Crossover entre Supergirl y el UCM (Universo Cinematográfico de Marvel)
Cuando Kriptón murió, sus restos cayeron sobre Daxam ocasionando la destrucción del planeta.
Dos naves lograron salir ese día antes de que todo fuera destruido. En una nave sali...
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Alone—Ava Max & Alan Walker
Narra Dani-El
Golpeé la celda, desesperada por salir. No tenía idea de lo que haría mi madre, pero la Tierra podría ser repercusora de los planes siniestros que se forman en su loca cabeza desquiciada.
Lo que más me preocupa es saber donde y como está Lena. Ella está en la nave, pero cuando entramos me trajeron directo a la celda y no pude ver a donde se la llevaron.
No sé cuanto tiempo ha pasado, pero comienzo a desesperarme.
—Me impresiona saber que serías capaz de asesinarme—la voz de mi madre resonó en la celda.
—Me di cuenta que no quiero ser una heroína sino puedo proteger a la persona que más amo
—Siempre te dejaste llevar por tus sentimientos. Por eso no serás una buena reina, Daxam necesita gobernantes que sepan controlar y dictar arbitrariamente
—¿Y mi padre?—pregunté sin ninguna expresión.
No respondió. Abrió la celda y entró con guardias siempre protegiéndola.
—Debo admitir que escogiste a una buena pretendiente. Lástima que sea ella y no él—rodé los ojos con fastidio.
—¿Dónde está Lena?
—Lena representa lo mejor de su especie. Es inteligente, bella y se preocupa por los demás. Definitivamente la quiero en nuestra familia—dijo moviendo las manos con la elegancia que la caracteriza.
—¿A qué te refieres?—no respondió.—¿Para que me quieres contigo si ya tienes a Mon-El?
—Porque siempre es bueno tener una hija para posibles alianzas. Sobretodo una tan linda como tu—apretó ligeramente mi mandíbula. Me solté bruscamente de su agarre.—Sé que no lo entiendes, pero me prometí ayudarte con tu problema, y un esposo solucionaría todo. Serás la hija que siempre debiste ser
—Un esposo no haría ningún cambio en mi—aseguré, di unos pasos atrás pasando una mano por mi rostro.
—Ya veremos. Por ahora serás de mucha utilidad para facilitar la boda—la miré con el ceño fruncido y ella sonrió, una sonrisa que escondía malicia.
—¿De qué boda hablas?
Fui ignorada y salió de la celda dejando entrar a dos guardias. Uno de ellos me golpeó en el rostro mientras el otro me sostenía.
—¡No! ¡No!—intenté soltarme, intenté luchar, pero fue inútil.—¡Rhea!—otro golpe directo a mi boca.
ཧᜰ꙰ꦿ➢ཧᜰ꙰ꦿ➢
Los guardias regresaron, no me moví, no pude hacerlo porque ni siquiera tenía fuerzas para levantarme, sólo dejé que ellos lo hicieran, de una manera nada amigable, y me pusieran unas esposas.
