Capítulo 8: Revelations

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Todos se esforzaban por no presionar a Hadrian para que diera explicaciones, y Nick podía notar que se sentía abrumado y reacio a compartir algo más allá de una pequeña charla educada. La creciente curiosidad de su amigo parecía hacer que Hadrian se mostrara más circunspecto. Apiadándose del adolescente, le comunicó sutilmente a Monroe que necesitaba hablar con Hadrian a solas. Demostrando su habitual habilidad para captar rápidamente, Rosalee orquestó sin problemas un éxodo de la sala de estar.

Cuando por fin estuvieron solos, los dos varones se quedaron repentinamente callados, ambos inseguros de sí mismos. Mientras que él no podía dejar de contemplar al joven sentado frente a él, su hijo parecía incapaz de mantener el contacto visual durante más de un momento. Aclarando su garganta, Nick decidió una vez más apuntar a una comunicación franca y honesta. Al ver que los ojos verdes brillantes levantaban la vista en respuesta al ruido, comenzó a hablar en voz baja.

-Dijiste que te habían dicho que estaría aquí-.

Ante el asentimiento de confirmación, Nick continuó -¿Podrías explicarme eso?-.

Levantando la vista de nuevo, su hijo dudó en responder por un momento. -Es difícil de explicar. No estoy seguro de que me creas. No estoy seguro de que me creyera-.

Nick asintió, aceptando que no todo el mundo estaba tan acostumbrado a lo extraño e inexplicable, olvidando por el momento el drama anterior y asumiendo erróneamente que su hijo simplemente tenía miedo de que Nick pensara que estaba loco. A Nick le había costado años adaptarse a la vida como Grimm y le aterraba, con razón, la idea de que alguien lo descubriera. La reacción de Juliette la primera vez había sido prueba suficiente de que la mayoría de la gente no aceptaba la realidad de los Wesen, la magia o lo inexplicable.

-¿Qué tal si empiezo hablándote de mí?-.

El rápido acuerdo que dio Hadrian hizo que los labios de Nick se crisparan mientras luchaba contra su diversión ante el afán del adolescente por desviarse y retrasarse. Reaccionando rápidamente cuando Hadrian estrechó sospechosamente sus ojos, Nick comenzó a hablar.

-No eres el único que ha llegado a este salón esta noche a través de un extraño portal-.

Los ojos verdes se abrieron de par en par en respuesta, pero antes de que pudiera ser interrumpido, Nick continuó -Un amigo y yo también llegamos a través de uno. Habíamos viajado a otro lugar... o dimensión, para luchar contra un monstruo que intentaba secuestrar a mi hijastra. Utilizaba espejos para acecharnos y así fue como viajamos originalmente a su casa a través de la magia de sangre por medio de un espejo-.

Nick hizo una pausa, notando que su hijo se había puesto repentinamente tenso antes de desplomarse aliviado. -Utilizó a mi hijo menor, tu hermano Kelly, para intentar chantajearme para que le entregara un artefacto de inmenso poder-.

Los ojos verdes eran ahora tan enormes, que Nick se preguntó distraídamente cómo no estaban llorando.

-Casi funcionó. Pero Zerstorer fue derrotado por el poder de nuestra línea familiar la mía, la de Trubel, la de Kelly... y la tuya. Somos Grimms-.

Ahora Hadrian parecía confundido en lugar de sólo aturdido. Nick esperaba que su nuevo hijo se quedara al menos el tiempo suficiente para entender su herencia. El inmenso peso de sus dones familiares no era algo que debiera manejarse solo, nunca le desearía esa lucha a Hadrian. Dejando que la breve explicación se asimilara, Nick observó pacientemente cómo el rostro del adolescente pasaba por una miríada de expresiones antes de que se reprimiera visiblemente y se estableciera en la esperanza.

-¿Tengo un hermano?-.

Asintiendo con la cabeza, Nick no pudo evitar sonreír al pensar en su hijo menor. -Está en casa con mi prometida y mi hijastra. Espero que puedas conocerlos mañana, si te apetece-.

THE GRIMM WIZARD Where stories live. Discover now