Le perteneces al Alpha

Capítulo 28

(...)

Por otro lado Austria aún seguía rechazando despiadadamente a Gabel, mientras recibía una despiadada reprimenda.

Estaba drogada de tal manera que era incapaz de poder transformarse por completo.

Siempre que Gabel trataba de acercarse ella lo hería brutalmente y posteriormente era golpeada.

Otros dos guardias entraron en ese cuarto de tortura y exigieron llevarse a la mujer.

— Es una orden de Stefan — Habló uno.

— ¿¡Y para qué la quiere él!? —Gabel estaba excesivamente molesto.

— No sabemos, pero danos a la mujer. Una vez que Stefan ya no la necesite te la devolveremos. — Habló el mismo guardia. Gabel estaba aún más molesto, y no quería entregarle a Austria, pero era una orden del alfa. Y a regañadientes tuvo que ceder.

— Está bien, pero yo estaré con ella a todo momento.

Cuando les dio el permiso y los guardias se acercaron a Austria, tuvieron que tener cuidado de esquivar los ataques que ella intentaba darles aún encadenada cuando se le acercaban demasiado.

Con una increíble velocidad, mientras las defensas de Austria estaban cien porciento puestas en los dos guardias a quienes atacaba, Gabel la sujetó con fuerza desde atrás, reprimiendola por completo.

Ella luchó para liberarse pero le fue imposible debido a su descomunal fuerza, y encadenaron sus manos detrás de su espalda.

(...)

Björn se encontraba enfrente de Stefan en completo silencio mientras se miraban con desprecio. Hasta que para su sorpresa fueron trayendo el mal herido cuerpo de Austria, que debido a las drogas sus heridas no terminaban de sanar.

Él se horrorizó al verla y rápidamente su sangre hirvió al darse cuenta de por qué ella tenía ese olor tran extraño.
Quiso despedazar a Gabel.

Arrojaron el cuerpo de Austria al suelo a unos pasos de Björn y él terminó por acercarse a ella para poder acariciarla con el rostro lleno de preocupación.

— Seguramente se estarán preguntando "¿Por qué los traje aquí?" — Habló Stefan, imponente para frente a ellos. A su derecha unos pasos más atrás también estaba Hungred, quien Austria asesinó con la mirada.

Luego ambos hermanos miraron a Stefan con odio he irá en sus ojos del mismo color ámbar.

— Primero porque me siento muy traicionado por ti Björn... Yo te consideraba como un hijo y me duele lo que hiciste... O bueno, trataste de hacer con la escurridiza rata de Zeldrick. — Se acercó unos pasos — Estoy muy dolido Björn, en realidad estoy sufriendo por tu traición y como yo estoy sufriendo también quería que lo hagas, viendo a tu hermana así... — Rio por lo bajo. — Y segundo... — Observó a Austria y le acarició el cabello, mientras está vez ella tenía las manos encadenadas detrás de su espalda. Ella se asqueó — No me conformo con tener esta tierra. Yo quiero a Nación, el próspero y bien ubicado territorio de tu alfa. — Se alejó de ambos — Quiero saber cuál es la debilidad de sus muros para poder entrar y también cuál es la debilidad de su tan aclamado y sobrevalorado alfa.

— Primero me arranco la lengua y me la como, antes de decirte algo — La muy mal herida mujer sorprendió al alfa de colmillo rojo.

— Vaya!... La sangre que corre por tus venas se ve que es muy fuerte. Parece que toda la descendencia de ese "hombre" termina siendo brutalmente rudo. — Sonrió gustoso — Viendo tu estado actual, me sorprende que aún sigas siendo desafiante... Bueno, después de todo la increíble fortaleza mental de los Pendraco es algo que me encanta. Lastima que son muy leales al bando equivocado.