Capitulo 23

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– Llegamos. – Nitta detuvo el auto. – El puente Yasohachi del cañon Koi no Kuchi. Colocare un velo si vemos que hay un espíritu.

– ¡Recibido! – contestó yuji estirando el cordel de elástico.

...

– ¡Me suicidare! – grite con un tono aburrida, desde una orilla del puente. Eleve mis brazos hacia arriba. Hubo un silencio rotundo, nada mas que el ruido de los autos desplazarse por el puente.

– ¡Tiene que oírse mas creíble! – mencionó yuji con visible sonrisa. Chasquee la lengua fastidiada.

– ¡Me mataré! La vida es tan miserable... ¡No me quedara otra solución mas que esta! – eleve mi tono de voz, con un deprimente. Trage duro al ver lo desolada oscuridad que había debajo del puente. Devolví mi vista hacia arriba.

Idea de yuji. Fue tanto el hostigamiento de su parte que no me quedó mas remedio que aceptar.

– No funcionará. Sal de ahí. – comentó megumi con su mirada fría.
– ¿Habrá que intentar con el cordel? – cuestiono nobara mirando a yuji de manera maliciosa.

...

Los autos pasaban sin cesar. Yuji soltó un bostezo aburrido. Nos manteníamos sentados, mirando la nada. Había perdido la noción del tiempo, y también había perdido la cuenta de cuántos café había tomado, pero justamente ahora, deseo un sabroso café.

– Al final no encontramos ni el menor indicio de la maldición. – soltó la pelicastaña absolutamente aburrida.

...

– No encontramos ningún rastro o presencia. – exclame para luego darle un sorbo a mi café.
– Ya veo. Parece que no era allí. Habrá que empezar de cero. – Nitta se mantenía de brazos cruzados.
– Pero tenemos que apresurarnos, ¿no? – cuestiono yuji, lo cual asentí.
– ¿Por qué? – preguntó nobara ganándose la mirada de yuji.
– Por que es un sitio embrujado famoso. Puede que otras personas también acabarán malditas. – nos observó uno a uno. – Y la tasa de fatalidad es del 100%. No quieren ver a otros morir, ¿o si?

Solté un suspiro, no quiero ver morir a mas personas. Es lo que menos quiero.

– Es cierto... – murmuro nobara, dandole la razón a yuji.
– ¡Bingo! Lo que estaba de moda era saltar, ¿no? ¡Puede que esa parte sea la clave! – exclamo nitta con una sonrisa, alzando su dedo índice.

¿Acaba de decir "bingo"? Es lo mas tierno que pude escuchar en mi vida. Sonreí alegre, me parecía divertida la situación.

– ¿Acaba de decir "bingo"? Lo dijo, ¿no? – comentó itadori observando a nitta con ternura.
– ¡Lo hizo, lo hizo! – afirmó nobara a su lado.
– Itadori ya lo intentó. – respondió megumi con un sandwich en su mano. Asentí a su lado.
– ¡¿Saltaste con ese cordel del plástico?! – preguntó nitta abrumada. Haciendo los peores escenarios posibles en su mente.
– ¡Los encontré! ¡Menos mal! – una voz intervino en nuestro momento. – ¡Fushiguro-san!

El peinado raro, estaba sobre un bicicleta junto con una chica detrás de él.

– ¿Quien era ese? – preguntó nobara mirándolo con una expresión aburrida.
– No tengo ni idea si era A o B. – respondi observando a los chicos recién llegados.
– Fue a la secu con fushiguro. Fuiste bastante grosera con él. – aclaro yuji, nobara se acordó.
– Hablaban del puente Yasohachi, ¿no? ¡Que alivio! – exclamo con cansancio, parecía haber recorrido tanto, viendo como gotas de sudor bajan por su frente.
– ¿Fujinuma? – murmuro por lo bajo el azabache. Arquee una ceja. – Fuimos compañeros.

Bella Nieve | Megumi Fushiguro x Reader Where stories live. Discover now