Capítulo 04

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Se levanta temprano de nuevo a la mañana siguiente, con la intención de ir a la escuela patinando antes de que su hermanastro se levante de la cama. Sin embargo, no funciona de esa manera, porque, por supuesto, no es así.

Está esperando en el pasillo fuera de su habitación tan pronto como ella sale. Sus ojos se abren como platos ante la vista, sorprendida por su presencia.

- Susan y mi papá dijeron que me asegurara de que me despidiera de ellos esta mañana. Ya se han ido- Le informa.

- Está bien- Responde ella, maniobrando alrededor de él para llegar al baño.

- Nos vamos dentro de 45 minutos.

- Iba a patinar, entonces no tienes que preocuparte por mí- Dice ella.

- No. Estoy conduciendo. Vienes conmigo.

- Billy...

Él la agarra por la muñeca, tirando de ella cerca- Sin peros.

Hace todo lo posible por no estremecerse ante la presión familiar, y no intenta alejarse. Ella sabe por experiencia que solo empeorará las cosas- Bien.

Billy la mira fijamente, con una mirada gélida buscando en su rostro, luego la deja ir y camina por el pasillo.

Max entra al baño y cierra la puerta detrás de ella, las lágrimas brotan de sus ojos y rápidamente parpadea. No hay tiempo para lágrimas y ella se niega a llorar más por su hermanastro de mierda. Él no vale la pena.

Sigue con su rutina matutina: ducharse, secarse el cabello, vestirse y finalmente sentarse a comer un par de tostadas con mantequilla de maní. Se ignoran durante el desayuno y cuando él agarra su chaqueta y las llaves del auto, ella lo sigue sin decir palabra hacia el auto, mirando el reloj con cautela. Diez minutos para el primer timbre.

Se detiene a media milla de la escuela- De acuerdo. Bajate- Él no la mira.

- ¿Por qué estás haciendo esto?- Su voz es apenas audible.

- ¿Por qué estoy haciendo esto?- Repite, levantando las cejas. Su voz es burlona- Bueno, Maxine. He decidido que es hora de que te des cuenta que tan facil lo tienes- Señala hacia la puerta del pasajero- Vete a fuera ahora.

Ella lo mira fijamente por un momento, luego alcanza la manija de la puerta y sale del auto.

Baja la ventanilla- Será mejor que te muevas. Llegarás tarde otra vez- Él le sonríe- Tercera vez esta semana, ¿no?- Le da una calada a su cigarrillo mientras arranca, levantando polvo y hojas muertas a su alrededor mientras se aleja sin mirar atrás.

****

En otras circunstancias, Max probablemente habría dicho que se jodan. Es posible que haya faltado a la escuela durante todo el día, ya que de todos modos tendrá detención. Podría haber pasado el día en la sala de juegos, o andar en patineta en el parque, o en muchas otras opciones más atractivas, pero...

Pero...

Esto no es California.

Aquí, ella tiene al menos un par de personas, tal vez incluso un puñado, que se preocupan por ella. ¿Quién estaría preocupado si ella desapareciera durante todo el día?

Lucas se preocuparía, y por mucho que odie admitirlo, no quiere que Lucas se preocupe por ella. O Will, con quien ella de repente, y como de la nada, se ha unido. ¿Y Will? Ha tenido más que suficiente basura propia con la que lidiar y preocuparse durante el último año.

En comparación, piensa, no tiene motivos para estar molesta por la estúpida mierda con Billy.

Ella llega a la escuela veinte minutos después de que comienza el primer período, pero no se molesta en ir a clase. Pasa el rato debajo de las gradas afuera, leyendo su copia de The Bell Jar. Ella piensa que podría ser demasiado pesado para la clase de inglés de octavo grado, pero también le cuesta guardarlo cuando llega el momento de la clase de ciencias del segundo período. Llega a su asiento dos minutos antes de que suene el timbre y le da a Lucas una rápida sonrisa cuando entra en la habitación.

Mad MaxWhere stories live. Discover now