Mi unico Príncipe//Bakugou y Tu//

5. ¿Y ahora?

Amanecía, y como era costumbre Bakugou aparecía en tu habitación con los 2 tazones.

-Si me vuelves a dar esa mierda, esta vez te la escupo, no es broma- Dijiste.
-Solo venía a ver como estabas- Respondió.
-Que milagro, tomar eso era un martirio- Dijiste sentándote en la cama.
-Si que eres una exagerada, no sabia tan mal-
-Si, como digas por cierto ¿Qué hora es?- Preguntaste desconcertada.
-Las 7 de la mañana- Respondió.
-¿Las 7? ¿Qué te pasa? Es muy temprano- Dijiste
-¿Qué? Estuviste en cama 5 días, hay que hacer todo lo que no hicimos por ti ¿De qué te quejas?- Respondió irritado.
-Que exigente- Respondiste suspirando.
Bakugou volteó los ojos para después poner su mano en tu frente, verificando que no siguieras enferma.

-¿Ves? La me medicina funcionó- Dijo.
-¿Pero, a qué precio?- Respondiste.
Bakugou empezó a reír, te le uniste.
-En serio que no me canso de lo exagerada que eres- Comentó
-Ay, que lindo de tu parte- Respondiste sarcásticamente
-Bueno ya, vístete, y por favor llévate algo para abrigarte, puede que regresemos tarde, o no- Dijo mientras se retiraba de cuarto haciendo una ademán con sus manos.

Te vestiste, y saliste, supusiste que Bakugou estaría afuera esperándote como la otra vez, tenias razón, ahí estaba.

-Llegue- Dijiste mientras te acercabas a el
-Que inteligente la niña- Respondió levantándose del suelo.
-¡Grosero!- Le respondiste enojada
-Pobrecita ¿Te enojaste? Ven- Dijo sarcásticamente para extender sus brazos y sonreírte.
-Ni loca, eres tan capaz de de tirarme o algo- Respondiste dando un paso atrás
-Buena decisión- Dijo volviendo a fruncir el ceño y bajando los brazos.

Bakugou se dirigió al establo para sacar un caballo.

-¿A donde vamos a ir?- Preguntaste.
-A donde no te importa- Respondió alzando la voz.
-Uy- Respondiste haciendo un ademán de burla.
-Sube- Te dijo mientras subía la caballo
-¿Iremos al pueblo?- Preguntaste mientras caminabas hacia él.
-No- Dijo cansado.
-¿Entonces?- Preguntaste subiendo al caballo.
-Solo agárrate bien- Te respondió.

Empezaron a cabalgar, estabas algo muy cerca de Bakugou, para no incomodar te estabas agarrándote de la montura.

-Te vas a caer- Dijo.
-¿Eh?-.
-Que te vas a caer y te vas a hacer mierda- Repitió enojado.
-Estoy bien, no te preocupes- Dijiste.
-Agárrate de mi, te vas a caer, en serio- Dijo.
-Estoy bien dije- Respondiste.

Bakugou paró el caballo.

-Hasta que no te agarres bien, no vamos a avanzar- Comentó.
-El que quería salir eras tú- Respondiste.
-Mira ___, sígueme jodiendo y te te tiro del maldito caballo- Dijo mientras te miraba a los ojos.

Te le quedaste viendo fijamente a Bakugou, después de un rato empezó a acercar su mano a tu hombro empujándote un poco.

-Está bien, está bien, ya- Dijiste para abrazar la espalda de Bakugou.
-Por fin- Dijo para seguir cabalgando.

Llevaban ya más de una hora cabalgando, llevabas unos días sin dormir bien, y a Bakugou se le ocurre despertarte a las 7.

-¡Hey! No te duermas- Dijo.
-¿Eh? Eh... perdón- Respondiste.
-Ya falta poco, unos 15 minutos- Comentó.
-Bien...- Dijiste para volverte a recostar en su espalda.

Llegaron al lugar, Bakugou volteó a verte, le sorprendió que aún dormida no te hayas caído.

-Oye despiértate- Dijo mientras se movía bruscamente para despertarte.
-¿Ya llegamos?- Preguntaste desconcertada.
-¡Que asco! ¡Me me llenaste de saliva! ¡Asquerosa de mierda!- Te gritó mientras bajaba del caballo.
-Perdón- Dijiste riendo por la reacción de Bakugou.
-¡Vas a lavar esta camisa! ¿Eh?- Gritó
-Si, si- Dijiste sin hacerle caso mientras bajabas del caballo.