Diario perdido •Katsuki Bakugō•

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Sabía que su labor como héroe sería ajetreada, cansada e incluso le privaría de varias cosas y comenzaba a vivirlo de primera mano a lado del profesional Endeavor y su compañero Deku donde junto a él, y en ocasiones por cuenta propia, se encargaron de detener a unos diez villanos.

El debut del héroe Deku junto a ella dejó de lado los videos donde fue grabada junto a Katsuki, viendo cómo desaparecían los comentarios respecto a ser una posible pareja de héroes jóvenes y quizá tomándolo como una señal del rumbo que tomaba su relación con el chico explosivo luego de hablar. No podría decir que se arrepentía, pero tampoco negaría que le sentaba mal creer que algo les impedía verse de nuevo, al menos para mirarlo a la cara y saber la verdad que más se temía.

Se guardó aquello para sí misma, cuestionándose la idea de comentárselo a Mina o a Kirishima al ser el mejor amigo de Bakugo. Pero no quería que le regalaran esa mirada llena de lástima y no deseaba leer sus comentarios donde le querían dar ánimos porque no quería creer que había hecho mal al confesarse. Simplemente, quizá, había sido un impulso luego de sentir que a él no le molestaba su cercanía ni su tacto, y tal vez confundía el intento de amabilidad del chico con algún romance adolecente que se imaginó antes de comenzar a escribir sobre él. Optó por guardarlo como un recuerdo lindo de lo que fue y lo que sería a partir de entonces.

—Buen trabajo.

Felicitó Endeavor al tenerlos delante de él en su oficina, mientras (Nombre) permanecía pensativa en tantas cosas que no le dejaban prestar tanta atención a sus alrededores, algunas eran absurdas, otras un poco más serias y unas pocas no le dejaban tranquila. Se sumergió tanto en sus pensamientos que no escuchó la puerta dejando entrar a sus otros dos compañeros de clase y a una persona más.

—Todos han hecho un buen trabajo —la voz de Naomasa se escuchó a sus espaldas.

La chica lobo miró hacia atrás sin poder contener su expresión llena de sorpresa y nerviosismo al ver a Katsuki detrás del jefe de policía junto a Shoto, alegando a saber de qué, seguro por caminar delante de él. Pero eso no evitó que se miraran de nuevo después de varios días. La voz y gruñidos de Katsuki hacia el joven Todoroki dejaron de oírse cuando se encontró con los zafiros de su compañera, apreciando su figura, el desgaste de su traje, golpes y cortes que le hacían pensar en lo duras que también habían sido esas semanas para todos, aunque se veía bien, como si esperara por más pruebas para superar justo como él.

Ambos sintieron un cosquilleó en el estómago. Un hormigueo que recorrió cada fibra de su ser al tener aquel encuentro inesperado.

—Es muy ventajoso tenerlos a todos reunidos aquí —continuó el jefe de policía poniéndose a un lado del profesional—. Como sabrán, hoy es 21 de marzo. La primavera ha llegado y con ello nuestros preparativos para detener a Kohaku de una vez por todas. Por eso me he tomado la libertad de preparar la información en esto —explicó entregando varios folders—. Ahí encontraran lo necesario para actuar con precisión y cuidado.

—¿Héroes encubierto? —peguntó Shoto tras leer algunas líneas.

—La idea es que se crea que no fue filtrada la información. Serán asignados como un grupo de amigos que van a pasar el día en el centro comercial. Endeavor y el resto de los profesionales, continuarán con sus actividades cotidianas, solo que él estará cerca del centro comercial —reveló Naomasa mostrando el croquis—. Como bien saben el lugar cuenta con tres plantas, lo que significa que habrá mucho campo que cubrir si Kohaku y sus secuaces atacan, pero no se preocupen, nosotros estaremos con ustedes haciéndonos pasar por civiles.

—¿Cómo estará la división para cubrir el centro comercial? Habrá mucha gente —cuestionó Izuku priorizando la seguridad de las personas ahí dentro.