Complete Mess (Carlos Sainz)

Día 561: Gran Premio de Emilia-Romaña

Imola, 07 de mayo de 2023

Carlos Sainz

Hoy es la séptima carrera de la temporada y no puedo negar que he esperado ver a Estef pero parece que no ha venido con Charles.

Ni el jueves, ni el viernes, ni ayer sábado, ni todos los fines de semanas pasados.

Aunque para que quiero más tortura si fue suficiente con aguantar toda la celebración que le hicieron a Charles por ser el recién casado en nuestra primera carrera.

Además, la tensión entre nosotros ya no se basa solo en Estef.

Se basa en el campeonato.

Todos los medios hablan de Ferrari, de Charles y de mí.

"Los dos pilotos de Ferrari son los contendientes por el campeonato"

Así es, ambos encabezamos la tabla de puntos del campeonato esta temporada. Por ahora yo voy en primer lugar y el en segundo pero la diferencia de puntos no es mucha.

Nos sigue Checo en 3o y Max en 4o.

No sabemos que ha pasado con el auto de Red Bull este año pero agradecemos lo que sea que ha sucedido pues ahora nosotros somos el equipo a vencer y no quienes deben preocuparse por vencer.

Cada fin de semana es un 1-2 de Ferrari, alternando el primer lugar.

Charles y yo hemos peleado muchisimo en la pista pero por ahora nos mantenemos limpios: sin ningún choque.

Pero la tensión que se siente en el hospitality cuando ambos entramos es enorme.

Jamás habia visto a Ferrari tan polarizado pues ahora nuestros mecanicos e ingenieros no quieren dirigirse la palabra pues ocultan las mejoras que le hacen a nuestros respectivos autos.

— Carlos, en menos de 5 te espero en la parte de atras del garage para calentar — dijo Rupert

— Sí, ya voy — respondí terminando de abrochar uno de mis tenis

Me amarré el mono en la cintura, acomodé un poco mi pelo y salí casi corriendo.

Por lo regular Rupert procuraba ganar el mejor lugar para entrenar y sin que nadie nos viera, en especial Charles y su entrenador, así que debía apurarme.

Bajé rapido las escaleras del hospitality de Ferrari, atravesé el lobby del mismo y al salir por la puerta choqué con alguien que venia tan apurada como yo, casi tirandola al piso.

— Disculp... Estef... — dejé mostrar mi alegría al verla despues de meses.

La última vez que la vi fue cuando termine todo en Mónaco.

Y sí, fui consciente de mi decisión y no me entrometería más, pero a esta mujer es imposible dejar de amarla y aunque no iba a hacer nada al respecto, me daba un gusto inmenso encontrarla de nuevo.

Ella se agachó, recogió algo y lo echó en su bolsa.

— Hola Carlos, con permiso... — me dio una sonrisa leve y siguió su camino dentro del hospitality sin siquiera darme tiempo para decirle adiós.

Negué con la cabeza y continue mi camino hacia Rupert.

— Vamos, Chili, que sino tu mejor amigo va a llegar y no quiero que vea como entrenas para robarle el campeonato — dijo Rupert aventandome un par de pelotas, una a cada mano.

Reí ante su comentario y me pusé en posicion para comenzar mi calentamiento.

Minutos despues, Rupert me pasó mis guantes de box.