One-shots | Male!Characther x Male!Reader | Vol. 2

My Little Pony | Discord

— Discord, prepare algo de té ¿Gustas? — el pony entro a la sala, llevaba consigo una bandeja con una tetera, dos taza y un frasco con terrones de azúcar

— Ya que... — respondió, el de melena azul dejo la bandeja sobre la mesa de café y sirvió en ambas tazas el té

— ¿Uno o dos terrones? — preguntó

— Tres... — respondió el híbrido

Cuando estuvo lista la taza del draconicus se la entrego, este la tomo entre sus patas y empezó a sorber tranquilamente.

Miró al unicornio, este se estaba sirviendo algo de té, pero no sé puso ningún terrón de azúcar, solo se sentó en el sofá frente a él. Aunque noto algo nuevo en su rostro.

— ¿Usas lentes? — preguntó a notar aquel par sobre su cara

— Sí, mi padre no en la mejor vista de todas así que yo y Twilight se la heredamos. — tomo un poco de su té — Twilight usa lentes de contacto, yo solo los necesito usar cuando leo. — aclaro, recordaba bien que a su hermana menor no le gusta a usar sus  lentes cuando era más pequeña

— Entiendo. — no dijo nada más, no tenía de que hablar, por primera vez en su vida no tenía ni la más mínima idea de cómo molestar a alguien

— Te notó aburrido ¿Quieres salir a caminar? — propuso, dejo su taza sobre la bandeja, ya se la había terminado

— Por favor. — imitó su acción de dejar su taza sobre la bandeja

— Ok, espérame aquí, iré por mi bufanda. — se llevó la bandeja a la cocina y luego subió a la parte de arriba a su habitación

Discord justo ahí tuvo una idea, ya sabía cómo podía molestarlo un poco. Sonrió malicioso y abrió la puerta, era noche y casi no había nadie afuera así que salió.

Cuando el unicornio bajo ya tenía su bufanda puesta, sonrió tomando las llaves de su casa.

— Listo, podemos irn-... — cuando miro en el sofá largo ya no se encontraba el dios del caos, miro la puerta abierta y se alarmó

Salió corriendo cerrando la puerta detrás de él, vivía en una zona no muy concurrida así que esperaba poder encontrarlo fácilmente. Pero no fue así, no lo veía por ninguna parte.

— Discord! — lo llamaba para que apareciera — Discord! ¿Dónde estás? — esperaba respuesta pero no la recibía — ¡Discord! — llegó hasta una fuente, miro a su alrededor no había señales del draconicus

Se estaba desesperando, si lo perdía Celestia y Luna lo regañarían, y su hermana ya no confiaría en él, ni siquiera le preocupaba la posibilidad de perder su trabajo, tenía miedo de todo el daño colateral que podría haber y por sobretodo perder la confianza de aquellos que le dieron la tarea de cuidar de Discord.

— Uuuh... ¿Dónde estás? — preguntó al aire recorriendo las calles del lugar

Miraba entre callejones y nada, las calles estaban casi vacías, no podía preguntar a los pocos ponys presentes si lo habían visto o se alterarían. 

Eran momentos en los que deseaba que su madre se hubiese casado con un pegaso para haber heredado alas y no una vista cansada.

Llegó a la entrada del pequeño pueblo en el que vivía, se sento sobre el sendero, ya no soportaba la desesperación. Lágrimas se asomaron de sus ojos y salieron como cascadas.

— No puede ser... ¿Ahora qué voy a hacer?... Ya nadie confiará en mi... Lo arruiné... — se decía a si mismo entre sollozos

Discord habría reído desde su escondite si no fuese porque ese no era el llanto que buscaba. Sí, le divertía la desesperación del unicornio, pero eso ya no era solo desesperación, era un ataque de ansiedad.

Las lágrimas caían a cántaros sobre el suelo mientras que el potro se cubría el rostro con sus cascos, los sollozos agresivos solo indicaban que le estaba faltando el aire. Se seguía regañando a si mismo mientras lloraba. Ese llanto era algo que jamás había visto antes.

Bajo de su escondite y camino hasta el unicornio, ese aún no lo veía porque se cubría el rostro.

Discord miró al suelo, los lentes del contrario estaban tirados y uno de los espejuelos se había estrellado. Los recogió, luego miro al pony con pena, se sentía mal de haberlo llevado a ese estado de sus emociones.

— ______________... — llamó su atención no muy seguro de si era lo correcto, el oji ámbar miro al draconicus

— Discord! Ahí estás! — corrió hacía él abrazándolo, el contrario se sorprendió por la reacción, dedujo que fue de manera inconsciente

Y aunque el llanto se había calmado aún no paraba. Lo alejo de él y se acomodo para estará cara a cara con él.

— Perdóname, no debí irme así. — como pudo le limpió las lágrimas que aún salían de sus ojos

— Lo importante es que ya estás aquí... — murmuró el otro tomando una de sus patas con su casco

El corazón de Discord dió un vuelco que lo llevo a sentir un ardor en sus mejillas que jamás había sentido. Desvío la mirada sin saber cómo reaccionar, aclaro su garganta y decidió desviar el tema.

— C-creo que hay que volver... — comentó, el pony asintió con la cabeza y comenzó a caminar de regreso a casa, el Dios del Caos lo siguió de cerca, ya era muy noche así que los pocos ponys que estaban afuera ya se habían metido a sus hogares

Miro el cielo, había luna menguante, era una extraña coincidencia....

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