『𝐒𝐭𝐫𝐨𝐧𝐠 𝐋𝐨𝐯𝐞』-Harwin Strong

Cap 2

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Llegue a la capital de madrugada, camine los pasillos con calma, los criados y caballeros me habían recibido con más alegría de la que esperaba, supusieron que estaba allí por motivos de la fiesta y rápidamente me asignaron una cómoda habitación con balcón cerca de la habitación de Rhaenyra, les pedí que no anunciaran mi llegada aun, hasta la hora del desayuno, quería darles la sorpresa de mi presencia, pero tampoco quería hacer un escándalo así que antes del desayuno iría a visitar a Rhaenyra.

Ivy seguía desempacando mi ropa y mis criadas estaban peinando mi cabello esperando que se secara después del baño que tome

-Ya casi es hora del desayuno princesa- otra de las criadas que lleve conmigo me acerco un precioso vestido rojo con bordados dorados

-Ashra, te lo agradezco, pero tengo en mente mi propio vestido-señale el vestido negro que justo Ivy acababa de sacar de uno de los baúles-podrías ayudarme por favor

La chica trajo para mí el vestido, tenía un perfecto escote V que resaltaba mis bustos, la cintura era ceñida con un corseé dorado y las mangas de tela más delgada caian de manera elegante junto a los bordados dorados de rosas y espinas

-un perfecto vestido de las mujeres de Highgarden- sonreí, siempre trataba de promover en mis vestidos el talento de las costureras de highgarden, así es como conseguí que grandes jóvenes de casas nobles compran mas telas y bordado de nuestras tierras- ayúdenme a ponérmelo

Mi escote escandalizaría a Alicent por supuesto, pero era algo a lo que estaba acostumbrada.

Me ayudaron a arreglarme y maquillarme y una vez lista me puse el más reciente perfume que cree, tenía un aroma dulce a cítricos y las más finas peonias.

-huele exquisita mi señora-dijo una de las chicas que me habían asignado del castillo-había oído sobre sus famosos perfumes, pero jamás había olido algo tan bueno como esto.

-gracias por el alago, puedo obsequiarte poco si lo deseas-le indique a Ashra que me diera un muy pequeño contenedor donde tenía perfume- este no es el mismo, pero es una colección que saldrá a la venta pronto

- mi señora, no soy digna de tal regalo, sus perfumes valen mucho oro - dijo ella, pero aun así lo tomo en sus manos con ganas mientras sus ojos brillaban de emoción, sonreí, ya había caído la primera, si ella corría el rumor y el aroma de la nueva gama de perfumes que saldrían entre los plebeyos y trabajadores del castillo, en una semana cuando se anuncie que serán accesibles para todo público y no solo los nobles, las ventas incrementaran

-tómalo como una compra de tu lealtad-bromee y la chica enrojeció - bien, iré a visitar a la futura reina

Me di una última mirada en el espejo, el maquillaje era natural, el vestido perfecto y mi largo cabello plata ondulaba hasta mi cintura, todo estaba perfecto para enfrentar todo y sin más salí de la habitación seguida por ivy

-Ivy necesito que contactes a todos los talentos que envié a la capital, mas aun los que están en el castillo, necesito que sean mis ojos y oídos- te veré en la noche,ya que estamos instalados en el campamento,trata de ser discreta.

-se hará como usted diga princesa-hizo una reverencia y se marcho en dirección contraria a la mía

Avance unos metros más y al ver la decorada puerta de la habitación de rhaenyra me sorprendí al no ver a nadie velando la puerta de la habitación, en especial sabiendo la devoción de Sir Criston Cole por Rhaenyra, así que tratando de hacer el menos ruido posible abrí la puerta y al ingresar a la habitación yo esperaba ver a Rhaenyra durmiendo plácidamente, pero lo que mis ojos percibían era otra cosa totalmente diferente

Sir Criston se había levantado abruptamente de la cama en la que yacía con la futura reina de westeros, mientras que Rhaenyra parecía no saber ni donde esconderse, ambos desnudos.

Un solo respiro me basto para que mi desarrollado olfato que tanto me había ayudado a desarrollar los perfumes percibiera el olor a sexo que ese cuarto desprendía

-princesa, es una sorpresa verla aquí-me dijo el chico con cara de terror y le sonreí muy a fuerza sin despegar la mirada de una aterrerada Rhaenyra

-Helena, por favor-me dijo Rhaenyra, mientras se levantaba envuelta en sabanas

-es bueno verlo de nuevo Sir, si me disculpan- pase de él y de rhaenyra y antes de salir, dije- Lo hablaremos después, no diré nada, sabes que no haría nada que pueda afectarte, pero no creas que es porque apoyo esto.

Y con un portazo salí de allí, estaba algo sorprendida y molesta, no era seguro arriesgar su imagen como doncella, pero la entendía, no era algo que no esperase de igual manera, era una adolescente y experimentar era normal, pero igual me asegurare de que al menos tome Té de la luna, claro después de darle un sermón sobre tener mas precaución.