hierbas.

"¿Qué pasó?"-dijo a modo de saludo.

"Mamá no ha vuelto, parece que salió a su cita esta mañana pero no ha regresado".

Las miradas de las tres hermanas se fueron en dirección a la puerta de entrada.

"Es hora de llamar a papá"-dijo Pilar.

Perla miraba Rafael, como explicarle que esto no era bueno y que sería mejor que se fuera, pero no fue necesario decirle nada, él se excusó y se fue de la casa dándole un gran beso a ella en la puerta. La llamada fue corta, Pabla no tenía expresión en el rostro, sus hermanas la miraban expectantes.

"Dice que mamá esta fuera mirando el cielo..."-dijo Pabla lentamente.

Las tres hermanas se levantaron y mirando por la ventana al patio, allí estaba su mamá, literal mirando el cielo.