Hagamos un trato, eres mío.

Capítulo 34

Jimin asintió.—Kookie....—Jimin levantó la mirada al chico.—No supe que decir porque tú y yo no somos eso.—dijo haciendo un puchero triste.

—¿No somos qué?

—Novios.

Jungkook ladeó la cabeza.—Bebé, por supuesto que lo somos, digamos que lo di por hecho el día que fui a buscarte a tu casa.

—Pero yo...no.

—Lo siento, creo que no debí haberlo hecho de esa manera.—Jungkook hizo una mueca incómoda.—Park Jimin ¿Quieres ser mi novio?—Jungkook elevó el rostro de Jimin para mirar sus ojos.

Un sonrojo invadió él rostros del rubio.—Si.—asintió repetidamente sonriendo.

Los brazos de Jungkook lo envolvieron.

—Y yo pensando que eras mi novio todo este tiempo.—sonrió Jungkook.

Jimin se aferró con fuerza a Jungkook. Ahora podía llamarlo "su novio"

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La relación era perfecta para ambos. Habían creado una química extraordinaria.
Jungkook le había contado todo a su madre, que estaba  enamorado de un hombre extraordinario, que parecía  un ángel, que era tierno e inteligente y que seguro algún día sería un gran enfermero.

Su madre insistió en conocerlo, a Jungkook la idea le parecía genial pero pensaba que la situación podría abrumar a Jimin. No obstante, se atrevió a pedírselo, sería el cumpleaños número 50 de su madre y habría una gran fiesta en su casa, con familia y amigos. Eso tal vez ayudaría a que Jimin no se sintiera tan cohibido en la presencia de sus padres.

Jimin por supuesto que lo pensó dos veces. Tenía  en mente muchas cosas en contra, como el hecho de ser un chico y que a esa fiesta asistiría gente demasiado pretenciosa y con dinero. Jungkook insistió y como era costumbre, Jimin jamás le podía decir que no a su novio.
-¡Bebé! Sería el más feliz  sí mi mamá te conoce. Le he mostrado fotos tuyas, pero quiero que vea tu adorable sonrisa en vivo y a todo color.

—Kookie sabes que no puedo decirte que no.—Jimin rodó los ojos.

—Entonces dime que si y ven conmigo. Estaré por ti a las 8. Seguramente Jin llevará a Tae. Hoseok y Nam también irán así que te sentirás a gusto.—sonrió dejando un pequeño beso en la punta de su nariz.

Jimin dijo que si. Jimin siempre decía que si a todo lo que Jungkook pedía...

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—Conocerás a tu suegra.—se burló Tae.

—En esa casa también estará la tuya.—devolvió Jimin.

—La conozco ya. No es algo que me afecte tanto como a ti en estos momentos.

—Me da gusto Tae, finalmente estamos felices con personas increíbles.

—Lo estamos.—asintió Tae.—Aunque la madre de Jin aún tiene sus reservas conmigo, Minie. La señora ama a su hijo y aún no parece tan relajada conmigo pero la entendí hasta que Jin me contó todo lo que le pasó.

Tahyeung había tenido su primera vez con Jin de una forma peculiar, enterándose del pasado de su novio...

Durante varias citas los invadió la necesidad de de devorarse uno a otro  pero Taehyung aún se sentía nervioso para dar el paso y Jin era prudente con el chico.

No fue hasta que una tarde que un orgulloso y feliz Jin llevaba a su chico rodeado de su brazo para salir del restaurante a donde lo había llevado a una cita. La sonrisa de Jin desapareció cuando hizo alto total frente a un hombre moreno y atractivo con rasgos asiáticos bastante marcados.

—Jinnie.—dijo el hombre.

—Seo Joon.—murmuró Jin con una expresión de tristeza que invadió su rostro.

-¿Cómo has estado Jinnie?—dijo ignorando por completo a Tae quien pudo percibir la tensión en el aire.

—Bastante bien últimamente.—se recompuso Jin.

—Tengo que irme espero que tengas un buen día Seo Joon.—el tono de Jin no era amable y era algo que Taehyung, jamás había visto.

Seo Joon continuó bloqueándole el paso a la pareja.—¿Él es...?—preguntó mirando al chico junto a Jin.

—Mi novio y tenemos que irnos ya.—Jin empujó con su hombro hostilmente al chico para abrirse pasó y salir del lugar.