YO SOY EL MONSTRUO

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IRIS ( 28 de octubre )

Ya había pasado una semana Adam trabajaba en una librería y yo volví al instituto, salía a las 14:15 y Adam todos los días pasaba a recogerme, así comíamos juntos.

Ya era viernes,se me había hecho super corta semana, Adam y yo nos hemos hecho muy cercanos.

Sara me había ignorado toda la semana, no me escribe y ni siquiera me mira.

14:12

Vi la hora y empecé a recoger las cosas y esperé a que sonase el timbre, cuando sonó, salí y bajé las escaleras y ahí estaba Adam esperándome, me acerque a él y cuando notó mi presencia sonrió.

- hola, que tal ha estado tu día - me preguntó

- aburrido, ¿Y el tuyo?

- Bien, he estado organizando algunas estanterías y eso

- Guay, hoy iremos al McDonald's o te apetece en otro lado

- al McDonald's, pero lo pedimos para llevar, así puedo hablarte más de mi y contarte cosas que alomejor necesitas saber

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- Bueno, empiezo desde el principio, mis padres eran de Alemania, pero yo nací aquí en españa, cuando tuve dos años me fui a vivir a Alemania, cuando cumplí los cinco años nos mudamos a suecia hasta que cumplí siete que fue cuando nos mudamos a italia, a los diez años volví a españa, por cierto mi padre siempre era uno de los mejores empresarios de toda europa, eso significa que teníamos muchísimo dinero.

<< Mi madre era ama de casa, era... – Adam suspiró pero siguió hablando– una aprovechada, se casó con mi padre por el dinero que tenía, nunca quiso tener hijos, ella se dió cuenta de que estaba embarazada de mi a los cinco meses y ya era demasiado tarde para abortar, me tuvo y siempre me trataba con desprecio cuando mi padre no estaba delante. Bueno cuando cumplí los diez años, mi madre apareció muerta en mi casa, no tuvo un accidente de auto, se cayó por las escaleras y ya está, solo fue eso.
Mi padre, mi héroe, él lo era todo para mí, él me enseñó a nadar, a montar en bicicleta, me enseñó modales, a ser un buen hombre. También apareció muerto, su cuerpo... nunca me dejaron ver su cuerpo. Y así me quedé huérfano. - me dijo son una sonrisa, pero una sonrisa apagada...Triste.

yo, estoy en shock, como no sabía que decir, me metí un trozo de hamburguesa en la boca

- no se que decir, no me puedo ni imaginar por todo lo que tuviste que pasar, pero ¿no tenías ningún familiar con el que te podías quedar? - dije con la boca llena

- Nadie quería quedarse conmigo, ya que para todos era un estorbo, menos para mi padre.

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cojo mi teléfono para llamar a mi padre, llevaba días sin saber nada de ellos

- ¿Te has metido en algún lío? - decía mi madre por la otra línea

- no, solo llamaba a papá para que sepáis que me encuentro bien y también si me podriais dar dinero, lo necesito para comprar la comida

- ¿Ya estás pidiendo dinero? Iris, ¿crees que el dinero me sale por el culo? –se escuchaba a mi padre por detrás– no, espera, estoy hablando con tu hija, ahora te la paso, ¡oye! - de escuchó detrás de la línea