Capítulo 18: Verdades rotas guardadas bajo llave

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- Bueno, me alegro de que estés mejor y... -

- Akutagawa – lo cortó Kyoka – No evadas el tema -

Akutagawa dejó escapar un suspiro de molestia y colocó la almohada sobre la cama.

- No sé a qué te refieres - contestó secante.

- ¿Por qué no se lo dices a Atsushi? - 

- ¿Qué tendría que decirle a Jinko? -

- Que él te gusta - respondió Kyoka sin cortarse un pelo.

Un escalofrío recorrió la espalda estremeciéndole. Podía notar como la sangre se le subía a las mejillas. Intentó cubrirse, aunque no tuviera sentido, Kyoka ya le había visto y ya lo sabía.

- Gin - musitó.

- En realidad, no hay que ser Gin-san para darse cuenta - comentó Kyoka con cuidado. 

- Ugh... Bueno, igualmente no pienso decirle nada -

- ¿Y eso por qué? Estoy completamente segura de que a él también le gustas tú -

- Por eso mismo no le pienso decir nada. Ese idiota de Jinko no se da cuenta de nada y no quiero generarle más problemas y confusión de lo que ya tiene -

Akutagawa había pronunciado aquellas palabras con una calma y una seriedad asombrosas. Kyoka se quedó sorprendida de la madured que acababa de demostrar.

- Realmente te gusta Atsushi-kun -

Akutagawa se volvió a sonrojar:

- ¿Por qué no paras de decirlo? - preguntó molesto - Además, no entiendo lo que quieres decir -

- Bueno, lo normal sería que quisieras estar con él a toda costa ¿no? -

Akutagawa se encogió de hombros:

- ¿Qué te hace pensar que él querría estar conmigo? Y aunque ese fuera el caso, prefiero no generarle ningún tipo de preocupación más. Imagina que todo eso que dices es verdad y entonces me asesinan, ¿Cómo crees que se sentiría el imbécil de Jinko? Probablemente se culparía de todo y le haría llorar sin necesidad - 

- ¿Sin necesidad? Tal vez deberías ser un poco más egoísta -

- ¿Egoísta? Kyoka - pronunció Akutagawa fría y lentamente – Yo no soy una buena persona. He hecho cosas horribles sin vacilar. No quiero que Atsushi conozca esa parte de mí. No quiero hacerle daño -

Kyoka asintió en silencio y se metió bajo las sábanas

- Lo entiendo - susurró Kyoka para el alivio de Akutagawa – Buenas noches, Akutagawa -

- Buenas noches Kyoka -

<<Lo entiendo, pero... Tal vez alejándote le hagas más daño a Atsushi que afrontando lo que sientes>> pensó preocupada tapándose con la manta. 

 

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