Complete Mess (Carlos Sainz)

Día 1088: Body Talk

Ciudad de México, 25 octubre de 2024

Estefanía Garza

El tiempo ha pasado rápido, este año Carlos vuelve a liderar el campeonato de pilotos pero esta vez lo pelea con Checo, se llevan un punto de diferencia pero eso se definirá después, lo que importa es hoy y mañana.
Ya habíamos elegido México para casarnos pero faltaba la fecha y no podía ser mejor que una cerca del aniversario de conocernos, así que el día de mañana por fin uniríamos nuestras vidas en matrimonio.

— Mexicana hermosa — dijo Carlos saliendo de nuestra habitación, en el que era mi departamento pero ahora es nuestro

Traia cargando a Marc recargado en su pecho.

— ¿Ya estás listo? — pregunte mirándolo

— Más que listo — se acercó y besó mi mejilla

El timbre sonó y fui a abrir.
Era Alba, nuestra niñera.

— Adelante, Alba, pasa — dije y le abrí paso

— Hola chicos — dijo Alba entrando al departamento — ¿ya listos para divertirse?

— Por supuesto que sí — dijo Carlos

— Llegaste justo a tiempo — respondi — ya sabes, biberones en la cocina, todo lo de Marc lo encuentras en su habitación, nada de videos en YouTube — dije tomando mi bolsa

— A menos que sean videos de su padre ganando carreras — dijo Carlos riendo y entregándole a Marc a Alba

— Tampoco — conteste riendo y negando con la cabeza — si no quiere dormir, no lo forces que sino cuando lleguemos se despertará así que si Marc se duerme hasta la 1 am, déjalo

— Entendido — dijo Alba

— Cuídalo muchísimo — dijo Carlos mientras tomaba mi mano para irnos

— Como siempre — asintió Alba

— Nos vemos mi niño hermoso — me acerqué y besé la frente de Marc

— Adiós hijo, nos vemos en unas horas — dijo Carlos acariciando su mejilla

Ambos salimos del departamento, listos para ir a nuestra despedida de solteros.

No quisimos hacerla por separado, así que decidimos hacer una fiesta privada con Lando, Luisa, Max y Kelly.

¿Sería la última vez que saldríamos así de fiesta?
No, no está en nuestros planes, pero sin duda queríamos tener esa noche antes de la boda que siempre recordaríamos.

— Creo que le prestaré más la pura sangre a mi jefe — dije mirando la camioneta de Ferrari que Carlos me había obsequiado para movernos cuando estuviésemos en México cubierta con una ligera capa de polvo.

Por fortuna pude conservar mi empleo acá.
Trabajo de manera remota, me han aumentado de puesto y mi jefe y su esposa son quienes me han ayudado a que nuestro departamento acá y este bello auto no se pudran por falta de uso.

— No deja de verse linda — dijo Carlos abriéndome la puerta del lado del piloto para después él subir del lado del copiloto

Disfrutaba mucho manejar este auto y él lo sabía.

Encendí la camioneta y comencé a avanzar para salir de aquel estacionamiento.

Carlos y yo estamos más felices y unidos que nunca.
La vida con Marc es perfecta.
Carlos ha demostrado ser el mejor padre que esté Niño podría tener.
En casa se la pasan jugando con piñón, Carlos lo recuesta en su pecho y pone las carreras de fórmula 1 y le explica lo que va pasando aunque Marc seguramente no tiene idea de lo que su padre le habla.
O tal vez sí.
Este Niño trae el automovilismo en la sangre, teniendo en cuenta que es hijo de Charles Leclerc, siendo criado por Carlos Sainz Junior, teniendo como abuelo a Carlos Sainz y como tíos a Max Verstappen y Lando Norris, algo debe entender, ¿no?