𝘉𝘰𝘺𝘧𝘳𝘪𝘦𝘯𝘥

𝘊𝘢𝘱𝘪𝘵𝘶𝘭𝘰 3 🍁

Omnisciente:

Para ser precisos Jack estaba harto de escuchar a su odiosa hermana hablar de lo mismo todo el maldito camino: Lo que pasó en aquella alocada fiesta fue tema de conversación a temprana hora del día, no solo en el auto de camino al colegio sino también en el desayuno, resulta que no solo consiguió la atención de Aron, también su número. Jack no entendía cómo carajos Samantha le había hecho para conseguirlo, si muy apenas se miraban y solo por accidente, no sabía si preocuparse o simplemente dejarlo pasar.

-Pienso hablarle hoy -chilla de emoción mientras conduce, iban de camino al instituto-, lo buscaré en el descanso.

-Que bien.

-¿Qué pasa? ¿Por qué esa cara? -le cuestiona, esperando más emoción de parte de su hermano.

-¡Felicidades! -fingió una sonrisa que deja más conforme a la mayor, quien esta vez se arregló con mérito, para ser del total agrado de Aron. Jack apenas alcanzó a bañarse y cambiarse, sin embargo se veía muy bien aunque nadie se lo dijera.

Los hermanos entraron al instituto y se separaron para ir a su respectivo salón, un grupo de chicos esperaba a Sam para acompañarla mientras Jack se iba solo, como siempre, sin amigos, la mayoría de los amigos que tiente Samantha ahora, eran amigos viejos de Jack, comenzaron siendo amigos de él hasta que conocieron a Sam y lo dejaron de lado, como todo lo bueno que tenia, ella se lo quitaba sin importarle nada, Jack estaba más que acostumbrado, prefería no tener amigos y evitarse la molestia de ver cómo se alejan por culpa de su hermana.

Al llegar a la clase este no dejo de pensar en lo emocionada que se veía Sam, tal vez salir con Aron le haría muy bien y se relajaría un poco, así dejaría de exigirle tanto y no se sentiría tan agotado, con enormes ojeras acechándolo, pensando en cómo ayudar a su hermana en su loca idea de seducir al chico más popular del instituto.

Después de unas horas termina la clase de historia y el timbre suena, significaba descanso. Sale de su salón y recuerda haber quedado con Sam para verse en la cafetería ya que su celular aun no reaccionaba. Esta vez si tenía dinero para él solo, su papá le dio lo suficiente para toda la semanas tan pronto como supo que ayer no había comido gracias a su envidiosa hermana.

Al entrar al comedor se encontró con las mesas repletas de chicos y grupos distintivos, por un lado estaban los deportistas, por otro las populares, los inteligentes y al final los antisociales a la orilla, su hermana se encontraba sola en la mesa de siempre, al parecer había corrido a sus amigos para ejecutar su plan, Jack no dudo en acercarse y sentarse sin previo aviso.

-Carajo, no me asustes así -exclama al sentir la fuerte presencia del chico-. ¿Acaso eres un fantasma? -ciertamente lo pareces.

-¿De verdad? -aborrece con los ojos en blanco al escuchar aquello.