Jaziel se despertó porque sintió como temblaba su cuerpo.
Le invadía una sensación de placer y al abrir los ojos, vio con horror como Satán estaba entre sus piernas, chupando su pene mientras esté estallaba en chorros de semen.-¡Ah ¿Que estás haciendo?!.- Exclamó Jaziel asustado mientras se subía el bóxer.
-Yo solamente quería despertarte de una manera muy original.- Se excusó.
-Claro, vaya forma de despertarme, pudiste ser un poco más sutil. Y de todos modos, si querías algo de sexo oral, pudiste haberlo pedido.- Se quejó Jaziel mientras se levantaba y se ponía la ropa.
-Pues si, pero no te lo iba a pedir mientras estuvieras dormido. A menos que me metiera a tus sueños, pero déjame decirte que tus sueños son bien random y aburridos.
-¡¿Entraste a mis sueños?!.- Exclamó Jaziel.
-Es gracioso, ¿Acaso no haz visto el capítulo donde Bob Esponja entra a los sueños de sus amigos y?...
-¡Pero sucede que esto es la realidad!... Bueno, algo así.
-Bueno, tu sabes bien que nosotros no somos tan reales, a menos que alguien lea esto o el maricón del escritor nos cancele seguiremos vivos. En fin... Dejemos de divagar y...
Unos golpes en la puerta los interrumpieron.
-¿Y ahora quién es?.- Se preguntó Jaziel.
-¡No hay nadie!.- Gritó Satán y Jaziel lo silenció.
Al abrir la puerta, apareció su fastidiosa casera.
-Vengo a qué me dé una explicación por la grosería de anoche. No crea que esto se va a quedar así hombrecito, porque como ya le dije, yo soy una dama y merezco todo el respeto del mundo. Además, soy una señorita, que no se le olvide y oigame bien, oigame muy pero muy bien....
-¡Cierra el pico pajarraca!.- Exclamó Satán y la boca de la mujer desapareció.
Esta, como era de esperarse, entró en pánico al ver qué su boca había desaparecido e intentaba buscarla en su rostro.
-¿Que le hiciste?.- Cuestionó Jaziel al ver a la mujer sin boca y llena de histeria.
-¿Que le hice? ¿En serio? Le hice un favor al mundo al callar a esta desgraciada. Luego dicen que mi casa es el infierno, pero escuchar a esta cacatúa es peor que cualquier infierno.
-Devuelvele la boca, está bien que no es mi persona favorita, pero me gustaría que pudieras devolverla a la normalidad.
-Uy, que aburrido por todos los demonios del infierno ¡Ja! Pero me sentí como la bruja escarlata cuando le quitaba la boca a
Black Bolt... ¡Puaj puaj! Tengo superpoderes y puedo hacerte mierda.- En la manos del diablo aparecieron dos bolas de fuego mientras las manipulaba de un lado al otro.-Ya deja eso, mejor deberías regresarle la boca.- Dijo Jaziel.
-Ok abuelo, como tú digas. Pero haré las cosas a mi modo.- Satán se acercó a la mujer y la tomó de la cabeza.- Escucha cariño, te voy a devolver esa boquita inquieta, pero vas a estar muy tranquila y no vas a gritar ¿Entendido?.- La mujer asintió mientras intentaba no seguir llorando.- Ok, estamos perfectos entonces.
Satán chasqueó los dedos y la boca de la mujer regresó.
-Ay... ¿Pero que? ¿Quién rayos eres tú?.- Cuestionó la mujer.
-Soy el diablo o Satán, como gustes llamarme.- Se presentó.
-Eres... Eres... ¡Un monstruo!.- Exclamó la mujer mientras se detenía de la pared.
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Devil
Teen FictionJaziel es un chico solitario cuya vida parece aburrida. Pero un día, un sujeto identificado como "Satanás" aparece frente a él y hacen un trato a cambio de varios deseos. La vida de Jaziel cambiará para siempre después de aceptar los deseos que el d...