VIII

268 43 0
                                    

El pequeño se encontraba cerrando su casillero cuando ve a Seungmin caminar hacia él.

Nervios, era lo que sentía el castaño, esas pequeñas cosas que llamaban mariposas lo molestaban cada vez que lo veía.

Pero, ¿a quién podría culpar? Seungmin parecía un modelo caminando entre esas personas que habitan en la universidad, su aura fría era algo que atrapaba y te llamaba por completo la atención.

Por supuesto era deseado por muchas, pero los estudios eran lo más importante para él.

Eso y que era un perfecto antisocial.

Pero a Chan le agradaba, es más, hasta estaba bobo por él, las pocas veces que ha visto al alto ha sido lo que llamarían un chico perfecto sin malas intenciones, todo lo que un padre quisiera que su hija tuviera de novio.

Lo había estado considerando como alguien admirable, pero lo que sentía cada vez que lo veía o cruzaban palabras, se sentía de una forma diferente.

—Te fuiste antes de que despertara.—el alto dice llegando a su lado.

Chan se levantó temprano para ir y contarle a sus amigos lo que pasó con su crush estas horas que pasó con él.

Se habían quedado despiertos hasta casi las 4 de la mañana hablando.

Para el castaño se le hacía raro ver a Seungmin interesado en hablar con él, antes no tenían una conversación como tal porque siempre estaba apurado por ir a algún lugar o estaba muy concentrado haciendo sus tareas, fue emocionante para Chan que el otro quisiera tener una amistad con él, le dijo que trataría de pasar más tiempo juntos y que se sentaría con ellos en la hora del almuerzo.

—Tenía que ayudar a Jeongin para algo de clases, es muy olvidadizo.—mintió.

—Ahora no te escapas, vamos a comer.

—Vamos, Yujin y Jeongin deben estar allá.

Seungmin asiente y camina a su lado, sabía la relación que tenían los 3 y claro, si quería ser amigo de Chan tenía que estar con los amigos de éste.


[...]


Mientras comían, el alto pudo observar como el castaño observaba de reojo a Minho, quien accidentalmente se resbaló y la comida le cayó encima provocando que las otras personas se burlaran mientras que su novio Han iba y lo ayudaba dándoles miradas feas a todos.

—Hacen una linda pareja.— Kim le susurra a Chan, quien se sorprende al escuchar a Seungmin decir eso.

—Supongo.—dice bajo para meterse otro bocado de comida.

—Tienes un secreto Channie, no me rendiré hasta que quieras decírmelo.—aunque ya lo sé. Pudo observar como el contrario se empezaba a sentir incómodo.—Puedes confiar en mí.

—Algún día lo haré, Min.

—Sólo quiero ser tu amigo.

—Ya tengo dos.

—Pero yo no, así que ahora lo serás.

—Si quieres.—se encoje de hombros y se voltea listo para irse, dejando a Kim comiendo solo, ya que Yujin y Jeongin ya se habían ido.


[...]


—No tienes por qué empezar a evitarme, te debes acostumbrar a verme mas seguido, Chan.—el pequeño lo miraba incrédulo desde la puerta de la habitación, acababa de entrar.

—Son las 2:39 am. Kim, ¿qué haces despierto?

—Terminaba algunas tareas, quiero salir de ellas ya.—suspira cansado.

—Debes tomar un descanso.

—Oh lo hago, incluso tomé una pequeña siesta de nueve a doce.—suelta una pequeña risa.—¿Qué hacías tú?

—Me quedé dormido viendo una película con Jeongin en su habitación.

—Supongo que no debes tener sueño todavía.—ve como Chan asiente y sonríe.—Entonces podemos hablar, en la madrugada las conversaciones tienen más sinceridad.

Chan's DiaryOnde histórias criam vida. Descubra agora