Chan's Diary

XIV

La lengua del mayor exploraba la suya, él sostenía su nuca para no separarse, Seungmin por su parte, estaba técnicamente acostado encima del otro con sus manos en el rostro del castaño.

Cuando luego de haber tenido un largo día en clases, sentía un leve cosquilleo por ver al otro y cuando lo vió, no dudó en lanzarse encima a besarlo, donde ahora se encontraba en esa situación.

Cuando lo besaba sentía sensaciones extrañas dentro de él, pero no eran malas, mas bien le gustaba sentirlas, la calidez y tranquilidad que le trasmitía el pequeño, no se comparaba con nada, pero todas estas emociones, eran ignoradas por Seungmin.

—Min, no tienes que estarme besando a cada rato si no quieres.—dice un poco entrecortado al romper el beso. Se sentía mal porque Seungmin siempre era bueno con él y lo ayudaba a no sentirse solo, pero, veía su ayuda como un "aprovechamiento" de su parte, y él no quería ser así, el sólo quiere ser amigable y llevarse bien con su amigo, que sabía que nunca le correspondería.

—No me molesta hacerlo.—le sonríe un poco y le da un beso en la mejilla, bajándose de encima y dirigiéndose a la pequeña cocina.

"Debe estar confundido, debes aprovechar eso", recuerda la voz de sus amigos, pero se sentía mal, él ni quisiera había confesado su sexualidad a alguien como para meter a Seungmin en el mismo problema.

—Vamos a jugar videojuegos.

—Estoy de acuerdo, pero debes pedir bebidas.

—Está bien, también pediré snacks y una pizza.

—Acepto.—sonrió sabiendo que iba a ganar.

[...]

—No puedo creer que me hayas ganado.—Chan hace un puchero con una expresión exagerada de decepción.

—Tengo muchos secretos que no conoces.

—Ash~, ahora se que no debo jugar videojuegos contigo.

—Si me das un besito puedo reducir tu castigo.

Chan lo mira un poco asombrado pero sólo se levanta y se acerca lo suficiente para que Seungmin agarrara su rostro y le dejara muchos besos en los labios.

[...]

Cuando se hizo la hora del almuerzo, todos estaban en sus lugares, excepto una persona: Chan, quien ni Jeongin ni Yujin sabían con quien se había ido, dejando a Seungmin preocupado.

Pero pasó la hora por completo y no vieron rastros de el castaño, lo cual era raro ya que el comedor estaba más habitado que antes con personas murmurando miles de cosas, que no alcanzaban a oír.

Para Kim poder calmarse, ya que estaba preocupado por el pequeño, sólo esperaría al iniciar la clase de biología que tenían juntos, si no lo encuentra allí, no sabría como calmarse.

[...]

Entró al salón antes de que tocaran el timbre, quería encontrar a Chan sin que hayan más personas a su alrededor.

Visualizó una cabellera castaña en la mesa de la ultima fila, ¿había estado durmiendo? Se acercó y dejó la mochila para sentarse a su lado, acción que a el pequeño lo hizo sobresaltar.

El alto se detuvo cuando ve a Chan en el estado en el que estaba: ojos hinchados de tanto llorar y no había ninguna pizca de su linda sonrisa en su rostro. A Kim le rompió el corazón verlo así.

Bang sólo volvió a esconder su rostro entre sus brazos sin querer establecer una conversación con el otro.

—Channie, no me ignores, ¿qué pasó?

Escucha como sorbe la nariz y trataba de ver como sacar sus palabras.

—No tengo ánimos, Minnie.

—¿Quien te hizo sentir mal? No me vas a venir a decir que se te dió por llorar porque sí.

—Los chicos estaban bromeando como habitualmente lo hacían, pero hoy de verdad estaban más intensos, se pusieron insoportables a decir estupideces sobre Leslie y yo, hasta que me molesté y les grite que ni siquiera me gustaban las chicas.—solloza.—Me declaré delante de ellos Min, saben que me gustan los chicos, se van a burlar de mi.

Seungmin se sentía mal por el pequeño, sólo se limitó a abrazarlo, para darle a entender que no lo dejará solo.

—¿Se burlaron de ti luego de que hayas dicho esas palabras?

—No, sólo se fueron.

—Espero que no te vayan a hacer algo malo, se supone que eran tus amigos.

—Espero poder ignorarlos.