Path ⃟Kᴏᴏᴋᴠ

⃝⃕V

Jungkook gruñó, volviéndose loco cuando su omega abrió sus piernas de nuevo, dejando ver su entrada mojada y su esperma saliendo por ella. Trataba de entenderlo, de verdad que luchaba por hacerlo, Taehyung no dejaba de actuar tan extraño, lo peor de todo era que no estaba haciéndole las cosas demasiado fáciles ahora que tenían demasiados problemas en el pueblo y la nación.

Su omega le hacía perder más que la cabeza, la concentración y le obligaba a pasar más de una tarde en su cama.

"Diosa luna, Taehyung" habló grueso el alfa. "Cariño, vas a dejarme seco" se quejó una vez se desplomaba sobre el cuerpo de su omega, el castaño acariciaba sus cabellos de su nuca, buscando alguna forma de convencer al lobo de enterrarse dentro de él, Jungkook se dejaba acariciar por su pareja a la vez que sus ojos se cerraban olfateando el dulce aroma del menor, pasando su nariz por el cuello y hombro, su marca sangrando tras ser atendida.

Era tan extraño todo, su castaño no dejaba de cambiar de actitudes durante esa jodida semana, parecía demasiado dependiente de su presencia, Taehyung jamás trataba de mostrarse débil, mucho menos por su mala experiecias en su pasado y frente a su pueblo, el castaño mantenía la frente en alto luego de su logró en el campo de batalla y jamás se dejaba humillar ante ellos, pero nada estaba siendo igual. Doce meses después del asesinato de su abuela, Taehyung parecía estar reaccionando al dolor y luto dejándole de lado, jamás se imaginó que el sexo sería un desahogo para él.

Cuando encontraron el cuerpo de la mujer adulta, tras los primeros días  no habían podido esperar a los padres de Taehyung para enterrar el cuerpo de la mujer, cuando los adultos llegaron rompieron en llanto junto a su hijo.

Jungkook se sintió la mayor mierda, para su sorpresa los padres de su omega le agradecieron por intentarlo y por cuidar de su hijo, la madre de Taehyung besó su mano confesando que si su cría hubiera fallecido ella no podría seguir adelante; Jungkook pensaba lo mismo. Si ese día el destino le hubiera arrebatado a su omega jamás podría perdonarle, en realidad no podía imaginarse un mundo sin su pareja.

Ahora un año después en la fecha de muerte de la omega, estaban ahí, Jeon había creído que el omega había superado la pérdida, notó que no cuando el menor entró a su nuevo hogar y rompió a llorar al saber que su abuela no podrá ver jamás el fruto de su trabajo, segundos después cuando le tenía entre sus brazos su chico había soltado feromonas como una bomba dulce y le había obligado ir a su nueva habitación de casados, dado que su hogar estaba listo para ellos.

Jungkook no había podido evitar ponerse caliente luego de tanto tiempo de estar bajo el techo de sus suegros y no tener la libertad que deseaba, gruñó miles de cosas sucias al oído de su omega que parecía apunto de entrar en celo y al final sólo logró correrse  tres veces antes de mirar como su pequeña cosita caprichosa deseaba más que ese número de corridas en su interior.

"No sé si es la idea de nuestro propio hogar, mi posible segundo golpe de celo o el hecho de verte, lo que me calienta" admitió con las mejillas rojas, Jungkook se había dejado caer al costado del castaño, atrayendo su cuerpo al suyo y atraparlo entre sus brazos y acariciar su espalda con las llemas de sus dedos haciendo miles de hormigas caminar desde esa zona hasta todo su cuerpo del menor.

"¿Tu celo está cerca?"

Kim se movió, mordiendo su labio. "No lo sé, siento extraño mi cuerpo en esta última semana. Creo que mi olor está un poco más dulce, así que creo que podría venir otra oleada de calor como en el último año"