EL DESEO DE AMAR PARA SIEMPRE

VOY A PROTEGERTE

Pequeñas gotas de lluvia caían del cielo estrellandose en el vidrio de una ventana que pertenecía a una lujosa mansión  en unos de los lugares más lujosos y conocidos de la ciudad.

No solo era conocido por las familias millonarias que vivían en ese lugar existía una familia en particular que hacia de esa calle una de las mejores.

La famosa familia Uchiha vivía ahí una familia reconocida y temida todos en ese lugar sabían que Uchiha era sinónimo de poder y riqueza una ejemplo de familia a seguir por muchos un padre trabajador que veía por el bienestar de su familia dueño de la empresa número uno en tecnologías en todo Japón, una madre cariñosa atenta a todo lo que necesitacen sus hijos y esposo ama de hogar, un pequeño de seis años de edad ocupaba el papel de hermano menor en esa familia llevando una reputación execelente en su expediente académico con las mejores calificaciones de su clase a su corta edad y finalmente el hijo mayor considerado el genio de la familia, heredero a la empresa de su padre con diez años de edad, en la escuela un excelente alumno siendo el número uno en toda la escuela, educado, atento y respetuoso, una familia que muchos envidian,mientras otros solo quieren salir de ella.

Sus manos tocaron la ventana donde podían verse las gotas deslizándose lentamente, estaba sentado en el pequeño espacio que sobresalía entre la ventana y la pared, siguió con uno  de sus dedos el camino trazado anteriormente por la gota.

El chillido echo por la puerta anunciaba que había sido abierta, sus ojos no fueron apartados de la ventana a pesar de saber que eso enfurecería al hombre que hace un rato había abierto su puerta.

-Tu madre a llegado junto con Sasuke baja a ayudar a poner la mesa-

Aquella voz fría y ronca había causado un escalofrío en su columna vertebral, alejo la vista de su ventana dirigiendo su atención al hombre frente a el.

-Bejare en un momento padre-

Respondió lo suficientemente alto para que su mayor lo escuchará, su padre asintió con la cabeza dándole una última mirada de advertencia que su hijo ya entendía a la perfección, salió de la habitación dejándolo con su privacidad.

Suspiro pesadamente con resignación miro una última vez a la ventana antes de ponerse de pie caminando a su clóset sacando de el una sudadera gris con un estampado de un pequeño gato se la coloco cubriendo aquellos vendajes improvisados en ambos brazos una señal muy clara que a su padre no le gustaba que tocaran cosas de su despacho.

Salió de su habitación caminando por el pasillo, dolía y mucho, sus brazos pinchaban como si varias agujas los estuvieran atravesando y el ardor era horrible apenas y podía tolerarlo.

-Sasuke tu hermano está ocupado bajara en un momento-

La voz de su padre siendo dirigida a su hermano menor hizo que caminara más deprisa bajando las escaleras saltando.

Cuando al fin se vio en el último piso observo a su hermano hacer un puchero como reproche a lo dicho por su progenitor, oh si Sasuke supiera lo mucho que a su padre le disgustaba que hicieran eso.

-Nissan!!-

El pequeño de seis años corrió abrazando a su hermano mayor haciendo a esté tambalear un poco por el impacto recibido, el mayor lucho para que una mueca no gobernará su rostro por el dolor de sus brazos al ser apretados.

-Hola Sasuke ¿que tal te fue hoy?-

Una pregunta tan sencilla hizo que el pequeño sonriera y un brillo especial se apoderará de sus ojos porque Sasuke sabía a la perfección que esa pregunta echa por su hermano no era solo para hablar de temas académicos o sobre sus notas como solía hacerlo con su padre, no su hermano quería saber verdaderamente como había sido su día, si había echo un nuevo amigo, si por fin las niñas fastidiosas lo habían dejado en paz.